Eres mio imbécil (Finn Wolfhard y tu)

Capitilo 1-llegada

Narra _____:

Desde que tengo uso de razón, cada verano mi madre me manda a un campamento, si, los tres meses de vacaciones 

Hasta los doce años me mandaba a campamentos diferentes, pero desde los trece años en adelante comenzó a enviarme a uno en especifico el campamento "Carp Diem". Es un lugar muy grande con áreas verdes y cabañas en donde siempre eligen a ocho personas para convivir ahí. Todos los veranos me toca compartir la cabaña con mis dos amigas Sadie y Millie. Haci que siempre se nos hace divertido nunca nos toca con personas que no sean de nuestro agrado y espero que este año no sea diferente.

..

- ____, levántate llegaras tarde al autobús- grito mi madre desde el primer piso

Me puse de pie adormilada, me di una ducha y luego me vesti. Tome mis maletas y baje las escaleras.

-Estas preparada para una verano excelente?-pregunto mama mientras servia el desayuno

-Si- respondí con el mismo tono de vos que ella pero de manera sarcástica- por que tengo que ir todos los veranos a estos lugares recuérdamelo por favor.

-Por que sabes que salgo del país todos los veranos para trabajar.-

-Cuando tenga dieciocho lo primero que haré es salir de aquí-dije de mala gana y dándole un bocado a mi tostada.

-Tienes dieciséis, quedan dos años- sonrió.

La mire en silencio. No me molestaba tanto ir a campamentos, pero ya estaba cansando ira cada verano a encerrarme a uno.

Al llegar en donde nos recogía el autobús, nos sentamos en una banca que estaba vacía.

-Bueno hija, ya sabes todo, si...-

-Si lose. Si tengo un problema te -la interrumpí.

Me sabia ese discurso de memoria.

Ella me sonrió con nostalgia y me abrazo con fuerza diciéndome "Cuídate, no hagas cosas malas, te estaré llamando". Siempre me decía lo mismo, podía cambiar el repertorio siquiera un año, el próximo año le escribiré en una hoja lo que tiene que decirme.

Cuando mi madre se marcho en el auto, me quede, me quede sentada mirando a las personas que ahí se encontraban. Poco duro hasta que el autobús llego y se bajo una campista, nos saludo y luego comenzó a hablar. Me puse de pie y me acerque a la multitud para poder oír mejor.

-Buenos días ¿como están todos?- pregunto bajándose del bus sacando una hoja que supuse que era la liste del campamento.  Ahora comenzaba a llamarnos para subir al autobús. Lo sabia cada año era igual.

-Comenzare a llamarlos para que vallan subiendo- indico

Todos los que esperábamos en ese sector ni siquiera eramos una cuarta parte de todos los que iban al campamento.

-_____ T/A me llamo.

Le pase mis maletas al sujeto encargado y yo subí en silencio, me senté en el lugar que me indicaron a lado de la ventana y espere a que subieran todos el bus era de dos pisos, muy cómodo, creo que demasiado, ¿cuanto dinero gastara mi madre en esto?

Pasaron unos minutos y un chico se sentó a mi lado, lo mire en silencio y enseguida me pareció muy conocido. 

-¿ ____?- me pregunto sonriendo.

Entrecerré mis ojos buscando entre mis recuerdos, realmente soy como Doris de buscando a Nemo.

-Soy Noah ¿no me recuerdas?- pregunto ofendido y con tono de burla.

Ese tono yo lo conocía, no puede ser....... 

-Noah-lo abrace-Lo lamento, estas muy cambiado, no sabia que vendrías a este campamento.

El río mirándome.

A Noah lo conocí en un campamento-suma novedad- cuando era mas pequeña, nos llevábamos muy bien y siempre andábamos juntos para todos lados. No lo reconocí, pero en mi defensa el esta muy  cambiado, tonificado y guapo. Aun hací sigue siendo el imbécil que me lanzo al barro a los doce y que se parece a mi hermano.

-Tu también, no te había reconocido hasta que vi esto- dijo señalando una pulsera de mi muñeca, de hecho me la había regalado el.

-Y la tuya- le pregunte tomándole el brazo, pero ahí estaba.

-No me la sacare- sonrió con ternura.

Siempre escuchaba música en el viaje al campamento, pero esta vez converse con Noah las tres horas de viaje, debíamos ponernos al día en nuestra vida. Me contó que venia a este campamento desde el año pasado, pero jamas me había visto o quizás si, pero no nos reconocimos.

Al llegar al campamento, nos bajamos en orden y nos formaron en frente de un escenario, de las maletas se encargaban los funcionarios, ya que al traer nuestros nombres y apellidos era mucho mas fácil hacerlas llegar a nuestras cabañas.

Comenzaron a llegar mas buses y a bajarse muchas mas personas, todos se reían y abrazándose, pero yo me mantenía aferrada al brazo de Noah. 

-Mira los rompe corazones-señalo mi amigo a un grupo de chicos que se juntaban mientras se bajaban del autobús. Eran entre seis y siete chico. Todos altos, tonificados y linda sonrisa. Claramente jugaban fútbol americano. Todas las chicas volteaban a mirarlos y encime les subían mas el ego diciéndoles cosas como "te daría mil hijo". No es para tanto todas cotillean sobre lo guapos que son ellos y bueno...... Ellos ignoran a todo el mundo y viven en su mundo de "Soy el Dios del olimpo".

-Mira la barbie y sus fotocopias-dije señalando a Millie.

Millie es la hija de la dueña del campamento, mucho dinero, buen físico, y linda sonrisa, pero insoportable como ella solo podía serlo, también envidiosa y fastidiosa. Todos lo privilegios de su cuerpo y lindo rostro, se borran con su personalidad. Lo mas gracioso es que tiene dos amigas que la adoran y quieren ser como ella, le copian todo y la siguen a todos lados. Sus copias, Ceci y Susi. No bromeo esos son sus nombres. Si, yo me rei un mes completo al saber que esos eran sus nombres y no por lo feos que son, sino por el parecido entre ellos.

-¡____!- escuche eufórica mente y voltee a ver quien era.

¿Quien mas podría venir corriendo eufórica mente hacia mi? ¡Claro! ¡Mis amigas!.