Los días pasaban, y a medida que esto sucedía ambas muchachas se ponían más tensas, nerviosas y asustadas de cualquier cosa que pudiese pasar. La semana se había cumplido, ese era el último día. No tenían idea de lo que sucedería.
Estaban calladas y nerviosas sentadas en un sillón, eran las 10:00 A.M y nada había pasado aún, todo continuaba como siempre. Hasta que una de las chicas decidió ir a comprar algo de almorzar.
-¿Te acompaño, Melanie? -preguntó Eva aún sentada.
-No, esta bien. ¿Quieres que compre ramen? ¿o qué almorzamos?.
-Compra ramen, pero no usaré los palillos. Son muy difíciles de utilizar.
-Está bien -dijo para luego ponerse el abrigo, y abrir la puerta.
Melanie quedó confundida, y asustada cuando vio lo que vio al salir.
-¡Eva! -exclamó sin dejar de mirar.
-¿Qué? -preguntó yendo hacia su amiga- ¿qué es eso?.
-Es... una carta al parecer.
Agarraron el sobre que estaba en la alfombra de la puerta. Tenían miedo y nerviosismo de abrirla. Optaron por cerrar y llamar a Andyno, y que las ayude.
-¿Chicas? ¿qué pasa?.
-Necesitamos que vengas lo más antes posible.
-¿Qué dilema es?.
-Ven y te contaremos.
-Está bien, no me asusten. Estaré ahí ahora mismo.
Colgaron la llamada, y las chicas se quedaron en completo silencio mientras miraban de a segundos aquél sobre, y luego se miraban entre ellas.
La puerta empezó a ser golpeada levemente, indicación de que Andyno había llegado, la mayor probabilidad era que fuese él.
-¡Andy! -exclamó Melanie abriendo la puerta- ¡pasa!.
El muchacho entró exaltado.
-¿Qué pasa?.
-Pasa que estuvieron sucediendo cosas extrañas para las cuales no voy a tomarme el tiempo que no tenemos ahora. Lo último que sucedió fue que Eva tenía la última pista del misterio, la leímos y decía que solo una semana y todo habrá terminado. Iba a comprar ramen, pero cuando quise salir me encontré con este sobre que apareció de manera espontánea cuando abrí la puerta.
Andyno suspiró.
-Está bien, lo abriremos -dijo extrañamente, sin ningún problema.
Abrieron el sobre, Andyno agarró la carta procurando no leer nada.
-¿Y? -preguntó Eva para luego arrebatarle la carta a su amigo de las manos- no puede ser... no lo haré.
-¿Qué pasa?.
-Debemos ir al bosque hoy en la noche, a las diez precisamente. Dice que luego encontraremos la respuesta y todo se abra terminado.
-Iremos los tres -dijo tranquilamente Melanie.
-¡¿Estás loca?! -exclamó interrogativamente Andyno.
-Irás con nosotras, deja de lado tu debilidad y orgullo y porfavor ven -pidió mirando al suelo pero sin agachar su cabeza.
-Irás con nosotras, Andyno -dijo Eva.
El chico, frustrado, rendido, con estrés, asintió con su cabeza.
[...]
Las horas pasaron demasiado lentas por el nerviosismo que en los tres chicos habitaba ¿que verían?. No tenían ni la mínima idea... o bueno... uno de ellos sí por lo menos.
-Es la hora -dijo Melanie.
-Son las nueve y media, Mela.
-Lo sé Eva, pero no queremos llegar tarde y perdernos la respuesta ¿verdad?. Salgamos ahora, no queda muy cerca el bosque que digamos.
-Está bien -respondió Andyno.
Los chicos salieron de su casa, obviamente llevando linternas. Pero fue lo único que se llevaron al bosque, al cual llegaron diez antes después del horario.
-Está todo más oscuro de lo normal -dijo asustada Eva, para luego notar que sus ojos se cristalizaban.
-¿Qué pasa, Eva? -preguntó Andyno.
-Solo... tengo miedo. De lo que pueda llegar a pasar.
-No pasará nada malo, Eva. Estamos contigo -alentó Melanie.
Se agarraron los tres de las manos entre sí, para tomar coraje y entrar al bosque tan miedoso y oscuro al cual no mucha gente entraba.
Continuaron caminando adentrándose más y más.
Y llegaron al árbol de Amaranth y Sukuyan, de alguna época.
Cuando vieron lo que vieron, Eva no pudo evitar romper en llanto y empezar a gritar "¡Quiero irme de aquí, porfavor no hagamos nada!, mientras lloraba de manera desesperada. Melanie tomó la mano muy fuerte de Eva, y Andyno hizo lo mismo intentando calmarla.
Se quedaron sin palabras y con sus ojos muy abiertos, al ver lo que tenían en sus ojos.
Simplemente no tenía explicación.
Para lo que estaban cometiendo.
Para lo que estaban viendo.
Para lo que estaba por suceder.
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"MITAD HADA MITAD VAMPIRESA"
Fantasy"Desde que me topé con ese humano, comenzaron a suceder cosas extrañas, cosas en mi vida empezaron a ponerse raras". -Sukuyan. .05-06-1517.