®TRIO DE ASEX.

CAPÍTULO 30

Ashley hizo las maletas en silencio, no avisó a sus padres de que iría a Belvidere. Tampoco era de suma necesidad, los imaginaba como siempre peleándose en casa, podando los rosales del jardín y era mejor aparecer por sorpresa....

Cuando el tren llegó en la estación respiró hondo, agarró su vieja maleta y cogió un taxi, este le dejó en la puerta de su casa, olió e café mocca de su madre y le vinieron buenos recuerdos.

Tocó el timbre y la voz chillona de su madre anunció que se acercaba a la puerta.

- ¡Ashley! Neil es Ash, pasa cariño tienes mala cara.- dijo su madre agarrando la maleta.

- Mamá...- Ash se avalanzó sobre su madre y la abrazó fuerte.

- Ashley estábamos preocupados por ti, no llamas, lo del periódico, ese lío que te llevas con esos hombres....

- No mamá ahora no por favor, solo abrázame.

Su padre apareció con las manos llenas de tierra.

- Hija, mi pequeña Ash, ven con tu padre.

De nuevo se fundió en un abrazó hondo al olor del aftershave de su padre.

- Betty, saca un buen trozo de bizcocho de vainilla para nuestra pequeña, mira que ojeras.

- Estoy bien papá.

- Oh a quien quieres engañar, no estás bien y tienes mucho que contarnos.

- Prometerme que no me sermoneareis ni juzgareis.

- Bueno querida por mi parte lo prometo, pero... tu madre es otro cantar.

- No empieces Neil, siempre soy yo la mala, siempre.

- Dejaros de peleas, vayamos a la cocina me apetece ese bizcocho- dijo Ash agarrando a sus padres por el cuello y arrastrándolos hasta la cocina.

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Andy pasó un mal día en la oficina, no conseguía concentrarse en nada. Dejó avisado que no le pasaran más llamadas. Intentó comunicarse con Ashley un par de veces pero había a pagado su móvil.

- Marga, me voy a casa, estoy indispuesto.

- BIen,¿ quieres que te pase las cosas más importantes al mail?

- Bien, pero no te aseguro que conteste, encárgate tú de todo.

Andy salió lo más rápido que pudo, pensó que igual aún encontraría a Ash en casa haciendo las maletas y podría impedir que se marchara.

Entró en el apartamento para tres y la llamó gritando desde la puerta, subió las escaleras y comprobó que había recogido parte de sus cosas.

- ¡Mierda!

Marcó de nuevo en su móvil el teléfono de Ash, pero seguía apagado.
Salió de la habitación y bajó las escaleras de dos en dos.

De nuevo en su coche intentó recordar de donde era Ashley y en pocos minutos adivinó que era de Belvidere. Puso la ruta en el gps y salió directo a su destino.

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- ¿ Que estas qué?- dijo su madre con una mano temblorosa sobre la taza de café.

- Embarazada Betty, la niña ha dicho embarazada.

- Ya lo se alcornoque... pero Ashley vida mía, ¿Cómo?

- Mamá ya sabes como- dijo Ash sonrojada.

- Dios mio esto es una vergüenza, un despropósito, pero ¿de quien es?

- Mamá no empieces, piensa que es mio, sólo mio.

- Pero eso no puede ser Ashley, ese bebé tiene un padre, pero claro tu eres una mujer libertina, perdona hija la expresión pero estoy en shock.

El padre de Ashley intervino en la conversación.

- Hija mía no voy a negarte que la cosa pinta extraña, complicada o distinta al resto de cosas que hace la gente, pero traer un hijo al mundo es la cosa más maravillosa del mundo y yo estoy encantado de ser abuelo.

- Gracias papá.

- Y no hagas caso a tú madre, debe aceptar que los tiempos cambian y que a veces las personas hacemos cosas por impulso ¿o no recuerdas a Gilbert?- Dijo Neil mirando a la cara a Betty que hacía aspavientos con los brazos.

- Neil eso es pasado, historia, no se para que sacas ese tema ahora.

-¿Quien es Gilbert?- preguntó Ash.

- Un amigo de tu madre, ella misma estuvo a punto de anular nuestra boda por ese tipo.

- Pero no lo hice,¡ te quería Neil!

- ¡Mamá!, ¿y tu la perdonaste?- le preguntó a su padre.

- Claro que la perdoné, todo el mundo hacemos cosas a veces de manera irracional. Sabía que era la mujer de mi vida y ella fue sincera y me lo contó todo.

-¿ No irás a decirme ahora que soy hija de ese Gilbert?

- ¡NO digas bobadas Ashley!- gritó su madre.

- No querida, eres 50% Neil y 50% Betty, naciste tres años después de que nos casáramos- contestó su padre.

- Cierto, pero mi nieto es 50% Ashley y 50% ..... quien sabe- volvió a decir su madre.

- Mamá se quienes son los posibles padres, solo pueden ser dos, pero por lo que a mi respecta por el momento es 100% mío.

- Bien chicas, voy a terminar lo que he dejado en el jardín, Betty pórtate bien con la chica- Neil besó en la frente a su hija.

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Adam llegó a casa y dejó las llaves en el mueble de la entrada, no se oía nada pero no le preocupó lo más mínimo. Su carácter orgulloso le impedía mostrar algún sentimiento en ese momento. Fue a la cocina y se preparó un sándwich rápido que engulló de tres bocados. Subió a la segunda planta y al pasar por la habitación de Ash sintió una extraña sensación, algo le impulsó a entrar y descubrir el armario abierto y algunas de sus perchas vacías.
No podía creer que se hubiera marchado, no después de reprocharle a el su huída a Japón, eso avivó su enfado y salió de allí dando un portazo.

No iba a llamarla, esperaría un par de días, no había desmantelado su habitación por completo y eso era indicador de que volvería.