Las verdades duelen, pero las mentiras son aún peores.
Todo este tiempo he pensado que la muerte de mi padre fue un accidente que Dios permitió que pasara en determinado momento y no algo que fuese planeado por alguien.
Evans me miraba aturdido, y eso era por que ambos estábamos perdidos en la información que nos había proporcionado Mike.
—No me miren como si estuviera mintiendo. Yo he decidido ayudarlos porque no puedo seguir viendo como el mundo se retuerce ante mis narices —Dice el castaño con firmeza.
Aun sigo sin decir una palabra, el ambiente en el que nos encontramos es frío, para nada acogedor y con Sam allí dentro, no creo que sea bueno hablar de un tema tan complicado.
Pienso y no soy capaz de aceptar lo dicho por Mike, estoy segura de que él no me puede estar mintiendo, pero aún así lo que he escuchado me deja con una intriga frustante y con un sabor amargo que quiere seguir hasta saber toda la maldita verdad.
—Cómo se supone que debemos creerte. Es demasiado extraño que vengas a decirnos todo esto de la nada. Dime, que hago para creerte, primero te adelantas a contarle a Dana de una situación que yo mismo había decido cuando decirle y ahora estás aquí diciendo cosas que nos dejan aun más insatisfechos —Añade un Evans para nada calmado.
Mike se queda callado ante lo dicho por su primo y luego me mira con la esperanza de que yo le crea —Dana, por favor lee esto —Saca su móvil de uno de sus bolsillos y me muestra un mensaje que claramente es de su padre.
En el escrito el señor Foster ordenaba a su hijo ser cómplice de la siguiente jugada.
—¿De qué jugada está hablando? —Menciono después de leer el mensaje.
—No me digas que tiene que ver con la empresa —Interrumpe Evans.
—Es lamentable, pero sí, tiene que ver con la empresa, con tu futuro y con Sam —Responde Mike a su primo.
El silencio que se produce en aquella habitación me llena de nerviosismo. Son tantas cosas las que he receptado hoy que siento no poder más. Así que pido a los chicos ir a otro sitio.
A decir verdad, Evans aun duda de su primo, pero con lo último que dijo no puede quedarse quieto y esperar a que la maldad lance su próximo ataque. Así que toma mi mano, me dice que todo estará bien y que no descansará hasta tomar represalias contra aquel que asesinó a mi padre.
El castaño nos pide que nos encontremos en su habitación en aproximadamente dos horas antes de que anochezca, y nos aconseja ir sin levantar sospechas. Él se marcha enseguida y de inmediato marco el número de mamá para comunicarle que llegaré tarde y que no se preocupe por mi porque me encuentro en compañía de Evans.
—¿Quieres pasar por un café?
—Lo necesito, ¿Verdad? —Añado a media sonrisa.
—Tanto como yo —Responde Evans.
Dicen que las personas que están en estado de coma pueden escucharnos, entonces le decimos a Sam que nada malo pasará y que lo visitaremos todos los días hasta que él decida regresar.
Salimos de aquella habitación y nos dirigimos a la cafetería que se encuentra en la planta baja del hospital. Evans parece que se ha calmado un poco, pero eso no deja al margen el simple hecho de que aunque no lo demuestre, él sufre tanto como yo, se siente frustrado tanto o más que yo, y que descaradamente necesita recibir un abrazo mucho, mucho más que yo...
Entramos al ascensor, ninguno de los dos dice nada, espero hasta que las puertas se cierren, para posteriormente y sin control de mis impulsos lo empujo hacia la pared metálica; Évans me observa aturdido por mi repentina acción y antes de que pueda decir algo, cubro su boca con mi manos y lo beso. Tal vez no fue un beso real, pero cuando me alejo de él noto que el calor se pronuncia en mis mejillas y trato de alejarme después de haber cometido tal acto imprudente, no obstante, sus brazos son aun más rápidos y terminan en mi cintura antes de que me escape. Yo me encuentro con su mirada y me paralizo esperando su respuesta, pero él dibuja una sonrisa triste en su rostro, se inclina un poco hacía mi y deja hundir su cabeza en mi hombro.
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Game Over
Storie d'amoreDana era una chica solitaria, no tenía amigos ni alguien en quién confiar, ella decide estudiar en otra institución educativa en donde piensa seguir actuando como lo ha venido haciendo. El primer día de clases se supone que debía pasar desapercibid...