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Todo era tan raro.
Los padres del tal chico del video seguían conversando con el director. Y Tom, él pues, seguía parado.
Quieto, y solo escuchando. Como espectador.

— señores, no quiero ser impertinente pero, creo que deben dejar que Tord salga de su zona de confort. El hecho de que al joven larsson lo molesten tanto, es en lo dependiente que es aún de sus padres. Por lo que... — pausó — lo ven como carnada.

— ¿Está diciendo que tenemos la culpa?

— no exactamente.

— ¿Así? ¿Y Cuál es el plan? — dice patryck aún acariciando y frotando su mano contra la espalda de Paul, cuyo padre angustiado aún sollozaba un poco — porqué yo no veo uno...
Si, admito que hemos sobre protegido en muchas ocasiones a Tord, pero tan solo piénselo, ¿Qué haría usted por su hijo si también lo lastimaran de esa forma? ¿Qué haría usted para protegerlo? ¿Cómo se sentiría?

No dijo nada.

— Al menos yo como padre, podría darle clases en nuestra casa, podría estar con él en la escuela si tan solo pudiera, yo haría cualquier cosa por mi hijo. Y... — "respira hondo Patryck" sus músculos se tensaron un poco, así como su esposo, podría explotar en cualquier momento. Sin embargo, él debía demostrar que puede manejar esta clase de situaciones. Es más razonable y paciente que Paul. Más todo parecía orillarlo a crear un desastre. pero debería resistir otro poco más — si fuese por mi señor director, hubiera hecho arder cada jodida escuela en la que Tord fue atormentado. Y sea cual sea su estupida solución, haga que funcione.

La mirada de Patryck era decidida y desafiante. Y el director lo sabía. Podría sentir su odio a kilómetros, aunque fuesen personas de apariencia bondadosa y tranquilas, sus actitudes eran un tanto bruscas al tratarse de su pequeña criatura.

No era como si fuesen las primeras veces en el que el director se presentara en este tipo de situaciones. Si, hubo varias discusiones con padres de familia protegiendo o sobre protegiendo la mayoría de las veces a sus hijos. Fuesen culpables o no de sus actos.
No era como si no supiera sobre llevar una carga cómo cuidar a niños mal criados que cuyos padres, algunos, piensan que la escuela es una guardería. Fuese el tipo y estilo de vida de esas personas, la única diferencias de esta ocasión, es que los padres de este chico eran soldados, o más bien, generales de un ejército. O al menos así se presentaron. Con eso era suficiente como para tomar esta situación en serio.

Los ojos del director aveces posaban sobre los padres, otras veces sobre el chico que había olvidado de que estaba ahí, y otras mirando sus manos. No sabía que hacer. Estaba bajo el abrumador sentimiento de intimidación.
Su lengua no lograba articular palabras. Estaba ansioso. Le podría hasta dar un tic.

El señor de sesenta años se endereza retomando y mostrado seguridad nuevamente. Con su traje negro y su corbata roja, los acomoda de manera que lo ayude como un desahogo simulado para liberar ese estrés.

Cierra los ojos por un momento inhalando todo el aire posible, dejando oír en la habitación cuando lo exhala, haciendo que todos los individuos de ese cuarto, lo miraran con duda y curiosidad. Manera que logró hacerlos sentir más calmados.

El director se quedó callado por un par de minutos. Creando una expresión con las cejas fruncidas y sus labios un tanto torcidos. Estaba pensando. Hasta que su idea creo una sonrisa amplia en su arrugado rostro.
Además, así fue cuando Tom se dio cuenta de que era su turno en participar en esta situación cuando ese señor de autoridad detrás del escritorio, levantó su abrazo para hacer una seña con su mano y dedo índice para que se le acercase.

— si, si tenemos un plan.

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[TomTord]