EINAR (*1 Vikingos)

CAPÍTULO 17

Al abrir los ojos, me encontré con el rostro de Einar.

Angustiada, lo abracé. Aún podía sentir la respiración de ese hombre sobre mi piel. Sus manos.

Me aferre a su cuerpo, como si fuese mi fortaleza.

Sus brazos respondieron a mi abrazo.

¿Cómo llegó hasta aquí?

¿Acaso habrá sido él quién me salvo de las garras de su padre?¿Acaso se enfrentó a su propio padre?.

-tranquila- me susurró, intentando ttanquilizarme- yo te protegeré, gisele-agregó.

Su voz sonaba adolorida.

Me sentí reconfortada, al experimentar como el calor de su cuerpo acababa con el frío del mío. .e senti agradecida, cuando sus manos comenzaron a acariciar mi espalda. Me sentía segura.

Me sentía segura al estar entre sus brazos que me protegían de todo mal que me rodeaba.

Fue en ese momento que senti ese sentimiento. Ese extraño sentimiento que nunca imaginé que existiría.

Ese sentimiento, que lo llaman: amor.

Me separó poco a poco de él, acariciando mi mejilla. Su mirada estaba llena de tristeza y confusión.

-él, llego a.....- murmuró, sin terminar la frase.

-¡no!- negué.

Bajó la vista, lamentándose.

-lo siento, cariño- se disculpó.

-tú, no tienes la culpa.¡Fue ese animal!- solté. Defiendolo.

-Me asegurare de que pagué por lo que te hizo- apretó sus puños.

-Nadie puede enfrentarse al dueño de está aldea- dije,con decepción.

-te lo prometo- me miró a los ojos. Prometiendome con su mirada.

Se quitó su abrigo y me cubrió con él.

-Ahora vamos a casa- agregó.

Él,comenzó a caminar pero yo no di ni un sólo paso.Einar,se dio cuenta de que no estaba junto a él, y volvió, hasta detenerse en frente de mí.

-¿Qué pasa?- preguntó, confundido.

Bajé la vista, apretando mis manos contra el abrigo.

-No quiero volver- confesó.

Alce la vista, observando cómo se llevó las manos a su cabello, largando un suspiro.

-No te pasara nada, Gisele.Vamos- aseguró.

-¡no! ¡No quiero volver!- solté un poco más enojada.

Tenía miedo.

¿Quién me asegura que ese animal no volverá por mi?.Einar,no puede estar todo el tiempo conmigo como si fuese un niño.Además tenía que hacerse cargo de su futura esposa,no puede cuidarme todo el tiempo, y no creo que a Astrid le agrade la idea de querer salir con Einar y conmigo, solo porque él me quiere proteger. Por más de que lo intente,no va a poder protegerme.Nadie puede.

-¿y a donde irás?- preguntó, levantando las manos al cielo.

No quería interferir en sus asuntos, no quería poner a su padre en su contra después de todo es su padre. No quería interferir entre él y Astrid.Él pertenecía a esa vida,donde de seguro que está acostumbrado a tratar a las mujeres cómo su padre lo hizo conmigo. Esa es la vida que él tenia que llevar.¿Pero yo?.¡No!.No quiero volver a ver a ese animal, ese viejo verde.