®TRIO DE ASEX.

Deliciosa comida picante.

Ashley acercó una silla a la mesa de Adam y fingió interesarse por su trabajo.

-¿Y por qué redactas contratos y no estás como programador?

-Porque en un principio este es el trabajo que me ofreció Andy. Nos conocimos en la Universidad, pero nos reencontramos cinco años después de terminar. Yo no tenía trabajo y el acababa de montar la empresa, me ofreció esto, acepté y me he acomodado.

- Entonces, Andy es tu ángel salvador.

-Yo no lo definiría como tal, tiene un lado bastante diabólico.- Adam rió-¿ y cómo es que te despidieron?

Ash maquilló la historia, no estaba dispuesta a echar por tierra la oportunidad de quedar con Adam.

- Reducción de gastos. Mi jefe creyó que sobraba gente y me tocó a mi. Conocía a Andy desde hace tiempo y me trajo aquí de inmediato en cuanto se enteró.

Adam se convenció de aquello y no hizo más preguntas. En cierto modo, es la clase de cosas que solía hacer Andy, era un capullo pero también un tipo generoso.

- ¿Ashley tienes hambre?

- La verdad es que sí.

- Pues marchémonos de aquí, seguiré mañana con esto.

Ambos salieron de allí y andaron tres manzanas hasta un restaurante pequeño de comida India.

Era un lugar sencillo donde la gente comía pan de coco en la barra. Era la clase de lugar al que le gustaba ir a Ashley, muy diferente de los caros restaurantes a los que Andy le había llevado.

Hicieron su pedido y se sentaron en una pequeña mesa al fondo.

- Esto parece una cita.-dijo Ash.

- Bueno yo no hubiera elegido este lugar para ello.

- Pues a mi me encanta, ¿notas el olor de las especias?

- Si, de hecho es a lo único que Huelo.-bromeó Adam- sabes, antes no te reconocí, estás diferente.

- Vaya ¿ no estoy bien?

- No es eso, vamos estás estupenda, pero entiéndeme, ahora me impones un poco más.

- Bien eso es lo que pretendía, necesitaba sentirme así por una vez, siempre he sido como el patito feo.¿me entiendes?.

- Perfectamente, eso me es familiar.

- Tu no pareces de esos.- le dijo ella.

- Lo que uno parece nunca es la realidad de su ser.

- Que profundo..., pero supongo que es verdad.

- Y tanto que es verdad tan verdad como que me rugen las tripas.

El camarero les sirvió la comida picante, preludio de lo picante que iba a ser la nueva vida de Ashley....