Dolor. Eso fue lo que sintió Ellie al despertar aquella mañana y abrir los ojos. Dolor de cabeza. Dolor en todas y cada una de sus partes del cuerpo. Aunque había quienes decían que eso significaba que te habías divertido de verdad al salir de fiesta. Ellie no estaba segura de aquello, solo cerró los ojos para seguir durmiendo hasta que se le pasara la resaca. Se giró un poco hacia un lado para acomodarse mejor pasando un brazo alrededor de la almohada blandita que tenía pegada a ella.
Pasados unos cinco minutos su respiración se detuvo de golpe cuando su cerebro comenzó a funcionar y se dio cuenta de que lo que estaba tocando era un poco más duro que una almohada. Su mano recorrió un poco la superficie casi con miedo a abrir los ojos.
Porque cuando los abrió tuvo que contenerse muy fuerte de gritar.
En ese momento no quería saber nada. No quería saber por qué estaba durmiendo en lo que parecía la buhardilla en vez de en su habitación. No quería saber por qué tenía puesta una chaqueta de cuero para dormir. Y sobre todo no quería saber por qué estaba durmiendo con Kihyun. No, definitivamente Ellie no quería saber nada de eso. Solo quería poder levantarse y huir de allí lo más rápido posible antes de que el chico se despertase.
Intentando no hacer el menor ruido posible comenzó a moverse lentamente hacia el lado opuesto del colchón, pero se detuvo abruptamente cuando Kihyun movió la cabeza y su respiración cambió. Pensó que iba a despertar, pero él solo se estaba moviendo en sueños, así que la peliazul pudo respirar con más tranquilidad y volvió a su plan de escape.
Pobre e ingenua Ellie, sin saber que el destino podía tener preparado algo incluso peor para ella. Pues cuando decidió apoyar su mano con total confianza al otro lado del colchón, ésta chocó con algo a mitad del camino. Tragó saliva sonoramente y giró la cabeza con pánico grabado en su rostro.
Esta vez sí gritó.
Gritó tan fuerte del susto que despertó a los dos chicos que estaban a sus dos lados. Porque quién le iba a prevenir de que había algo más alarmante que despertarse con Kihyun al lado después de una fiesta y ese algo era despertarse con Kihyun y Wonho a ambos lados.
¿Y por qué Wonho estaba sin camiseta?
— ¿A qué vienen esos gritos? —Murmuró Kihyun adormilado incorporándose.
Al abrir los ojos y ver el panorama tampoco pudo evitar ponerse a gritar al mirar a Wonho, quien se asustó y también se puso a gritar, lo que hizo que Ellie volviese a gritar.
— ¿POR QUÉ GRITAMOS? —Preguntó Wonho asustado.
— ¡NO ENTIENDO NADA! —Dijo Kihyun.
Ellie no se molestó en contestar, solo se levantó de la cama lo más rápido que pudo y salió disparada de la buhardilla escaleras abajo sin atreverse a mirar atrás por si alguno de ellos la seguía. Fue directamente al baño, necesitaba echarse agua fría en la cara para despejarse y poder pensar con claridad. Agua muy fría.
Entró tan rápido al baño que se olvidó por completo de encender la luz, por eso no previó que se tropezaría y se caería al suelo. El golpe no fue demasiado doloroso, pero como tenía resaca le dolió por mil.
— Qué narices... —Murmuró mientras se levantaba del suelo.
Unos ruidos extraños, como una especie de quejidos, que sonaron dentro del baño la hicieron buscar con urgencia el interruptor de la luz. No sabía qué había allí dentro, pero se esperaba cualquier cosa.
Vale no, definitivamente ver a Changkyun durmiendo en la ducha con Jooheon no se lo había esperado. Como era obvio, la ducha era demasiado pequeña para ambos, por lo que tenían medio cuerpo dentro de la ducha mientras que la mitad inferior estaba fuera de la ducha. Intuyó que se había tropezado y caído con los pies de los chicos.
