Capitulo largo...Léanlo con calma y punteen...Steven.
Steven.
Me miro en el espejo respirando con pesadez, expiro el aire denso dentro de mis cargados pulmones. Debo admitir que estoy tenso y nervioso a la vez. Salgo de la habitación y me encuentro con mamá quien ya esta lista para irnos.
Mi hermana Stefani nos rogó bastante para que la llevemos con nosotros, le dije que no era conveniente y se quedo tranquila aunque no muy convencida pues no di explicaciones. Mi madre espera que termine de hacer algunas cosas en mi atuendo.
El timbre del apartamento suena y miro extrañado a mi madre y a mi hermana, ellas me devuelven la misma mirada cargada de confusion.
Al abrir la puerta no veo a nadie, miro hacia los lados en busca de alguna sombra que me indique de que alguien estuvo aquí.
Nada
Doy un paso hacia atrás decidido a cerrar la puerta, miro al suelo y me encuentro con una sobre sobre la alfombra.
Bingo.
Arrugo el entrecejo a medida de que me agacho para recogerla, la tomo entre mis húmedos dedos. Le doy una repasada mas al lugar y cierro la puerta. Levanto el sobre para que mi madre y mi hermana la vean.
Inmediatamente se acercaron a mi emanado confusión en sus rostros. La abro en presencia de todos en la mesa, abro el papel que solo tiene una corta pero significativa frase:
"Lo tenemos. Nuestro dinero o el"
Y debajo de aquella frase o advertencia lo vimos...
Una imagen de mi hermano abarrotado de golpes, amarrado a una silla de metal, su boca sellada y su cara teñida de sangre seca y moretones repartidos en todo su rostro.
—Santo Dios...—Solté en susurro cargado de preocupación. Mi madre se hecho a llorar en silencio sin decir nada, mi hermana solo se llevo la mano a la boca con estupefacción parecía en shock.
—Pero si nos dieron un plazo de 2 meses—Refutó mi madre totalmente desorientada—Esto es injusto. Tenemos que irnos ahora mismo—Demando con voz decidida.
Y no esperé mucho, mi madre y yo salimos disparados hacia el lugar donde nos encontraríamos con Leonor. Queria llorar, queria romperme en mil pedazos, queria irme lejos y huir de todo esto. Pero no podía. Yo soy el que debo ser fuerte porque si no lo soy todo esto se irá a la pura mierda y moriremos todos.
No voy a ser débil, no puedo ser débil por amor a mi madre. No amábamos a Stefan pero era nuestra sangre y por el pagaríamos todos así que aunque no quisiéramos teníamos que ayudarlo por amor a nosotros mismos.
Llegamos al bufete en donde trabajo y mi madre no puedo ocultar su cara de admiración hacia la estructura de aquel lugar, tanto como yo lo había hecho los primeros días. Yo solo ruego a Dios antes de entrar ahí para no morir en manos de la mujer que hoy me extendió la mano para ayudarme.
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GARRAS Y ESPINAS.
Action•Terminada• Somos las rosas de este gran jardín al igual que somos las cazadoras en este inmenso valle. Podemos llegar a ser la ternura misma como la violencia encarnada. Somos bellas y quizás perfectas pero tenemos un poder, un veneno que puede con...