Las palabras de Sabino Borges quedarón grabadas en la cabeza de Elizabeth después de ser despertada de su shock comenzo a llorar amargamente completamente descontrolada gritando el nombre de su hermano que había sido el responsable de la muerte de su adorada hija Alexandra Borges, Elizabeth no podía dejar de preguntarse porqué su hermano había asesinado a su hija, mientras que era observada por Sabino Borges que no tardó en retirarse de la habitación para dejarle espacio a los sentimientos de su mujer.Sabino caminaba hacia el despacho cuando se encontro repentinamente con su hijo Claudio que había vuelto pronto de su salida. Que no tardo en preguntarle porqué lloraba su madre. Sabino recordó que Claudio no había estado presente cuando el detective menciono a Julio Marquina como asesino de Alexandra y decidió no comentarle la razón para evitar que el joven reaccionará de la misma manera o intentará aliviar a su madre.
Sabino Borges: Claudio ¿puedo hablar contigo? —preguntó intentando desviar la atención— necesito que me hagas un favor —agrego—
Claudio Borges: Claro papá —respondió— ¿pero está bien si dejamos a mamá así? —preguntó—
Sabino Borges: Sí no te preocupes, es normal esto. Es asimilando todo lo que ha pasado de golpe. Vamos hijo —dijo poniendole la mano en el hombro—
Claudio sonrió con la acción de su calido padre que parecia que empezaba a ser el mismo nuevamente, caminaron juntos hasta el despacho donde se daría a lugar la conversación padre a hijo que llevaba ya varios días sin suceder. Don Sabino se sento frente al escritorio, cogió un papel y un boligrafo y comenzó a redactar unas instrucciones mientras hablaba con el joven que lo observaba atentamente.
Sabino Borges: Hijo, quiero empezar pidiendote perdón —dijo con una notable expresión de culpa—
Claudio Borges: ¿Perdón? porqué me pides perdon papá, ¿sucedió algo? —preguntó nervioso—
Sabino Borges: Sí que sucedió, durante todo este asunto no te preste atención, ni te di el apoyo que necesitabas, de verdad que lo siento mucho. Quiero que sepas que te amo mucho y que confió en que serás el gran hombre de los Borges muy pronto.
Las palabras de Sabino llenarón de emoción al joven que no pudo evitar que lagrimas cayeran de su rostro. Don Sabino sonrió al ver la expresión de su hijo y termino de redactar las instrucciones.
Claudio Borges: No tienes nada que disculpar papá —dijo el joven— yo tampoco demostre mi cariño con ustedes cuando lo necesitaban, de verdad que me dolió mi hermana solo que las palabras de mamá me lastimaron mucho y decidí apartarme —comentó—
Sabino Borges: No tienes nada que explicar hijo, yo te entiendo y está todo bien. Bien —dijo terminando la conversación y poniendose de pie— Ya termine el encargo que te tengo, anote todo en esta hoja de instrucciones las pondre en esta gabeta y la cerraré con llave —dijo realizando la acción que estaba contando— Mañana cuando estés en el colegio, yo estaré en la comisaria firmando unos documentos y luego saldre a hacer unos negocios fuera de la ciudad. Cuando vuelvas de tú dia de clases, antes de cualquier cosa pidele a Marlen las llaves de esta gabeta que te dejaré con ella y cumple con el encargo que te dejo hijo —pidió con un semblante serio—
Cladio Borges: Vaya que tremendo protocolo papá —sonrió— entiendo imagino que así son los negocios. Bueno yo debería irme a preparar todo para mañana que tengo que dormir temprano estará dificil ponerme al día —dijo aludiendo a todo el tiempo de clases que había perdido—
Sabino ignoró el comentario, se acercó a su hijo y le dio un fuerte abrazo.
Sabino Borges: Te amo mucho hijo —dijo con completa sinceridad mientras le daba un fuerte y calido abrazo— Espero que no se te dificulte mucho recuperar el ritmo. Ya quiero ver a Sofía —dijo con una sonrisa—
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Errores Mortales
Mystery / ThrillerEn una peculiar reunión familiar ocurre un suceso que cambiaría por completo la vida de una perfecta familia de la alta sociedad. Un asesinato inesperado desemboca una investigación de la que nadie será lo suficientemente inocente para no ser un sos...