No contaba con aquello.
En mi cabeza, si me rechazabas, sería porque no te gustaban las chicas.
Es decir, de otra forma, tú y yo tendríamos una relación. Por seguro.
Todo el mundo dice que soy hermosa. Y que tengo un cuerpazo.
Así que, cuando levantabas la vista y nuestras miradas se cruzaban, yo te ofrecía una de mis mejores sonrisas.
Tú, sólo ponías una de amabilidad.
No le gustan las chicas, pensé, desilusionada.
Pero entonces tu mirada se cruzó con la de ella. Y tus ojos brillaron.
Y las estúpidas mejillas regordetas de ella se pusieron rojas.
ESTÁS LEYENDO
Ella es gorda
Kurzgeschichten¿Por qué saldrías con ella? Ella es gorda. Y yo soy perfecta. ----- |Historia corta. Lesbian|