Bad Reputation |harrystyles|

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|Elizabeth|

—¡Ni se re ocurra!—grite cuando lo vi acercarse a las gradas corriendo completamente sudado.

No le importo en lo absoluto lo que había dicho hace un segundo y me levanto con sus fuertes brazos sin importar de tirar los libros que estaban sobre mis piernas.

—¡Harry!—grite me dejo sobre su hombro y comenzó a girar— ¡Basta, me voy a marear!

—Eres tan exagerada—respondió riendo dejandome mis pies en el suelo, tomo mis mejillas y beso mis labios— Estoy cansadisimo.

—Y completamente sudado—hice una mueca alejandome de él. Recién había terminado su entrenamiento de fútbol y lo había esperado algunos minutos aquí.

—Reconoce que me veo jodidamente atractivo así—limpio su rostro con la toalla que colgaba de su cuello.

La verdad es que sí, demasiado.

—No se que es lo que entiendes tu por atractivo, pero al parecer no es lo mismo que yo—me encogí de hombros tomando mis libros del suelo.

—Entiendo lo mismo que esas chicas que estan por allí mirandome—me sonrió señalando a un grupo de chicas, al parecer en su primer año de universidad.

Las chicas lo miraban sin vergüenza alguna y me molestaba, demasiado si quiero ser sincera. Me acerque a Harry y sin más lo bese, ellas necesitaban saber que él no estaba libre. Harry era mi chico.

—Mmh...ángel—murmuró sobre mis labios—me encantas demasiado, aún más celosa.

—No estoy celosa—negué enseguida.

—Sí lo estas, pero no te preocupes, estoy demasiado ena...—detuvo sus palabras y negó con su cabeza—solo no te preocupes.

—¿Estas demasiado, qué?—le pregunté sin entender que quería decir.

—Estoy demasiado ocupado en ti...—habló despacio, analizando sus palabras.

—¿Ocupado?—

—Concentrado en ti, en ambos...no me importa que otras chicas crean que soy guapo—se encogió de hombros y solté una carcajada.

—¿Como sabes que ellas creen que eres guapo? Tal vez estan mirándote por ser demasiado horrible— reí y tome mi bolso.

—No soy horrible, obviamente—

Tomo mi mano para comenzar a caminar al estacionamiento en busca de su auto. Abrio la puerta para mi con una dulce sonrisa y luego fue a su lugar para comenzar a conducir a su departamento.

Iba a acompañar a Harry a arreglarse a su departamento, Louis nos habia invitado a un bar para hablar y sellar absolutamente todos los rencores y obstáculos que existían.

—Ángel...Puedes comer absolutamente lo que desees, compré chocolate para preparar tu adorado chocolate caliente—dijo cuando me lance sobre su cama.

Lo mire enternecida mientras quitaba su polera deportiva. Luego la ternura se fue de mis ojos cuando vi con atención su pecho tonificado y  tatuado.

—No te preocupes...no...no tengo hambre—asentí un poco nerviosa al ver como se acercaba a mi con una pequeña sonrisa traviesa en sus labios.

—¿No tienes ni un poco de hambre?—murmuró subiéndose sobre mi.

—Harry...—masculle y de manera inevitable solté una risa al sentir sus dientes mordiendo la piel de mi cuello.

—¿Ni un poco, Ángel?—continuó mordiendo mi piel y me estremeco entre risas—Yo tengo mucha hambre de ti...