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ｕｎｄｅｖｉｇｉｎｔｉ.

|| Narrador omnisciente ||

Dentro de una casi vacía cafetería de la ciudad, se encontraba cierta chica pelirroja tomando un sorbo de su cremoso cappuccino helado, teniendo la vista demasiado fija al exterior de la ventana, mientras se pierde en el claro azul del cielo y delira en sus propios asuntos.

Si bien había aceptado su derrota ante las pocas posibilidades de que Eunha le correspondiera y fueran algo más, no podía negar lo difícil que es olvidar lo que la chica de cabello corto le causaba dentro de su ser.

¿De qué manera podría dejar todo atrás para seguir con su vida?

Esta, y muchas más preguntas pasaban por su mente.

Soltó un pesado suspiro y dirigió la mirada a su cappuccino, dando ligeros golpecitos con el dedo al vaso de cristal.

De repente, una figura se hizo presente a su lado, haciendo que alzara la mirada para ver de quien se trataba.

⎯⎯Hola, Sowonnie.

⎯⎯Oh, hola, Umji.⎯⎯ Saludaba de la misma forma. ⎯⎯¿Qué haces por aquí?

⎯⎯Estaba de compras en la plaza que está cerca de aquí.⎯⎯ La menor respondía mientras alzaba las bolsas, para demostrar que efectivamente había ido de compras. ⎯⎯Iba directo a casa, pero la vi y decidir acompañarla.⎯⎯ Tomaba asiento en frente, aun prosiguiendo. ⎯⎯¿Se encuentra bien? Desde lo lejos veo su cara larga.

⎯⎯Estoy bien, sólo he estado pensando en unas cosillas últimamente. No es nada de que preocuparse.

⎯⎯¿Está segura de eso?

Ante la pregunta, Sojung asintió con una expresión serena.

⎯⎯Totalmente, así que no te preocupes por tu unnie.

⎯⎯Si usted lo pide, está bien.⎯⎯ No muy convencida, Yewon obedeció y le dedicó una tímida sonrisa. ⎯⎯Entonces, ¿no le importa el que le haga compañía?

⎯⎯Ningún problema, adelante.

Una tercera figura apareció, era el camarero del local.

⎯⎯Bienvenida, ¿desea algo de tomar?

Yewon asintió.

⎯⎯Sí, ¿me podría traer lo mismo que ella, un cappuccino helado?

El joven, quien la estaba atendiendo, anotó el pedido en su libretita.

⎯⎯¡Por supuesto! ¿Y tú, noona? ¿Quieres que te traiga un postre?

⎯⎯Por favor, Min. ⎯⎯ Respondía la nombrada. ⎯⎯¡Ah! Y tráeme más cappuccino.

⎯⎯Enseguida.

El chico pelinegro de voz gruesa, tomo el vaso en donde antes estaba la bebida de la chica alta y se retiró.

⎯⎯No sabía que se conocían.⎯⎯ Admitió Umji, algo impresionada por la confianza entre ambos.

⎯⎯Oh, ¿no te lo había dicho?⎯⎯ Ríe algo nerviosa. ⎯⎯Él es Kim Mingyu, mi hermanastro. Hace unos años que no lo veía, pero hoy casualmente lo encontré aquí en su trabajo. Es una larga historia.

⎯⎯ Ya veo. Para ser hermanastros, se nota que se llevan bien.

⎯⎯Así es, aunque no sea totalmente de mi sangre, le debo muchas cosas.⎯⎯   Baja la mirada, con una pequeña sonrisa al recordar su infancia. ⎯⎯ A pesar de que es el menor, siempre me ha cuidado como si yo fuera la pequeña de los dos.