Capítulo 1.

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-Gabriella, despierta.-Lysandro, mi hermano, me empezó a sacudir. Me dieron ganas de arrancarle la mano. Hay que ser mala gente para despertar a tu hermana cuándo está soñando con el chico el cuál está enamorada. Ay, Armin... Si hubiera seguido dormida...

-Ya voy, ya voy... Dame tiempo...

-Si me hubieras hecho caso cuándo te dije que apagaras el maldito ordenador ahora no tendrías tanto sueño. ¿Cuánto has dormido?

-Pues de las tres a las seis y media, tres horas y media. No está mal, ¿no?

-Hay que dormir ocho, señorita, así que fatal. Hoy te vigilaré para que duermas a una hora correcta.

-Sé que todos echamos de menos a mamá y a papá, pero no hay motivos para convertirse en ellos, Lysandro-vi su mirada ausente. Me había pasado. Nuestros padres habían muerto hacía apenas dos años, y estábamos a cargo de Leigh, nuestro hermano mayor, que de suerte fue mayor de edad por los pelos. Si además de huérfanos hubiéramos tenido que ir a una casa de acogida, o a un centro de menores, no sé que hubiera hecho-. Oye, lo siento. No ha estado bien lo que he dicho. Perdóname.

-No pasa nada, en algún momento habrá que superarlo, ¿no? El desayuno está preparado. Intenta darte prisa, es el primer día de instituto.-desapareció por la puerta y entré al baño. Me di una ducha rápida y me vestí. Lysandro no paraba de decir que debería llevar ropa victoriana, cómo él, pero no me va ese rollo. No me gusta llamar la atención.

-Castiel nos espera en el parque, ¿vale?-dijo Lysandro en cuánto aparecí por las escaleras.

-¡Vale!-Castiel también es uno de mis mejores amigos. Él y Lysandro tienen una banda de música, y son inseparables (Castiel dice que Lysandro es su mejor amigo y yo soy su mejor amiga tabla).

-Gabriella, date prisa. No quiero llegar tarde.-él ya estaba recogiendo sus cosas.

-La libreta.-le dije. Luego se pasa el día buscándola porque ni siquiera recuerda dónde la ha perdido. Si no fuera por mí, ese día se habría quedado en la mesita de la televisión.

-Gracias.-la recogió y la guardó. Yo dejé el bol de los cereales vacío en el fregadero y cogí la mochila. El veloz Lysandro ya estaba fuera de la casa.

-¿Por qué tanta prisa?-cerré la puerta y tuve que correr hasta llegar a él.

-Es que últimamente Nina se pasa a la hora de ir al instituto. Cúbreme en caso de que la veas.

-¿Con mi metro cincuenta? Mira, hermano, es de las poquísimas diferencias que tenemos...-y es cierto, mi hermano, a pesar de ser mi mellizo, me saca tres cabezas.

-¡Lysandro, tabla! ¡Cuánto tiempo!-Castiel nos llamó desde el parque. Estaba apoyado en un árbol.

-Me llamo Gabriella, y, idiota, nos vimos ayer.

-Por eso, ¡cuánto tiempo-me habría gustado no veros! JAJAJAJAJJAJAJAJA-le di un codazo, pero más que hacerle daño y callarle, se rió más y a mi me dolió el codo.

-¿De qué es la chaqueta? ¿De piedra? ¡Idiota, cállate!

-Idiota tú, ¡enana plana!

-Chicos, comportáos victoriano.-Lysandro se inclinó hacia delante, y Castiel y yo lo miramos confundidos, ¿por qué tengo un hermano tan raro?

-¿Qué pasa, chicos? ¿Preparados para un nuevo curso lleno de emociones?-Alexy se acercó a nosotros con Armin a su lado. Obviamente, Armin jugaba a la PSP. Y Alex me miró a mí en el momento de decir "emociones". Se suponía que ese año me declararía a Armin. Pero yo no lo veía tan claro. De hecho, ESE día era el día de la declaración. Y al ver llegar a Armin y verle cansado y con el pelo alborotado el corazón se rebeló contra mi cerebro y empezó a latir con demasiada potencia. 

❤️ Amor Gamer ❤️ (Fanfic CDM Armin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora