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Maratón 5/5

—Estoy segura de que Zay sabe algo— Riley se encontraba en la comodidad de su cama comiendo el helado de fresa que Farkle le había conseguido a las 10 de la noche, todo por un antojo.

—¿Porqué lo dices? ¿Crees que ya la haya encontrado?— Farkle estaba agotado, hace días que no dormía bien, el trabajo en la oficina, acompañar a su amigo para encontrar pistas y cuidar a Riley, no era nada fácil de llevar.

—Lo note nervioso cuando lo llame— Riley llevo otra cucharada de helado a su boca.

—Tal vez lo hizo y no nos quiere decir porque la quiere para el— Farkle se acostó en la cama y no espero para cerrar los ojos.

—No, el no es así, además me habló de una chica rubia que conoció—Riley estaba tan enfocada en su helado y conclusiones que no notó cuando Farkle ya se habían quedado dormido. El silencio fue quién la hizo voltear a su lado para percatarse de la ausencia de su esposo—Genial— de dijo así misma.

Dejo aún lado el helado, colocandolo en su mesa de noche. Tomó su teléfono y salió de la habitación hasta la que sería de su pequeña. Marcó el número de su primo esperando una respuesta.

—¿Riley?—contesto Zay después de dos timbres.

—¿Quién mas?— dijo la castaña algo irónica.

—¿Que necesitas?.

—La verdad, ¿Estas seguro de que no encontraste a Maya?.

Silencio. El chico quedo pensando en algo para evadir la pregunta, era muy malo mintiendo. Quería decirle pero se lo había prometido a Maya, aunque si prima no era alguien quien se rindiera tan fácil.

—Te diré la verdad, sólo prometeme que no dirás nada hasta que Maya quiera hacerlo—un pequeño grito de la castaña aturdio a Zay. La había encontrado y Riley estaba feliz con ello.

—No puedo creerlo, ¡La encontraste!. ¿Como esta? ¿Ella esta bien? Zac ¿Como es el? ¿Que tan lindo es en persona el pequeño?.

Zay comenzó a reír ante la inumerables preguntas que su prima le hacía.

—Tranquila, una pregunta a la vez.

—Esta bien, ¿Porqué no quiere der encontrada?—Riley no lo entendía, le resultaba hasta imposible creerlo, había jurado que cuando la encontrarán la chica regresaría inmediatamente a Nueva York.

—Esta con alguien mas— soltó Zay. Riley comenzó a reír.

—Ya enserio Zay. ¿Porqué no quiere volver? Esa es la pero excusa, ama a Lucas.

—Creo que ella merecía ser feliz— la chica no podía entenderlo. Ahora eso era un problema.

—Te marco mañana, le diré que hablé contigo—sin esperar colgó. Riley se sentó en uno de los sillones que había colocado ennla habitación de su pequeña.

Ahora entendía porque Zay no quería decirle nada. Maya estaba siendo feliz con alguien mas mientras Lucas la buscaba. Era amiga de ambos y se encontraba entre la espada y la pared tratando de pensar en una solución que no sacrificara la felicidad de ambos. Debía de callar la información, al menos hasta que hablara con Maya.

(....)

Al salir de las clases Lili estaba feliz y algo entusiasmada por llegar a casa y quitarse su uniforme para colocarse un tutu. Esa tardé también tenía clases de ballet, y hasta ahora, era la cosa que había hecho que su humor mejorará.

—Veo que estas ansiosa— dijo Lucas cuando ambos ya iban en el auto.

—Si— contesto Lili. El interior del auto quedó en silencio, Lucas trataba de encontrar la forma de abordar la pregunta que tenía. En unas semanas sería el cumpleaños de Lili y no sabía si aún recordaba su fiesta de hace un año, cuando todo cambió.

—Enana, ¿Que quieres para tu cumpleaños?— la pequeña mostró una pequeña sonrisa. Por su parte, Lucas no dijo nada. Simplemente no podía prometerselo. Las investigaciones sobre el paradero de Maya iban mas lentas de lo que había imaginado.

