<<¡¿Que no estabas encerrado en una maldita prisión?!>>
Su cabeza gritaba maldiciones y preguntas sobre la persona que tenía enfrente, aun en aquel estado de Shock.
-¡Feliz cumpleaños hermanito!- Marceline grito mientras sonreía de oreja a oreja.
-Oh, Marceline, no tengo palabras- Marshall respondió después de algunos segundos y con tenues pausas aun sin quitar aquella expresión de asombro- Por favor ¡Pasen!
Marshall se hizo ligeramente a un lado con una enorme sonrisa dejando pasar a los chicos con los que venía la chica en aquel auto. En ese momento reacciono y saliendo de su trance aprovecho el hecho de que Marceline aflojara su agarre para empujarla y salir corriendo en dirección opuesta al edificio.
No había llegado ni a media calle cuando unos fuertes brazos la envolvieron por atrás cargándola y llevándola de nuevo hacia el interior de la casa.
-¡Deja de moverte!
Ash, al ver que ____ no dejaba de forcejear, termino por darle una bofetada la cual logro aturdirla lo suficiente para que no pusiera demasiada resistencia.
-Maldita perra...- Susurro antes de entrar en la residencia llegando justo a la sala donde todos ya se hallaban reunidos y platicando.
Todos los presentes clavaron su mirada en Ash y ____, Marshall específicamente en ____, que tras analizarla unos milisegundos camino directamente hacia ellos.
-Tu novia no es muy rápida y definitivamente no es muy fuerte así que no creo que tengas problemas para- El peliblanco no pudo terminar su frase. Marshall le había proporcionado un golpe en la cara lo suficientemente fuerte como para llevarlo al suelo- ¡¿Pero qué demonios te sucede?!
Marshall no respondió. Esta vez caminó hacia ____ y la abrazo posesivamente un momento. Se separó un poco acariciando su mejilla la cual tenía un ligero tono rojizo.
-¿Él te hizo esto?
____ al comprender que se refería al golpe que le dio Ash momentos atrás asintió lentamente con algo de duda. Inmediatamente Marshall miro nuevamente a Ash quien aún se encontraba en el suelo y después volteo hacia Marceline, la cual al conectar miradas con el pelinegro asintió seriamente y chasqueando los dedos, Flame, Queen y Gunter se acercaron rápidamente hacia el peliblanco inmovilizándolo de ambos brazos, para después caminar fuera del edificio con Ash lanzando maldiciones.
Una vez se escuchó la puerta cerrar Marceline hablo.
-En fin, espero que te haya gustado tu regalo hermano.
-Me encanto. Bastante inesperado, no esperaba verla tan pronto tras lograr salir de la cárcel- Ambos pelinegros observaban a la chica a detalle.
-Hablabas tanto de ella que al ver que tu cumpleaños se acercaba fue en lo primero que pensé- Marceline dio un suspiro sentándose en uno de los sofás- Fue un poco más complicado de lo creía. La hubiera traído desde hace tiempo sino fuera porque siempre esta con aquel rosadito.
-¿"rosadito"?-Marshall cito las palabras de Marceline con duda, dando a entender que no se hallaba informado sobre la situación de ____ al menos desde que lo sentenciaron en aquel juicio.
Marshall tomo delicadamente la mano de ____, la cual, desde aquel golpe que recibió no volvió a pensar en querer si quiera oponerse a una orden, y la guio hasta el sofá frente a Marceline, donde se sentó el con ella en sus piernas, abrazándola por la cintura.
-El abogado de cabello rosa, ya sabes.
Por su expresión, Marshall pareció recordar algo.
-¿Por qué el sería un problema?- Pregunto con semblante serio.
-Bueno, no es que sea amarra-navajas, pero me parece que TU NOVIA y el princeso estuvieron saliendo este tiempo.
Lo nervios no tardaron en llegar a ____ al sentir la dura mirada del pelinegro sobre ella. Tímidamente giro leve su cabeza para ver mejor a la cara a Marshall y se encontró nuevamente con sus negros ojos penetrantes que nunca logro superar.
-¿Eso es cierto ____?
-Y-yo...- Tartamudeando, un "yo" fue la única palabra que salió de su boca.
-El que calla otorga- Marceline rio por lo bajo por su propio comentario.
-Bueno... no me sorprende que con tan hermoso rostro otro hombre quisiera conquistarte- Nuevamente la mano de Marshall acaricio la mejilla de la chica, deteniendo su pulgar en los labios semiabiertos a causa de las palabras que aún se encontraban atoradas en la joven- Pero no te preocupes. Como puedes ver, no te libraras de mí tan fácilmente- El pelinegro se acercó peligrosamente a ella rozando nariz con nariz y volvió a hablar en susurros- Esta vez será diferente. No me complicare como lo hice con Finn, me asegurare desde el inicio de que seas siempre y para siempre solo para mí- Deposito un pequeño beso en la punta de su nariz- Ahora eres mía ____... Empieza a grabarte esas palabras.