Parte 1
—Arnus, has vuelto... después de tanto tiempo.
Un hombre mirando de espaldas a su nación a través de una gran ventana, habla al príncipe, su hijo, tras su llegada. Viste una larga capa, la que cubre la mayoría de su cuerpo y sobre su cabeza yace una corona con joyas incrustadas.
Arnus se arrodilla respetuosamente en frente de él e informa.
—Sí padre, he cumplido exitosamente la misión que me encomendó en los montes Graken.
—Estoy muy orgulloso, esa misión era en extremo peligrosa y muy difícil de llevar a cabo, pero te tenía una gran confianza. —Las palabras de elogio llenan de regocijo a su hijo, pero el rey no ha terminado de hablar aún—. Sin embargo...
— ¿Sin embargo qué padre? ¿Hay algo que me haya faltado?
El rey Asur Rabbok se da media vuelta para encarar a su primogénito.
—Tardaste demasiado.
Las imágenes se vuelven borrosas y muestran al padre de Arnus con un rostro desfigurado. Ya no posee labios, exponiendo sus afilados dientes y encías putrefactas, uno de sus ojos está quemado y el otro con los párpados muy deteriorados, pareciendo que esté a punto de salir de su cráneo. Su cuerpo se tambalea mientras una espada le atraviesa el pecho. Un monstruo que perfectamente podría ser llamado como un «no-muerto».
El cadáver que horroriza al príncipe de los Shezenvalery apunta su dedo índice, ya sin piel, hacia su hijo.
—Tardaste demasiado hijo, no hay un hogar para ti al cual volver.
El tiempo se congela en frente del príncipe y el espacio se distorsiona.
***
La ciudad se encuentra en llamas. Casas destruidas y quemadas por doquier. Espadas y mazas en el suelo como prueba de la batalla que se llevó a cabo. A lo lejos, sobre una colina, Arnus puede visualizar el castillo de su reino, completamente destruido y con humo saliendo de él.
Desorientado por el cambio de escena, Arnus camina por las calles de lo que alguna vez fue la capital de su reino.
— ¿Padre? ¿Dónde estás? —Buscando a su padre, o a cualquier signo de vida en el lugar, Arnus grita al aire.
Camina y camina hasta encontrar una gran pila de cadáveres.
—No...
Miembros de su especie, había hombres y mujeres, niños y ancianos, todos con sus cuerpos mutilados, sus brazos retorcidos, sus rostros quemados y expresiones representando el dolor que pasaron antes de su muerte.
—Esto no es lo que yo quería...
Repentinamente, Arnus siente una presión en sus piernas. Al voltearse a mirar, observa con terror el cuerpo de un Shezenvalery sujetándose con fuerza a su príncipe. Su rostro completamente irreconocible por las quemaduras y sus graves heridas dan cuenta de que no debería estar vivo.
— ¿Dónde has estado, Arnus?
Sin permitirle responder, otro Shezenvalery, con su cuerpo en un estado peor aparece detrás de él.
— ¿Por qué nos abandonaste?
Antes de que lo notase, Arnus está rodeado de cuerpos de sus compatriotas, todos aferrándose fuertemente a él, como una masa de cadáveres la cual estaba tragando su cuerpo.
ESTÁS LEYENDO
Exhekar Tales I: La Reina Esclava & El Príncipe Sin Reino (+18)
FantasyLa historia sigue a Tina, una chica de personalidad algo retorcida que se autoproclama como la reina de los esclavos. Codiciosa y arrogante, desea controlar a un "demonio" llamado Arnus y usarlo para cumplir con sus caprichos de la única forma que c...