Shouldn't Come Back [OA2] Louis Tomlinson

Capitulo 15. "Secretos no tan secretos"

________ — PDV

Abrí los ojos y me estire. La enfermera aun no salía del cuarto de mi mamá y Sam un no llegaba. Volteé a ver a mi derecha y vi a Michael dormido. El había llegado unos minutos después que yo pero sin su papá. Quise despertarlo y preguntar el porqué pero ese muchacho sí que era un amargado. Mi celular sonó y lo saque del bolsillo de mi pantalón. Un mensaje de Louis.

“¿Estás en el hospital?”

“Sí, ¿estás con Eleanor?”

“Me quede a dormir con ella en el hotel, ¿celos?J”

“La segunda opción nunca debería de sentir celos, ¿cierto? ;)”

Bloque el celular y lo volví a guardar. Hice mi cabeza hacia atrás y la moví de un lado a otro. Michael se movió y recargo su cabeza en mi hombro. Lo volteé a ver con cuidado y pensé en cómo sería si tuviera un hermano de sangre. Tengo a Zayn pero Michael podría ser de mi sangre. Escuche unos pasos acelerados hacía mi y volteé a ver.

— ¡______! —. Se acerco a mí y me abrazo haciendo que Michael se despertara.

— ¿Qué mierda…? —. Nos volteó a ver.

—Pensé que no vendrías, Zayn—. Se sentó a mi izquierda y tomo mi mano.

—Es mamá, por dios—. Dijo y volteó a ver a Michael —. ¿Quién eres tú?

—Otra vez con la misma mierda—. Susurro y le sonrió irónico—. Mira, no sé que es mi papá de esta señora, ¿okay? Solo vine porque papá dijo.

—No debes de ser tan rudo.

—El es así, Zayn. Ahora cuéntame porque no habías venido—. Le sonreí.

—Esto será una gran sorpresa para ti, hermanita, pero estaba con una chica—. Sus mejillas se pusieron rojas. Aun no sé cómo se le noto lo rojo si esta negro, solo digo.

— ¿Cómo se llama? —. Pregunté entusiasmada ya que Zayn no había salido con nadie desde Camila.

—Perrie, no sé si te acuerdas cuando los chicos y yo fuimos a presentarnos a X Factor el año pasado—. Asentí—. Ella concursaba junto con otras tres chicas en un grupo que se llama “Little mix”. Desde entonces hemos estado juntos y apenas hace unos días se hizo oficial nuestra relación—. Se mordió el labio.

—Eso es grandioso—. Michael soltó una risa y lo volteé a ver—. ¿Quisieras callarte?

—No, me es patético como puedes amar todo o ser tan boba con lo del amor—. Volvió a sonreír irónico.

—No le hables así a mi hermana—. Hablo Zayn.

—Déjalo—. Le murmure.

—Iré a la maquina dispensadora, ¿Quieres algo? —. Negué y se fue.

— ¿Por qué eres tan desagradable? —. Le pregunté.

—No te importa.

—Olvídalo—. Bufé. Saque el celular y eran las diez y cuarto—. ¿Dónde demonios estás, Sam?

Marque su número. Un tono, dos tonos, tres tonos, cuatro tonos y me mando a buzón de voz. Volví a marcar y esta vez contesto.

— ¿_______? —. Su voz se escuchaba muy lejana.

— ¿Dónde estás? —. Pregunte y suspiro.

—Yo… voy para allá—. Dijo y colgó.

Volví a guardar mi celular y sentí la mirada de Michael sobre mí.