Amor A Puertas Cerradas

Me niego a perderte

Steve despertó, completamente desorientado y en una habitación llena de aparatos, reparo en su cuerpo y descubrió que tenia una intravenosa conectada en una de sus muñecas.

Poco a poco, la bruma en su cabeza se fue disipando y recordó a la perfección todo lo que había sucedido en la hora del almuerzo, todo, hasta el momento en el que Rumlow le asestó un puño en la cara y le dejo inconsciente. No basto mucho tiempo, para que a su Memoria llegara la imagen de un Tony completamente golpeado, con la mirada destilando furia y también para que recordara la expresión que el castaño tenia en su rostro, en el breve momento en el que desapareció, antes de que ocurriera la pelea.

Steve tenia sentimientos encontrados, por una parte se sentía sumamente molesto con el irresponsable de su jefe y sentía deseos de golpearlo, pero otra parte, se hallaba angustiada por las expresiones que había visto en el rostro de su jefe y se preguntaba que era aquello tan grave que había ocurrido para que los dos se enfrentaran de esa forma tan salvaje.

Salió de sus cavilaciones cuando la puerta de su habitación fue abierta, por ella ingreso un hombre castaño con lentes, el cual le regalo una pequeña sonrisa, antes de aproximarse a su cama.

—Steven, cierto— pregunto, recibiendo un asentimiento del rubio —yo soy Bruce Banner y estuve siguiendo tu caso. Tienes una contusión en la mejilla y la comisura del labio lastimada, debes tener cuidado y procurar de que no se vuelva a abrir, también tienes un fuerte golpe en tu cabeza, que precisó de cuatro puntos de sutura. Pero, no era precisamente de eso de lo que te venía a hablar. Tony me permitió tu expediente y hemos encontrado algo particular en ti, y es que padeces de anemia y de asma, nosotros te hicimos algunos estudios y encontramos que existe la posibilidad de reducir los efectos de estas enfermedades hasta hacerlos inexistente y curarlas por completo, pero necesitamos tiempo, debemos realizar diversos estudios y diferentes pruebas para estar completamente seguros de la efectividad de la medicina — explico el doctor con calma y paciencia al rubio.

—pero doctor... Yo, yo no tengo con que pagar el tratamiento — aviso el rubio con vergüenza, mientras bajaba su mirada y la concentraba en sus manos.

—el dinero es lo de menos, lo importante es tu salud, además, nosotros somos una división independiente que trabaja de la mano con industrias Stark— explicó.

—yo... Muchas gracias, doctor Banner— dijo, mientras levantaba el rostro y le regalaba una hermosa sonrisa.

—no te preocupes y no es a mi a quien debes de agradecerle. Te dejaré descansar y dentro de poco autorizarse tu salida, afuera hay unos amigos tuyos que están ansiosos por hablar contigo, sin más, me retiro— dijo, para salir de la habitación.

No paso mucho tiempo para que Natasha y Bucky entraran a la habitación y empezaran con su interrogatorio.

—como estas— dijo Natasha angustiada.

—te encuentras bien— preguntó un tanto serio Bucky

—que paso—

—quien es mas fuerte, Stark o Rumlow—

—tengo que castrar a Stark o aun puedo dejarlo con vida—

—chicos, calmense, les voy a explicar, pero denme un respiro, que si hablan tan rápido nos les puedo contestar— pidió con una hermosa sonrisa en el rostro Steve, agradeciendo internamente a la deidad que había puesto a tan maravillosas personas en su camino.

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Tony se encontraba en su oficina. Después de una intensa sesión de charla práctica y reflexiva con Natasha, básicamente de tortura con esa maligna mujer, había llegado a la resolución de que lo mejor seria evitar a Steve por este día. Necesitaba pensar y serenarse, además que estaba absolutamente seguro de que le diría una senda estupidez, porque aún tenia la cabeza en caliente.

Tenía una copa de Whisky en su mano y con la otra sostenía su móvil, marcando al numero privado de Pepper. Necesitaba hablar urgentemente con ella, ella lo conocía mejor de lo que se llegaba a conocer a si mismo y solo ella podría aclararle algunas cosas y reprenderle por su actitud idiota con Steve y con todo en general.

