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ｔｒｅｓ.

Minutos antes.

|| SinB ||

"Aunque había soñado con tener una vida perfecta, un dolor intenso hay en mi alma vacía."

Caminaba tranquilamente por las calles mientras disfrutaba del rico sabor de un caramelo, la razón por esto es que quedé con Yerin para ir al parque y a la plaza un rato para distraernos y divertirnos.

Ella y yo regularmente planeamos salidas de en vez en cuando, pero desde hace un mes habíamos dejado de hacerlo por cuestiones escolares; digo, esta bien tener una responsabilidad académica, pero ¿por qué siempre hay cierto momento en dónde nuestra agenda esta apretada por muchas tareas? Somos jovenes y necesitamos diversión tambén.

El fin, no me quejaré más del colegio, ya que es un pequeño plus que tengo para obtener todo lo que quiero y necesito en un futuro cercano.

Me detube al llegar al cruce y esperé a que el semáforo se pusiera en rojo para poder pasar, pero en eso, rápidamente pasó empujándome una chica de cabello corto.
—— ¡Hey! —— Ví que ni se tomó la molestia de regresarse y pedirme disculpas. ¿Qué le pasa? Suspire y seguí mi camino.

Cuando llegué al puente, observé desde lejos a la misma chica de hace poco tiempo, no me había percatado, pero usaba el mismo uniforme que yo, no cabía duda, era de mi mismo colegio. Esta chica se encontraba mirando hacia la nada, cómo si estuviera perdida en su mundo. De repente comenzó a subirse lentamente en el barandal.

En ese momento tuve un mal presentimiento, sin saber por qué, me acerqué lentamente hacía ella hasta ver que se sentó en el barandal.
—— Oye... ¿Qué estás haciendo? —— No respondió.

Algo andaba mal con esta chica, ¿acaso se quería suicidar?

"Por un momento sola quería estar y la atención me lo dificulta. Quiero tener una vida normal, quiero respirar."

En eso pasó lo que temía, se soltó y un tremendo pánico entró a mi.

—— ¡No lo hagas!

Rápidamente la sujeté a tiempo de su muñeca, quedándose colgada y yo con un ataque de nervios de dejarla caer y de irme con ella a la vez si es que no resisto en sujetarla.
Aquella chica por fin me dirigió la mirada, noté miedo y cansancio en sus ojos.

—— ¡Suéltame! ¡Yo no merezco vivir!

—— ¿¡Acaso estás loca!? ¡No te voy a soltar! ¿¡Por qué demonios dices eso!?

—— ¡Porque es la verdad! Soy un asqueroso bicho, soy espantosa, todos me tratan mierda, mi vida es una farsa. ¡Todo es un infierno para mi, yo solo quiero dejar de sufrir! —— Exclamaba con lágrimas en los ojos. ¿Por qué me dolía verla así y saber que piensa de esa manera?

—— ¡Escúchame! No te conozco, pero puedo asegurarte que no todo es así. Es ridículo que hagas esto, es ridículo que quieras quitarte la vida. Si tienes problemas no debes huír de ellos, tienes que afrontarlos. Recuerda que si todo va mal, algún día todo tiene que mejorar. La vida es demasiado hermosa como para perder la oportunidad de vivirla al máximo. Tu vida no es una mierda, como dije, en algún momento cambiarán las cosas y te darás cuenta de eso. Por favor... deja de autolastimarte. Estoy segura de que eres una persona maravillosa. —— Simplemente me observaba mientras me escuchaba, logré que entrará en razón, así que la fuí subiendo con mucho cuidado. —— Una chica tan linda cómo tú no debe de sufrir de esta manera. —— Ambas caímos al suelo, ella se quedó encima de mi, abrazándome y sollozando de la manera más silenciosa posible en mi pecho.
—— Una chica cómo tú merece la felicidad... —— Susurré lo último y la abracé.