Narra Harry:
-Es una puta, es una perra, es una zorra...-lance un vaso de vidrio donde había puesto una bebida alcohólica.
-¡Cálmate hermano! -dijo Zayn asustado al ver que había acabado con la mayoría de las cosas de la sala y cocina.
Estaba estallando totalmente, ella era una puta, una puta a quien jamás debí conocer, a alguien que jamás logrará salirse de mi mente y lamentablemente de mi corazón. Mi temperamento estaba fuera del rango, me calló fuera de guardia que ella se fuera así, que no la detuve o que no la seguí, sabía que no se iría para siempre pero era jodidamente odioso aceptar que no podía vivir sin ella. Marie era tan odiosa pero a la vez la mejor chica con la que había estado, la chica con la que llegue al puto de dejarla acariciar mis genitales, algo que prometí que sólo la chica indicada lo haría ¿pero ella era la indicada? Definitivamente ella y yo somos como el agua y el aceite no encajamos, no lo hacemos pero nuestro corazón (por que sé que el de Marie también lo hace) nos quiere juntos, no podemos vivir sin el otro.
-Necesito uno Zayn, dame uno. -camine de un lado al otro con las manos en la cabeza, me sentía desesperado, irritado y enojado.
-¿Seguro?
-Si, dámelo Zayn dámelo. -le ordene.
El saco de su bolsillo del pantalón el cigarro de marihuana, y me lo dio, el me dio el encendedor y yo lo prendí. Desde hace tiempo que no fumaba marihuana, la última vez que lo hice fue cuando me salí de casa para mudarme a Los Angeles, desde ese entonces me independicé y comencé a valerme por mi mismo; Normalmente cuando algo realmente me molestaba o estaba desesperado muy muy desesperado le pedía a Zayn el cigarro de marihuana para relajarme.
Siempre surgía el efecto en mi, comenzaba a alucinar, y decir incoherencias, consideraba que era lo mejor, sentir el gran efecto.
-Vamos a Funcky Buddha... Quiero follar esta noche. -dije estado inmóvil en el sillón mirando a la nada, aún tenía el efecto de la marihuana, me dejaba alucinando y relajado.
-¡Ese es el Harry que conozco! -rió Zayn después de probar del cigarro, camine por las llaves y nos dirigimos a Funcky Buddha.
Narra Marie:
-Ella es Marie, la chica de la que tanto les hablé. -sonrió, los señores con los que estábamos lucían muy elegantes y finos, tenían cara de que cagaban dinero, no creo que me equivoque.
-Hola. -sonreí mientras estrechaba la mano con cada uno de los señores que Valentina dice que son diseñadores
-¡Marie! Ansiaba por conocerle señorita, me ha comentado Valentina que hace trabajos inigualables me encantaría ver alguno de sus trabajos. -sonrió uno de aquellos, el parecía ser el más pequeño de los demás, tenía una sonrisa muy hermosa.
-Si cuando quiera puedo mostrarle algo. -sonreí, realmente me ponía muy nerviosa estar frente a los diseñadores más importantes del mundo, era algo que ni yo me la creía.
-¡No me hables de usted! Cuando tengo la misma edad que tu..-soltó una carcajada yo sólo sonreí apenada- me llamo Louis, Louis Tomlinson.
-Esta bien. -me sentí sonrojada.
-Me encantaría ver sus trabajos ahora pero no se sí traes tus trabajos. -comentó.
Louis era un chico muy lindo, desde que lo vi, llamo mi atención, jamás creí que tendríamos la misma edad, lucía un smokin, iba muy bien presentable, sus ojos estaban hermosos, verdosos como los de Harry pero los de él eran más profundos.
-Si, los tengo en mi bolsa. -sonreí. Siempre venía precavida con trabajos por si se llegara a ofrecer, ahora más que nunca agradecía que traía mis trabajos, era una buena oportunidad.
-Te acompaño.
-Mientras ellos van, Acompañenme. -dijo Valentina.
Camine hacia mi bolso que estaba en una silla, saque mi libro donde tenia fotografías y todo, se los mostré a Louis y el vio detalladamente cada una de las fotos.
-Son muy buenas. -sonrió.
-Gracias.
-¿No haz planeado salirte de Magazine y buscar algo más grande? Digo no te quiero ofender pero tu eres demasiado buena para que no aproveches tu talento para hacer algo más grande. -me miró.
-Estoy bien en Magazine, si me gustaría expanderme pero por ahora quiero seguir hasta cumplir 22.
-Bueno cuando termines en Magazine me gustaría que trabajaras en mi empresa...-sonrió mientras me entregó una tarjeta con sus datos, lo mire y el me sonrió, yo sonreí nerviosamente.
-¿Trabajas en Los Angeles?
-No, en Nueva York. -sonrió.
Yo sonreí y me fije en la hora, eran las 9:30 de la noche, en media hora más daría comienzo al show, quisiera que el tiempo se pasara rápido, me ponía prácticamente nerviosa hablar con Louis, no se porque pero siendo mi primera noche en París me siento muy insegura y poco firme.
-Iré por algo de tomar ¿quieres algo? -preguntó.
-No gracias.
Louis camino hacia la barra de bebidas. Saque mi celular, esperanzada a que Harry me haya mandado un mensaje o me haya llamado pero nada, me tenía decepcionada pero a la vez demasiado tonta porque yo había provocado esto. Mire su número, quería escuchar su voz, necesitaba hacerlo, pero me preguntaba que hora sería allá, suponía que era muy temprano.
-Ya volví. -sonrió, note su mirada en la pantalla de mi teléfono.
-¿Conoces a Harry Styles? -arqueo las cejas.
¿Acaso Louis lo conocía?
-Si...
-Uhmm.. ¿Tu y él son algo? -preguntó temeroso.
-N...no. -respondí- ¿Lo conoces?
Asintió mientras sonreía.
-No nos llevamos bien. -hizo una mueca de disgusto.
-¿Porqué? -fruncí el ceño.
-Tuvimos problemas en el trabajo, desacuerdos y eso....
-Louis... Uhmm, ¿puedo hacerte una pregunta?
Quería saber de una vez por todas en que trabaja Harry porque presentía que no trabaja en lo que el me había hecho creer.
-Dime. -sonrió.
-¿En que trabaja Harry? ¿Que es lo que esconde? -pregunté, Louis miró hacia abajo, y después me miró.
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Gracias por leer!
¿EN QUE TRABAJARA HARRY?
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Quince dias
FanficMarie Morgan es una joven de 20 años, quien ha llevado una mala suerte en el amor. Ella ya está cansada de ser el juguete de los hombres, por lo que ella decide jugar esta vez con uno en especial, Harry Styles. Ella durante "15 días" enamorara al jo...