—¡Anthony Edward Stark! Se puede saber que demonios paso ahora—le regaño la mujer, con una voz de ultratumba, asustando al castaño, quien se preguntaba que tan buena idea había sido llamar a la mujer.

—estoy enamorado, Potts— confeso el castaño con agonía.

—ahora que le hiciste a Steve— pregunto.

—y como demonios sabes que hablo de Steve— pregunto alarmado y se pregunto su esa mujer no tenia algún pacto con el demonio.

—uno, por que eres muy predecible, dos porque era obvio que eso iba a suceder y tres, porque me has llamado más de cinco veces borracho a decírmelo— enlisto la mujer con sarcasmo.

—¡oh! Creo que eso explica algunas cosas— murmuro con entendimiento.

—bien, dime Tony, porque te peleaste con Rumlow— pregunto la mujer, buscado paciencia de donde no tenia y hablándole como a un niño pequeño.

—yo... Fue por coquetearle a Steve, Pepper, yo ya no puedo más. En verdad que he tratado de olvidarlo, de alejarme de él, de no pensar en él, de no desearlo en la forma en que lo hago, pero es imposible... Yo no puedo, en verdad te juro que trate de dejarlo ir, pero no puedo, me niego a verle en otros brazos, me niego a aceptar que estará con alguien que no voy a ser yo, me niego a aceptar que otra persona tendrá su cuerpo y sus caricias, todo de él... Yo, yo quiero que sea solo mio, Potts — expresó con sinceridad, mientras escondía su cara entre sus manos —por él... por él yo estoy dispuesto a ser mejor, por él soy capaz de dejar de beber, dejar las mujeres, dejar mi fortuna, por él yo estoy dispuesto a todo Pepper... No lo entiendo— finalizo murmurando sintiéndose como un niño completamente perdido en un mundo desconocido.

—en verdad estas enamorado, Tony. Todo lo que me estás diciendo es consecuencia de que te has enamorado, y es comprensible. Steve es un chico muy lindo, y su belleza no solo esta en lo físico, también en lo que lleva por dentro, él, a parte de mi, es la única persona que a logrado centrarte y controlarte, en verdad, es alguien fuerte y sumamente especial... No solo lo elegí para ser mi sucesor por sus capacidades, también por su gran fortaleza, ese carácter guerrero que tiene para no dejarse vencer y la forma que tiene de ser, que es lo que realmente cautiva a las personas— explico la mujer con calma, tratando de ayudar a su jefe, amigo y casi hermano.

—gracias, Potts, ya se cual sera mi próximo paso a seguir— dijo, procesando toda la platica que había tenido con la mujer y aclarando algunas dudas en su mente.

—y que planeas hacer, señor Stark— pregunto con curiosidad y diversión la mujer.

—no puedo olvidarlo y no puedo permitir que este con otros, así que voy a hacer que sea solo mio. Nadie me lo va a quitar— afirmo con convicción y con un animo que la mujer llevaba años sin hacerse presente en el castaño.

—espero que tengas suerte con ello, Tony— dijo la mujer con confianza y un gran cariño hacia el castaño.

—soy Tony Stark, yo siempre tengo suerte — dijo egocéntrico y confiado.

—ya veremos, Tony. Tengo que dejarte, estoy un poco cansada y quisiera descansar... No sabes cuan agotador puede llegar a ser esto— dijo la mujer con diversión y con un tinte de cansancio.

—adiós, Potts, saluda a mi sobrino de mi parte y dile a Happy que si no cuida de ti como se debe, me va a conocer en serio... Y no es una amenaza— dijo con su habitual tono sarcástico.

—de acuerdo, Tony. Y recuerda, ten cuidado y no lo arruines— le dijo como una madre a su hijo, antes de cortar la llamada.

Tony colgó y dio un hondo suspiro. Levanto su rostro, observando su reflejo en una de las ventanas y descubrió que se encontraba horrible, su rostro estaba cubierto de hematomas y cortes, no podía presentarse así frente a Steve. Decidió que llamaría a Bruce, y le preguntaría por el estado del rubio para después marcharse a su mansión a terminar con algún proyecto, en lo que ponía todas sus ideas en orden.

Ya después llamaría a Natasha para que le diera un informe de como se encontraba Steve.

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Hasta aquí...

Para el próximo capitulo se viene lo bueno.

Espero que les haya gustado y nos leemos en un próximo capítulo.