20 de octubre de 1998
Dear Harry:
Te preguntarás el porque estuve ausente durante estos 5 días, la culpa me carcome el alma. Debí haberte escuchado, pero no, mi orgullo ganó y ahora estas así: con una pierna y costillas rotas.
Lamentar es una palabra muy débil al saber como me siento ahora siendo el responsable de tu accidente. Desaría una y mil veces ser yo quién tenga un yeso en su pierna derecha y una venda elástica en su pecho. Sinceramente odio el destino. Primero fui yo y ahora te tocó a tí.
Por si no lo recuerdas en segundo grado estabamos jugando en la plaza que quedaba a tres cuadras de la escuela, mi mami nos cuidaba ese momento. A unos metros había una fuente de los deseos, mi lugar preferido. Mientras nosotros jugábamos a patear la pelota la cual la tirábamos muy lejos. Yo te había dicho que no patearas demasiado fuerte porque se iría a la calle y un auto la pisaría. Recuerdo que te enojaste por el regaño inofensivo. "Mi mamá y papá son los únicos que tienen que regañarme, tú no puedes hacerlo. No eres uno de ellos". Y saliste corriendo hacia la banca donde estaba mi madre leyendo un libro.
Yo solo suspiré y caminé hacia la pelota que estaba algo lejos. Pero siento que alguien me empujaba al césped. Volteé y era él, Jonathan con su hermano mayor Erik. Ese niño siempre me dio miedo ya que Jonathan le mentía y le decía que yo lo golpeaba. " ¿Qué haces en mi plaza mocoso?", dijo Jhonny. "No es tuya, es de todos. La construyeron para que los niños y las niñas pudieran venir a jugar, no para que los inútiles como tú se apropien de lugares o cosas que no les pertenece" y le saqué la lengua. "Con que molestando a mi hermanito, marica", habló su hermano.
Me tomó de mi cabello y comenzó a darme bofetadas. Yo solo lloraba y gritaba llamando a mi mami para que viniera a ayudarme. No pude defenderme, él es demasiado grande, yo solo soy chiquito y débil. Caí al piso de rodillas (justo como cuando apareciste para pedirme disculpas). Mis mejillas me dolían demasiado y mi labio estaba dañado.
Tomó mi pelota y la utilizó para golpearme la cara. Con la poca fuerza que tenía, me levanté para quitarle mi balón, pero no funcionó. Me empujó y me pateó tres veces la cabeza. Ambos salieron corriendo. A lo lejos escuché a mi madre gritando mi nombre y tú mi apodo " Loueh". Luego solo estaba todo oscuro y se escucha un silencio sepulcrar.
A las siguientes 4 horas desperté en un hospital. La cabeza me dolía demasiado y vi a mis papis junto contigo. Corriste y me abrazaste fuerte. Mis padres también pero agregando un beso en mi frente. Pregunté que había ocurrido. Mi madre dijo que me encontró desmayado cerca de la fuente de los deseos. Yo le respondí que el hermano de Jonathan me había golpeado por motivos que no tiene alguna justificación, solo lo hizo para que el mocoso se sienta feliz.
Después de eso mis padres se retiraron y quisieron llevarte con ellos, pero tú no querías. Te quedaste conmigo y me contabas que no estabas enojado conmigo. De pronto tu confesión me dejó bocabierta: "Yo visité la fuente de los deseos luego de que me enfadé. Pedí que siempre fueras único mejor amigo para toda la eternidad. Luego vi que estabas tirado en el piso, así que le pedí a mi angelito que te cuidara, que nada malo te sucediera y cumplió. Mi angelito te cuidó" comenzaste a aplaudir como un niño de 4 años a quien le regala un dulce por su buen comportamiento. Sonreí y te abrazé. "Seré más que tu mejor amigo, seré como un hermano de corazón, ¿pinki promise?. Había estirado mi meñique como mecanismo para sellar la promesa... Pinki promise, Loueh".
Luego esa promesa se fue disolviendo, al alejarte de mi, aquel hermano de corazón iba desapareciendo de a poco.
Ahora eres tú quien está del otro lado del papel. Pero yo seguiré firme con mi promesa, por más que acepte tus disculpas, no soportaré que te alejes de nuevo de mí.
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Dear Harry- I'm Louis
FanfictionHace 12 años Louis conoció a Harry en el kinder, desde allí se volvieron inseparables. Hasta que comenzaron la preparatoria, Harry dejó de lado a Louis para tener nuevos amigos y ser popular. El ojiazul buscó miles de maneras de llamar su atención n...