La voz al otro lado

Ella tiene que pagar

Me tenso mientras Craig se acerca a Erika.
Apenas entiendo algo de lo que ocurre y oír como ella pregunta si es Derek, quien tampoco sé de quien se trata no mejora mi estado de nervios.
Sabía que había un motivo por el que este tío no me gustaba.

—¿Que quieres?—pregunto. Prefiero que se centre en mi y que deje de apuntar hacia ella. Parece que funciona, por lo que respiro algo más tranquilo.
—¡Ella tiene que pagar por lo que hizo! Por su estúpido enamoramiento arruinó mi vida. Lo perdí todo y ahora...
Veo como Erika palidece y retrocede mientras niega con la cabeza.
—Derek, por favor...
—¡Que te jodan, puta! Jodiste mi vida y pagaras por todo.
Erika cae de rodillas mientras llora desconsolada.
Quiero correr a su lado y consolarla, pero el arma sigue apuntándome.
Craig, o Derek, avanza hacia ella, la coge del pelo y tira de él para que le mire.
—¿Creíste que con irte de allí todo sería olvidado? Te equivocaste.
No soporto verla llorar y antes de pensarlo bien doy un paso hacia ella.
—¡Sueltala!
El sonido de un disparo nos tensa, pero ninguno está herido. Apuntó al sofá que está a mi lado.
—Parece que no me escuchaste cuando te dije que no me iría sin ella. Esta pequeña puta se viene conmigo y tu no vas a moverte o te pegaré un tiro y después iré a por tu hijita.
—¡Noooooo!
El grito de Erika nos pilla a los dos desprevenidos, pero Derek reacciona con rapidez y pone el cañón de la pistola en su frente cuando ella ya está de pie, enfrentándole.
—No te muevas.
—Iré contigo, pero dejarás al señor O'Connell y a su hija en paz.
La risa de Derek me pone los pelos de punta.
—¿Señor O'Connell? ¿Crees que no sé que te lo has follado? Mi hermano estaría tan decepcionado... Él te amaba. Te defendió hasta su último aliento. Ese idiota se encargó de buscarte y encontrarte. Te cuidó desde la distancia e iba a venir a por ti. Iba a confesarte sus sentimientos y a pedirte una oportunidad. Maldito desgraciado... Una puta como tú era más importante que yo, su hermano. No mereces nada más que dolor. Y lo tendrás.
Con un movimiento rápido me golpea en la sien con la culata del arma y el grito de Erika es lo ultimo que escucho antes de que todo se vuelva oscuro.