Amor A Puertas Cerradas

Daños Colaterales

Pronto se completaron nueve meses del secuestro de Tony. En ningún momento había cesado su búsqueda, y los sobrevuelos a la zona de desaparición y zonas aledañas tampoco había parado.

Steve se veía cada vez más apagado, pero él llevaba su procesión por dentro. Ninguno de sus amigos sabia de lo que ocurría de puertas para adentro en la oficina que le fue asignada a Rumlow, nadie sabia del horrible trato que ese hombre le daba, ni la forma en que lo acosaba y hacia pedazos su poca autoestima. Nadie sabía el dolor que sentía al no hallar a su ser amado, nadie sabia del sufrimiento y la angustia que pasaba día con día, al no hallar ninguna pista sobre su paradero.

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-Nat, hay algo que me preocupa últimamente- comento el castaño, mientras archivaba unos documentos claves en la investigación.

-el que, James- preguntó con seriedad.

-Steve, mira, yo se que no lo debe estar pasando bien, Stark desapareció y aun no tenemos rastros de su paradero, pero estoy seguro de que aquí esta ocurriendo algo más, hay algo con respecto a él que nos esta ocultando y lo voy a averiguar - dijo seguro y determinado, viendo la mirada perdida de su amigo.

-yo también lo he notado, pero como estas tan seguro de ello- pregunto la mujer, mientras tomaba un café.

-porque Steve suele portarse así cuando algo malo le ocurre. Hace años, antes de conocerte, su madre tuvo un problema económico. Él consiguió un trabajo de medio turno, y con eso llevaba comida a su hogar. Yo, a medida que pasaba el tiempo, me empecé a dar cuenta de que estaba más delgado y un día, en medio de clase de deportes, él simplemente colapso. Cuando los médicos le revisaron, le encontraron anemia y un cuadro siempre complejo de desnutrición. Él nunca me dijo nada, y en aquella ocasión, tenia una actitud similar a la que tiene ahora. En un principio lo había notado, pero creí que era simple y lo deje pasar, pero ahora se que algo me esconde y que ese algo es grave- dijo, sin apartar su vista del chico.

-pues, si nos esconde algo, tu y yo lo vamos a averiguar - dijo con firmeza la pelirroja.

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Obadiab se encontraba furioso, no encontraba por ninguna parte lo planos o las especificaciones de Jericó, y el imbécil de Tony tenia altamente bloqueado el acceso a su computadora. No sabia que hacer, necesitaba obtener aquellos planos, antes de matar al maldito mocoso ese.

En su desesperación y frustración, recibe una llamada.

—Señor, el sujeto en cuestión actúa de forma rebelde y se niega a darnos a Jericó— aviso el hombre del otro lado de la línea.

—torturenlo, presionenlo, o amenazenlo, lo que sea, necesitamos cuanto antes al Jericó en nuestras manos— dijo con odio Stane.

—muy bien señor, esperamos sus futuras ord...— un explosión se dejo escuchar, seguido de disparos y gritos.

La angustia se apoderó de él, que demonios estaba ocurriendo, que era lo que esta sucediendo del otro lado. Los habían encontrado, los estaban atacando sus enemigos o oís estaba cercando el ejército.

Miles de interrogantes pasaban por su cabeza, pero, por mas que gritaba y gritaba, nadie era capaz de darle alguna respuesta, hasta que la comunicación se corto definitivamente.

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Un nuevo día había empezado, y había empezado con buenas noticias, Obadiab Stane no se encontraba en la compañía por cuestiones de negocios, lo que significaba que tendría libre acceso a su computadora y podía extraer la información faltante para completar la investigación.