Capítulo 7.

18.9K 1.4K 87
                                    

Ya estoy de nuevo por aquí dando la lata. 

Madre mía son las 0:31 de la noche y yo mañana tengo que despertarme a las 6:30 de la mañana para ir a trabajar, pero quería terminar este capítulo y dejarlo publicado. Hace escasamente quince minutos que lo habré acabado, así que viene calentito del horno jajaja.

Lo que ocurre es lo que me lleváis pidiendo desde hace tiempo, creo que desde que se empezó esta segunda parte de la Saga, así que espero que no os defraude y os guste.

Ya sabéis, estrellita y comentarios que me encanta cuando me señaláis un parrafo y me decís que pensáis al respecto.

Bueno no me enrollo más que mis párpados se cierran por el sueño.

Becky Towers

Mi corazón se detuvo. Nick había tenido un accidente, no podría creerlo. Comencé a temblar sin control, mi nerviosismo empezó a aumentar y el oxígeno escaseaba a mi alrededor.

Dejé caer todo mi peso sobre el sofá. Mis fuerzas habían desaparecido, pesaba cada milímetro de mi cuerpo.

Apoyé la cabeza en el respaldar. Cerré los ojos y coloqué mi brazo sobre ellos.

El miedo se estaba apoderando de mí. ¿Y si moría? Sería por mi culpa, lo vi coger aquella botella y no lo detuve, cuando debía haberlo hecho.

-       Ruth, ¿qué ocurre?-Ana se había acercado hasta mí, agarrando mi brazo para apartarlo de mi cara-¿Quién era?

Abrí mis ojos y la miré de reojo. No podía, y tampoco quería, aguantar las lágrimas, por lo que las dejé que fluyeran libremente.

Los ojos volvían a escocerme, llevaba cerca de veinticuatro horas en las que le había dado poco descanso a mis ojos. Como siguiera así, se me quedarían hinchados de por vida.

-       Ruth…-Charlie se sentó a mi otro lado, sobre el reposabrazos del sofá. Colocó su mano sobre mi hombre, dándome un leve apretón.

-       Era Nick-logré decir.

-       ¿Era él?-preguntó Charlie con dureza. Negué con un movimiento de cabeza-¿Entonces?-las lágrimas no paraban de salir.

-       ¡Joder, Ruth! ¡Cuenta de una puta vez, que nos tienes en ascuas!-exigió Ana, provocando que Charlie le lanzara una mirada de advertencia por su actitud-No me mires así, tú piensas lo mismo-los tres nos mantuvimos en silencio. Notaba las miradas de mis acompañantes clavadas en mí, mientras que la mía miraba al frente sin punto fijo.

-       Era una conocida de él-comencé a decir. Ana seguía exigiendo más información y que hablara con mayor fluidez-Nick…-tragué con dificultad, me era complicado decir esas palabras-Nick, ha tenido un accidente, anoche…por eso llevaba llamándome todo el día-rompí a llorar con más fuerza. Escuché la exclamación de sorpresa de Ana.

 Eché mi cuerpo hacia delante, tapándome la cara con las manos. Ana comenzó a pasar su mano, de arriba abajo, por mi espalda.

-       No es bueno mezclar alcohol y coche…-él debería de saberlo, es mayorcito-dijo Charlie, levantándose y dirigiéndose de nuevo hacia la mesa donde nos esperaba la cena, enfriándose.

-       ¿Puedes ser un poco más sensible? No ves cómo está-le reprochó su prima-¿Cómo está él?-se dirigió de nuevo hacia mí.

-       Sólo me ha dicho que está en el hospital, tampoco tuve fuerzas para hablar más…entré en shock…-dije entre sollozos-¿Y si le pasa algo?-levanté la cabeza para mirar a mi amiga-Sería por mi culpa, por no ir tras él y detenerlo, por dañarlo con mis palabras.

Saga White. Perdóname.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora