♡ You're The Best Photo I Captured | JITZU

V.

Caminó hasta su casa a paso lento, se detenía en ciertas ocasiones para tomar fotos, en su cabeza solo daba vueltas aquel encuentro con la castaña; había sido raro pero lindo. Su celular comenzó a sonar, lo sacó del bolsillo de su pantalón y observó la pantalla; era su amiga Chaeyoung, contestó.

—Hola, Chae, ¿qué pasa?

—Yodita, ¿podemos salir hoy en la noche? Estoy algo aburrida —Decía Chaeyoung con algo de aegyo desde la otra línea. Tzuyu hizo una pequeña mueca en sus labios, no podía negarse cuando su amiga se ponía en esa faceta y sabía de ante mano que aquella tenía abultados sus labios. Por un momento pensó en aceptar pero a su mente llegó la imagen de Jihyo, ¿por qué? ¿por qué quería verla de nuevo? No lo sabía o tal vez no quería aceptar lo obvio.

—¿Tzuyu? —Hablaron del otro lado de la línea y rápido salió de sus pensamientos.

—Eh...no puedo hoy, Chae. Tal vez otro día —Ella misma se sorprendió, era la primera vez que le decía "no" a su mejor amiga. Hubo un breve silencio, Tzuyu sabía que Chae no lo había tomado muy bien.

—Oh... está bien. Entonces, nos vemos —Colgó sin dejar que la taiwanesa respondiera. Esta se sintió mal pero ese día no quería otros compromisos.

Pasó la mayor parte del día fuera de su casa, haría todo el tiempo suficiente hasta que llegara el momento de llamar a la castaña. ¿Se sentía nerviosa? Eso era poco, no sabía lo que le diría, ella no era de conversar mucho con las personas pero Jihyo hacía que fuera todo lo contrario, quería hablar con ella, quería conocerla. Quería pasar todo el día viendo su sonrisa y escuchando su voz. "¿Qué me estás haciendo Park Jihyo?" Pensó.

Llegó la tarde y tenía el celular en la mano, llevaba alrededor de 15 minutos pensando si llamar o no a la mesera, ¿qué pensaría aquella? Suspiró y miró nuevamente su móvil. Se armó de valor y comenzó a llamar; su pierna se movía incontrolablemente. Sonó una vez, después dos y a la tercera contestaron.

—¿Sí? —Escuchó desde el otro lado, estaba aún más nerviosa, sus manos sudaban, comenzó a relamer sus labios una y otra vez.

—¿Jihyo? —Preguntó y escuchó un "Sí" como respuesta—. S-Soy Tzuyu —Odiaba tartamudear en esos momentos. Escuchó una pequeña risa y su rostro se tornó rojo.

—¡Hola! Creí que no te atreverías a llamar —La voz de la chica era muy animada, aceleraba el corazón de la taiwanesa sin duda—. ¿Llamaste para invitarme a salir? —Tzuyu sentía que moriría de los nervios justo ahí. Las palabras no salían y se estaba frustrando por ello.

—Eh...ta-tal vez. ¿P-Puedes? —¿Realmente la estaba invitando a salir? ¿Dónde había quedado esa Tzuyu que no le gustaba salir con nadie ni conocer personas? Ella misma se sorprendió por ello.

—Wow, ¿realmente me estás invitando a salir? —Risa nerviosa, es lo que escuchó del otro lado. Al menos se sentía bien saber que no era la única nerviosa—. Bueno, ¿puedes venir a las 7pm? —Tzuyu miró su reloj; sólo faltaba menos de una hora.

—Claro, ahí estaré.

—Perfecto, entonces nos vemos Tzuyu —Colgó y se quedó aún con el móvil pegado en su oreja. ¿Qué había pasado? Su mente aún no procesaba lo sucedido. ¿Había invitado a una chica a salir? ¿Y había aceptado? Mordió su labio inferior un momento y siguió pensando en lo sucedido.

Así pasó unos veinte minutos, pensando y pensando, ¿y sí corría lejos? ¿y sí desaparecía mejor? ¿y si se cambiaba el nombre y la cara? Esas opciones no sonaban tontas en un momento como ese. Después pensó, ¿a dónde rayos llevaría a Jihyo? "Joder" Definitivamente no había pensando en eso, ¿qué se supone que se hace en una cita? ¿a donde se va en una cita? ¿Era una cita lo que tenía con Jihyo? Sentía que se iba a volver loca con tantas preguntas. Un pequeño sentimiento de miedo se apoderó de ella, se estaba arrepintiendo de ir.

Mientras tanto en el restaurante, Jihyo miró la hora; 06:59pm. Su turno acabaría, así que se apresuró a terminar unas cosas más. Se quitó su uniforme y se despidió de sus compañeros y jefe. Se paró fuera del establecimiento a esperar a la chica alta, aún no entendía cómo fue que aceptó salir con ella, no la conocía mucho pero le parecía muy linda y muy diferente a las chicas que había conocido antes. Observó a su alrededor y soltó el aire de sus pulmones. ¿Y si la chica no venía? Miró la hora, ya habían pasado diez minutos, se empezó a sentir desesperada. Tal vez fue mala idea aquello.

Cerca del restaurante, venía Tzuyu corriendo, ¿en qué momento los minutos pasaron tan rápido? Ya pasaban de las siete y lo que menos quería era que Jihyo pensara que era impuntual, aunque tal vez ya lo pensaba. Corrió tan rápido como pudo y a lo lejos vio a una chica parada fuera del restaurante. Sonrió pero su sonrisa se borró al instante cuando vio que aquella se daba la vuelta para irse. Mantuvo su ritmo corriendo hasta que pudo alcanzar a la castaña, la tomó del brazo para que aquella se girara y así lo hizo.

—¿Tzuyu? —Preguntó Jihyo una vez que se dio vuelta y miró a la taiwanesa agitada. Esta última a penas y podía respirar, y hablar.

—Lo...lo siento por... tar..dar —Se recargó por la pared y comenzó a inhalar y exhalar el aire para tranquilizar su respiración. Jihyo formó una sonrisa en sus labios y asintió lentamente.

—No te preocupes. Ahora, tranquilizate un poco. ¿Por qué corriste?

—Quería... llegar a ti..tiempo pero perdí la noción de los minutos —Miró por fin a la castaña y le dedicó una pequeña sonrisa—. Perdón por llegar tarde.

—No te disculpes, ya estás aquí —Palmeó suavemente el hombro de la más alta y Tzuyu sólo se sonrojó por aquel acto—. ¿Y bien? ¿A dónde me vas a llevar?

—Eh...¿a dónde se va en una cita?

—¿Esto es una cita? —Preguntó sorprendida Jihyo pero no borró su gran sonrisa.

—Y-Yo b-bueno...pensé que eso era... —Susurró casi para sí misma pero la castaña la escuchó perfectamente.

—Llegaste tarde a nuestra primera cita pero como eres linda, lo dejaré pasar —Hizo un énfasis al decir "nuestra" y eso causó que Tzuyu ampliara su sonrisa.

Estaba teniendo su primera cita con una chica hermosa, eso era algo nuevo para Tzuyu, ni ella misma lo creía pero se dejaría llevar por ese sentimiento.

—Vamos —Se reincorporó de donde estaba recargada y extendió su mano a la contraria, ¿estaría bien ello? Dudó un poco de su acción pero cuando la castaña tomó su mano, se sintió más tranquila.

La cuestión ahora era: ¿a dónde llevaría a Jihyo? No tenía ni la más mínima idea. Ya se le ocurría algo o eso esperaba.