Y por primera vez desde hace un año pensó en el que hubiera pasado si jamás se hubiera encontrado con Maya, tal vez todo seguiría como antes, pero al menos nadie estaría sufriendo. Le dolía admitirlo, pero a veces pensaba que era lo mejor que hubiera pasado.

Al llegar a casa Lili corrió a su habitación. Dejando su mochila en el suelo, fue Lucas quien después la levantó y la acomodó. Miro aquella fotografía de el y Lili, recordó cuando Maya había pisado por primera vez esa casa y había estado observandola.

Necesita despejarse, y aprovecharía que Lili iría a sus clases.
Marcó el número de su amigo y al tercer tono contesto.

—¿Que sucede?—pregunto Farkle.

—Salgamos, pasemos un buen rato hasta olvidarnos un rato de los problemas.

—No, sabes que debo cuidar a Riley y tu no puedes irte por la solución mas fácil— parecía que Farkle era padre de Lucas y estaba regañandolo por su mal comportamiento.

—Esta bien— Lucas colgó. Si Farkle no quería salir con el, pues lo necesitaba. Esa noche el se iba a divertir.

(.....)

Eran aproximadamente las ocho y media cuando el teléfono de Farkle comenzó a sonar. Era un número desconocido así que decidió ignorar, cuando su teléfono volvió a sonar, siendo nuevamente aquel número, decidió atender.

—¿Hola?—dijo. Cómo si se alegrará de que contestara, la voz del otro lado suspiro.

—Hola, hablamos de la escuela de ballet por la pequeña Lili Friar, hace una hora que las clases terminaron y nadie a venido por ella. Marcamos al número de su padre y no contesta, estaba este número en caso de emergencia, ¿Conoce a la pequeña?— Farkle iba a matar a Lucas cuando lo encontrarán.

—Si, ¿Podría decirme la dirección? Yo voy por ella— la chica al teléfono le dio la dirección.

—¿Qué sucede?— pregunto Riley, había estado al lado de su esposo desde que las llamadas habían comenzado, y por las expresiones que hacía, no le daba una buena señal.

—Lucas se fue a no se donde y dejo a Lili olvidada en la escuela de danza— el coraje de Farkle era notorio. Simplemente no podía creerlo de su amigo, realmente había creído que había cambiado, pero seguía evadiendo sus problemas de la manera mas fácil.

—Vamos por Lili— dijo Riley, quién ya estaba tomando un suéter para salir.

—No, tu te quedas aquí—le dijo, Riley quería ir, quería hablar con Lucas, quería decirle de lo que se había enterado la noche anterior, quería darle un poco de motivación, no quería verlo que cayera justo delante de su pequeña.

—No, yo voy. Se algo que puede hacerlo entrar en razón— la mirada tan demandante de Riley fue lo que hizo que Farkle asintiera.

—Vamos pues— ambos salieron de su casa. Primero irían por Lili y después la dejarían con su abuela para ir en busca de Lucas. Ambos esperaban que no cometiera alguna estupidez.

(....)

Llevaban al menos una hora visitando varios bares de la ciudad para dar con Lucas. Mientras Farkle salía del auto en busca de su amigo Riley intentaba llamandole, con la esperanza de que le contestara. Frustrado por no encontrarlo Farkle entró al auto dando un fuerte portazo. Llevo sus manos hasta su cabello removiendolo. Riley se quedó en silencio, la situación a todos se les iba de las manos y ella era la que poseía la información adecuada para calmar la situación.

—Zay encontro a Maya— habló cuando estuvo preparada para hacerlo.

—¿Qué?— pregunto Farkle. No estaba seguro de lo que había escuchado.

—Si Zay encontro a Maya en México— Farkle miró a Riley tratando de descifrar si sólo era una mentira que le dirían a Lucas para tranquilizarlo. Al saber que todo era verdad se volteó mirando hacia enfrente—Ella esta con alguien mas y no se si sea bueno o malo desircelo a Lucas.

Todo estaba mal. ¿Y ahora que iban hacer?.

Y hasta aquí el maratón espero les haya gustado.

Los quiero, bay bebes.
❤🌹

Buscando A Papá (BAM#2) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora