My Little Kitten『 국민 ¦ Kookmin』

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La señora Park era una hermosa híbrido de gato omega, con una sonrisa hermosa y reconfortante, de hermosa figura, ojitos de alcancía y color avellana, era una belleza de pies a cabeza. A cualquiera qué pasara por su caminó, adoraría y querría esa hermosa mujer.

Anhelaría tener a la hermosa Park HeeSook.

Pero, también era una mujer tímida, segura de si misma, cariñosa, con un hermoso y angelical corazón y la palabra ternura le salía hasta por los poros, ella desde qué era una pequeña gatita, fue adoptada por un joven CEO.

—HeeSook —a voz de su amo, DongYul la hizo salir de sus pensamientos.

—Oh, ¿Qué sucede? —preguntó la mujer con una sonrisa.

—Estaba hablándote, pero no contestabas, ¿En qué pensabas?

La chica sonrió y toco su vientre ya crecido, ya de más de siete meses.

—En nuestro JiMinnie, —sonrió al recordar, qué tendría un hermoso bebé con la persona qué más amaba—. Ya lo quiero tener en mis brazos DongYul, ya quiero conocer a nuestro hijo.

El hombre sonrió enternecido, y abrazo a su mujer por la cintura con cuidado de no lastimar a su bebé, acariciando el vientre.

—Sólo espera un poco más cielo, ¿De acuerdo? Igual quiero conocer a nuestro hermoso angelito.

La híbrido, se sentía realmente contenta y completamente enamorada de su amo, tenía muchos planes que hacer con él, realmente lo amaba con todo su alma.

Aunque no siempre la vida esta de tú lado.

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Después de un tiempo, JiMin ya era un gatito muy bonito, su cremosa piel, sus ojitos en forma de línea, su cabello color rubio y sedoso, labios regordetes y de hermosas mejillas, adoraba con toda su alma a su hermosa madre, ¿Cómo no? Si era como un ángel para el, un bonito ángel.

—¡Mami! —el rubio se acerco corriendo a su madre.

—Mi bebé, —la mujer lo abrazo, y le depositó un beso en su frente—. ¿Qué sucede bebé?

—Papá, ¿Dónde esta? —JiMin hizo un puchero.

La mayor, le sonrió.

—Tú papá está trabajando mi amor.

La puerta de la casa fue abierta, dejando ver a DongYul besando a una rubia con hambre, mientras ella era cargada y jadeaba como sí no fuera un mañana.

—D-dongYul —HeeSook con lágrimas al ver a su "amo" y marido con otra mujer frente a sus ojos.

Besándose y haciendo cosas indebidas.

El hombre miró a su esposa, y le regalo una sonrisa perversa. ¿Ese era su marido?

—Mami —JiMin se aferró a su madre llorando, quién seguía en mirando la escena con un dolor e su pecho.

El padre de JiMin se acercó, y la tomo del cabello lastimandola, él rubio lloraba y rogaba porqué soltará a su hermoso ángel, a la que le dice "mamá".

Era lo único que lo amaba en esta vida al parecer.

—¡S-suelta a mi mamá! -—gritó el gatito, acercándose a su padre mientras golpeaba y pataleaba a su padre en un intento de lastimarlo.

El hombre soltó a su madre tirandola al piso, soltando una bofetada al menor, haciendo chillar de dolor. Golpeaba sin piedad, al hermoso pelirubio y su madre desconsoladamente jalaba la camisa del qué alguna vez fue su marido, y alejándolo de su hermoso hijo.

—Maldito enfermó... Qué sea la última vez que le pones tus sucias manos a mí hijo —gritó la mujer desesperada, tomando en brazos a su pequeño.

—Largó de mi casa, no los quiero volver a ver cerca de aquí, o yo me encargo de matarlos —amenazo el hombre, mientras era revisado por la rubia si tenía algún moretón o rasguño qué le haya dejado HeeSook.

La mujer no lo dudo, tomó a su hijo llevándolo a su cuarto, y tomar las cosas qué fueran necesarias. Quedando solamente ellos dos, en la calle.

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La señora Park, estaba preocupada y nerviosa, faltaban diez para las tres de la mañana y aún no encontraban un lugar para dormir.

—Mami, tengo sueño.

La mujer acercó a su hijo, y lo abrazó.

—Mami conseguirá un lugar para dormir bebé, duerme en mis brazos si quieres cariño —murmuró la mayor.

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