Carta 28

118 9 1
                                    

12 de diciembre de 1998

Dear Harry:

Sé que aún somos jóvenes, pero quiero hacerlo. No falta mucho para nuestra mayoría de edad y podremos cumplirlo. Estaremos unidos de por vida. Ese anillo que te entregué significa mucho para mí y te imploro que lo cuides con mucho amor. Mi abuelo se lo entregó a mi abuela como muestra de amor.  Mi padre lo hizo mismo con mi madre. Ahora es mi turno de seguir la tradición familiar, aunque no sea a una mujer a quién se lo entregue, sé quién lo tendrá en su dedo será el amor de mi vida.

¿Recuerdas cuando eras un niño me confesaste que el día de tu boda sería al aire libre porque querías ser un ave? Yo aún lo mantengo en memoria.

Era un día soleado, raro porque casi nunca nunca salía el sol en Doncaster, yo estaba jugando con mi hermanita Lottie junto con  nuestro perrito, Toby. Mi mamá me había dicho que tú venías a mi casa porque tu abuelita se había ido a un lugar mágico donde habitan los angelitos y no podemos verlos, solo en nuestros sueños.

Tuve la oportunidad de planear varios juegos para no aburrirnos hasta que mi mamá terminara de cocinar. Finalmente llegaste vistiendo tu típico abrigo de gatitos. Pero tu mami no venía feliz como siempre, es más estaba muy triste. ¿Qué le sucedió?  ¿Por qué no sonríe? Mi mami la abrazó compadeciendose de su pérdida, ¿qué perdió si tú estas aquí?

Pasamos toda la tarde jugando con peluches, otras dibujando y viendo películas animadas. Cuando llegó la hora de irnos a acostar, tú no querías dormir. Decías que extrañabas a tu abuela y si cerrabas los ojos tenías miedo de perderla. Solo pude abrazarte, no sabía cómo se sentía perder a una persona cual amas.

Como teníamos insomnio, encendí la pequeña televisión que estaba encima del mueble de mi habitación.  No había nada entretenido para ver, de pronto en nuestro programa favorito: "Los Padrinos Mágicos". El capítulo trataba sobre la boda de Cosmo y Wanda.  Al terminar ese capítulo, comenzó Los Power Rangers Fuerza Animal.

"Loueh, ¿tú crees que tu boda será como la de Cosmo y Wanda?", preguntaste inocentemente. En ese momento no supe que responderte, apenas tenía 5 años. "No sé, tampoco sabré si alguien me amará como lo hacen mis papis" respondí. "Yo te amo, eres mi mejor amigo y siempre lo serás" susurraste. "¿Aunque nos enfademos? "... "Si Loeuh, aunque nos enfademos". Mi corazón había comenzado a latir con fuerza que rompería mis costillas. Cuando eres un niño, los sentimientos son demasiados débiles. El amor desde la infancia existe, solo si sabes valorar aquella persona la cual amas con todas tus fuerzas que daría lo que fuera, hasta tu propia vida con tan solo saber que él o ella está bien. Es confuso, a esta edad amas a todos por igual, ya sea niño o niña. A tan corta edad somos bisexuales, y a medida que crecemos, elegimos a quien amar. De tanto pensar, vi que te quedaste dormido sobre mi pequeño hombro, tomé tu cabecita y la coloqué sobre la almohada. "Buenas noches Harry" deseé y cerré mis ojitos llevándome hacia el mundo de los sueños.

Dear Harry- I'm LouisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora