Abuelo.

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Hamilton sentia su vida irse, solto su ultimo aliento de vida y lo ultimo que vio en ese momento fue a Burr con lagrimas desbordandole los ojos, sonrio tratando de tranquilizarlo, su vida paso frente a sus ojos, su querida esposa, sus adorables hijos, sus amigos, el amor de su vida, John, cerro los ojos dejandose llevar por los recuerdos y murio.

Abrio los ojos encontrandose a una pequeña niña que la esperaba-Vamos, abuelo.

Alexander por fin descansaria en paz por la eternidad y esperaria a su familia. O eso creia el.

-Elo...-escuchaba una pequeña voz a lo lejos, no podia ver nada, estaba oscuro-¡Abuelo!

-¡¿Ah?!-se cayo del sillon, parpadeo y vio a una pequeña niña de cabellos negros, cortos, ojos verdes, lindas pecas adornaban su nariza y mejillas haciendola ver adorable con esos redondos cachetes y ese vestido de color verde para niñas de seis años-¿Quién mierda te mando a despertarme, Rachel?-pregunto parandose, su cabeza daba giros horribles recordando el raro sueño que tuvo donde estaba el calvo. Sintio un escalofrio al darse cuenta que soño con el, peino sus grises cabellos y se estiro.

-¡El abuelo John dice que bajes a almorzar!-grito abrazando a su abuelo de la pierna.

-Pues el abuelo John tendra castigo esta noche~

Rachel se separo de su abuelo rapidamente con una muestra de incomodidad recordando lo que vio anoche.

Hamilton parpadeo confundido para luego cargar a la pequeña en sus hombros hasta el comedor, sentandola en una de las sillas que tenia unos dos libros ya que la mesa era muy alta para ella.

-¿Porqué se demoraban tanto?-pregunto John Hamilton saliendo de la cocina con dos platos, sirviendoles a ambos. Sus rizados rizos tenian tambien ligeras canas, su rostro se veia mayor pero su sonrisa era la misma que cuando era joven.

-El abuelo Alexander es muy dormilon-rio la pequeña.

-¿Qué me dices de ti? Tu duermes todo el dia siendo tan joven-contraataco Alexander.

-Estabien abuelo, ya entendi que no eres tan joven, te dejare dormir para que envejescas con tranquilidad.

-¡John! ¡Rachel me dijo viejo!-lloriqueo cual niño pequeño llevandose un bocado de guizado a su boca.

-Para que la molestas-respondio el sentandose al costado de la niña.

-Abuelo John me quiere mas a mi que a usted, abuelo~

-El te quiere pero a mi me ama-contesto sonriendo ampliamemte al ver molesta a su nieta-¡TDFW para ti Rachel!

-Si, ya lo se, escuche su grito añoche-contesto ella.

-¡¿Y tu que hacias despierta añoche?!-preguntaron ambos mayores sonrojandose al verse descubiertos.

-Tdfw a ambos...

Se paso asi la mañana entre risas y bromas. Llego la tarde y la puerta se abrio bruscamente revelando a un joven de cabellera rizada que llevaba varias bolsas en la mano.

-¡Ya tengo los ingredientes para hacer el pastel favorito de Kyle!-grito Philip llevando rapidamente las bolsas a la mesa.

-¡Papá!-la pequeña corrio donde su padre, abrazandole la pierna.

-Hola pequeña diablita-cargo a su primogenita y la abrazo fuertemente, no la habia visto por doce dias a causa de su trabajo al igual que Kyle, excepto que el no la vio por casi un mes. Aunque su despedida en ambos esposos fue muy zhukulenta, ambos lo extrañaban.

Y esta mañana aviso por telefono que despues de ir al hospital a hacerce un chequeo por las nauseas que tenia iria a casa.

-¿Papí ya llegara?-pregunto Rachel emocionada.

-Papí llegara en dos horas-bajo a su hija y le sonrio-¿Me ayudas a preparar la casa para cuando el llegue?

La niña asintio varias veces emocionada.

-Por cierto ¿Y papá y el tio John?

-El abuelo Alex lo esta...-su pequeña carita se sonrojo-castigando.

-Oh...-su boca se formo un circulo al entender de que se trata ese castigo y al escuchar un pequeño grito y un gruñido de la tercera planta superior preguntandose como es que a su edad lo pueden hacer sin romperse un hueso.

Saco de su saco unos auriculares y se los puso a su niña, poniendole musica a un volumen estandar-Vamos decorando la casa.

-¿Qué?-pregunto sin poder escuchar lo que dijo su padre pero igual tomo su mano.

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-¿Pero que...?-se pregunto viendo la sala de su casa llena de harina y huevos por todas partes.

- ...¡Bienvenido!-gritaron ambos cubiertos de harina, crema pastelera y huevo.

-¿Qué hicieron de mi casa?-se pregunto viendo uno que otro plato roto extrellado en la pared-Philip ¿Qué hicistes?

-¡¿Yo?! ¡Rachel queria hacer malabares con platos!

-¡El me dejo hacerlos!

Kyle vio como sus dos personas amadas discutian y no pudo aguantar la risa.

-¡Se ven horribles!

-¡Yo soy hermoso(a)!-respondieron ambos con el pecho inflado de orgullo por sus buenos genes, aunque confundidos por que no recibieron una regañada por el desorden.

-Dense un baño o no les digo lo que me dijeron los medicos.

-¿Estas enfermo papí?-pregunto Rachel acercandose a Kyle, el lo cargo sin importale ensuciarse.

-No exactamente, pero tengo algo dentro mio...

-¡¿Un tumor?!-preguntaron Philip y Alexander alarmandose, atras de ellos, John se dio un golpe en la frente.

-...No-respondio con una gota de sudor bajando por su cien, bajo a su hija que la miraba curiosa-Pero es algo vivo que me lo quitaran en nueve meses~

Alexander abrio los ojos soprendidos, ya habia captado lo que dijo su hijo.

-¿Qué? ¿Tanto se demoraran en sacartelo?-sin aviso Philip cargo a Kyle y camino hacia la puerta-¡Vamos a ver a un doctor!

-¡Lo que te trato de decir es que tengo un hijo tuyo dentro mio!

Philip se quedo estatico, bajo delicadamente a Kyle y se le quedo mirando, a el, a su vientre, a ambos lo veia y no pudo evitar formar enorme sonrisa.

-¡¿Enserio?! ¡Que alegria!-abrazo al chico que tambien sonreia feliz-¿Cuanto tiempo tienes ya?

-Tengo doce semanas.

-¡¿Y te fuistes asi de viaje sabiendo que tu trabajo acumulas mucho extres?!

-¿Me vas a gritar...?-sus ojos se aguaron y puso una carita de perro arrepentido haciendo que Philip se alarmara y lo abrazara pidiendole perdon.

-Creo que ya se de donde aprendio eso...-susurro Alexander viendo a John que reia divertido-Solo espero que Rachel no aprenda eso...

-Papi ¿Qué tienes entonces?-pregunto Rachel confundida.

-Ah, bueno...-Kyle le sonrio a su hija y peino su corta cabellera con sus dedos-Tendras un hermanito en seis meses.

-...¡¿Enserio?!-pregunto emocionada.

Esa noche fue una de las mas alegres porque ahora todos esperaban al pequeño Michael Hamilton.

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Mi intento de un final bonito.

Ahora solo falta lexi la tortuga y ¡listo!

Adios~.




Debe ser secreto 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora