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Camila

Salí de aquel departamento de Lauren furiosa, quería estar con ella y justo tiene que pasar esto. Definitivamente pareciera que el destino no quiere que estemos juntas, siempre se presenta algo y tengo que dejarla sola. Chifle varias veces hasta que un taxi paro en frente de mí, entre en el dándole la dirección al chofer él puso al instante el auto en marcha, la rabia se había apoderado de cada centímetro de mi cuerpo, no tenía planeado ver a Dianna, por lo menos no ahora, quería pasar el resto de la tarde con la ojiverde y contarle todo pero creo que lo tendremos que dejar para después. Esta situación cada vez era más difícil, y las mentiras crecían como una bola de nieves que pronto iba a pasar sobre mí y derribar todo a su paso incluyendo mi perfecta relación con la chica.

Estuvo conduciendo un par de minutos más y llegue a la casa donde vive Dianna con sus padres, baje del auto cerrando de un portazo la puerta, me acerque y toque el timbre de aquella casa que por tanto tiempo he estado visitando, y que hoy en día me hace dudar en volver a pisarla toque, y luego de unos segundos la chica salió con una sonrisa en el rostro, no me permitió hablar pues me tomo de la mano jalándome hacia dentro de la casa. –Hey, hey. ¿Qué te pasa señorita? Me puedes explicar ¿porque me jaloneas así? –pregunte a la rubia mientras me detenía y la miraba con el ceño fruncido, pero no obtuve respuesta por su parte. No entendía que era lo que pretendía, me tomo del rostro conectando nuestros labios en un beso feroz, cuando nos separamos apenas y pude hablar ¿Que le pasaba?

-Ah que se debe tu buen humor Dianna

-¿Que no te has dado cuenta? Estoy sola bebe, -dijo señalando el interior de la casa. Creo que tú y yo vamos a aprovechar esta tarde

Estaba sorprendida apenas y podía creer lo que estaba pasando, este no era un buen momento para hacer lo que la chica estaba pensando. Ya sabía a qué se refería... sexo

-Oh Di, -dije acercándome a ella. -No creo que sea buena idea hacerlo, tus padres podrían llegar en cualquier momento y si nos descubren sabes que nos meteríamos en serios problemas

-No Camila, eso no sucederá. Mama está de viaje y los demás llegaran al final de la tarde, porfis -suplicaba la chica

-No lo sé, no estoy muy segura, ¿Qué tal si aparece tu hermano Robert? Tú sabes que a él no le gustan estas cosas. Intentaba excusarme a como dé lugar con la chica. En el único sitio que quería estar era con Lauren haciendo el amor.

-Nada de eso. -dijo tomándome de la cintura. -Sera aquí y ahora.

-Dianna

-Shh, Callada Cabello. Dijo tomando mis labios y uniéndolos con los suyos.

Me beso, sin darme oportunidad de contestar, todo estaba sucediendo demasiado rápido cuando me di cuenta yo estaba en ropa interior sobre la cama y Dianna encima de mí besando mi cuerpo, solo cerraba mis ojos y miles de imágenes llegaban a mi mente, mi cuerpo no estaba respondiendo como siempre de hecho apenas y me movía. -¿Estas bien? -pregunto la chica mientras me acariciaba. Solo asentí, y ella continúo; beso mi cuello con desespero y fue bajando. Apretaba con fuerza las sabanas, después de un par de minutos con los ojos aun cerrados, cuando los abrí el rostro de Lauren apareció frente a mí, sus ojos verdes me miraban con tanta intensidad que me hacían estremecer, pero volví a la realidad cuando escuche su voz, no era Lauren, era Dianna mi novia.

-Eso estuvo fantástico Camila. -murmuro la chica en tono alegre, me pego a su cuerpo.

-Sí, si claro. -dije dejando escapar un suspiro, no me estaba sintiendo bien

-¿Seguimos o estas cansada?.... Dios esta chica era insaciable

Levante mi cara conectando mis ojos con los de ella. -Creo que es suficiente por hoy Dianna Deberíamos recoger todo, tus hermanos podrían llegar en cualquier momento. -continúe hablándole mientras buscaba mi ropa y comenzaba a vestirme y ella hacia lo mismo.

Una Historia Diferente (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora