♡ You're The Best Photo I Captured | JITZU

XVI.

—Papá, mamá, quiero regresar a Taiwán —Sus padres se miraron y luego la miraron a ella.

—Hija, ¿por qué? ¿Sucede algo? —Tzuyu se acercó a sus padres y se sentó en medio de ellos.

—Quiero tratar de olvidar todo esto, duele demasiado... —Su voz comenzaba a quebrarse y su padre rápido la abrazó.

—Mi amor, sabes que no podemos irnos, tenemos trabajo aquí.

—Lo sé, mamá, Chaeyoung se irá conmigo —Su madre la miró sorprendida.

—¿Chae? ¿De verdad lo hará? —Tzuyu asintió y sus padres nuevamente se miraron poco convencidos de aquello.

—Hija, ¿estás segura? —Esta vez fue su padre quién habló.

—Sí, papá. Necesito un tiempo para superar el dolor y Chaeyoung estará ahí para mí —Miró suplicante a sus padres y estos asintieron.

—Está bien, Tzuyu, si eso es lo que quieres, te apoyaremos —Su madre habló no muy segura de aquella decisión pero tenía que apoyar a su hija en todo.

Después de aquella conversación, Tzuyu subió a su habitación, se acostó en su cama y miró al techo. Sabía que esa decisión que había tomado era repentina pero no quería seguir así, quería olvidar a Jihyo y olvidar todo ese dolor que la castaña le estaba causando. Esperaba que esa decisión fuera la correcta y no se equivocara.
También sabía que extrañaría todos esos momentos que había pasado con Jihyo, aunque fue poco tiempo, para ella, había sido especial.

—Espero estar haciendo lo correcto —Susurró para sí misma y decidió dormir, mañana hablaría con Chaeyoung.

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Al día siguiente, Tzuyu llegó más temprano al instituto, hablaría con Chaeyoung sobre el viaje y la decisión que había tomado. Se sentó en su lugar y esperó a su amiga. Aquella no tardó en llegar y cuando se sentó a su lado, la abrazó.

—Buenos días, Yodita, ¿cómo estás? —Preguntó cuando se separó del abrazo.

—Estoy bien —Sonrió pero aquella sonrisa se borró de inmediato—. Chae, tengo que hablar contigo.

—¿Qué pasa? Me preocupas.

—Yo... —No pudo terminar la frase puesto que la profesora llegó.

—Me dices al rato —Susurró Chaeyoung y Tzuyu sólo asintió.

Cuando las clases terminaron, caminaron juntas hasta la casa de la taiwanesa y cuando llegaron, fueron hasta la habitación de esta.

—Entonces, ¿qué me ibas a decir, Yoda? —Se sentó en la cama mirando a la más alta.

—Yo... bueno, creo que tienes razón —Comenzó a caminar de un lado a otro mientras pensaba en lo que diría.

—¿Ah sí? ¿En qué? —La miró curiosa pero ya sabía de antemano lo que Tzuyu diría.

—Chae —Se detuvo y miró a su mejor amiga—. Regresaré a Taiwán.

Chaeyoung sonrió y se levantó solo para abrazar a Tzuyu. Se sentía feliz, al fin lograría lo que tanto había querido.

—Es la mejor decisión que hayas podido tomar —Se separó y volvió a mirar a la taiwanesa—. Yo estaré contigo en todo momento, no te dejaré sola.