Y si te quedas, qué? [Renmin / Jaejun]

Especial 3

× advertencia ×
Intento de lemon-fallido-, si no les gusta saltenselo (?

La primera vez.

Jaemin y Renjun no podían dejar las manos quietas. Eso lo habían descubierto con el paso de los días.

Entonces ahí estaban los chicos. Jaemin se encontraba sentado en la cama con Renjun encima suyo mientras se besaban. Las manos del menor estaban dentro de la camisa del chino, éste acariciaba la parte posterior del cuello del muchacho.

A Jaemin le asustaban las ocasiones en las que los besos pasaban a ser más que cariñosos, la temperatura de sus cuerpos aumentaba y los toques despertaban a sus amiguitos.

Cómo en ese momento.

Jaemin siempre terminaba parando las cosas, no era la primera vez y entonces alguno de los dos se dirigía al baño a liberarse. A Renjun le disgustaba que Jaemin hiciera eso, pero era que simplemente tenía miedo. Estaba aterrado.

Yuta le había hablado sobre el sexo entre chicos, la primera vez y el dolor. Había sido demasiado incomodo para Jaemin tener que escuchar a Yuta hablar y hablar sobre cómo debía hacerlo en la primera vez y luego ver como éste le regalaba una caja de condones y lubricante.
Todo con la excusa de que "debia estar preparado".

Pero no estaba preparado para meter a su amiguito dentro de su novio.

Jaemin no era un santo, había leído y visto muchas veces escenas de sexo heterosexual. El porno no era un buen maestro y cuando Jaemin había intentado ver sexo homosexual, había terminado cerrando todo a causa de la vergüenza.

Y vale, el chico tenía que aceptar que en un punto había empezado a fantasear con su lindo novio, porque si, Renjun podía ser muy provocador cuando se lo proponía, poniendo su voz coqueta y chupandole el cuello.

Cómo en ese momento.

—Renjun bebé, deberíamos parar. —susurro Jaemin entre jadeos, había empezado a sentir presión en su parte.

El chino bufo, alejándose de Jaemin y mirándolo con el ceño fruncido.

—¿necesitas ir al baño y dejarme aquí solo con ganas? —preguntó el muchacho, con algo de enojo en su voz.

—Eh, ¿si?

El chico blanqueo los ojos.

—No soy de cristal, no me voy a romper. —susurro Renjun, mirándolo a los ojos.

Jaemin sabia a que se refería, y habían hablado de eso muchas veces.

Simplemente no quería hacer llorar al chico, en ninguna de sus formas.

—Tengo miedo de lastimarte, lo sabes. —replicó Jaemin.

—En algún momento debe pasar.

—¿y estas de acuerdo en que sea ya? —preguntó con algo de nerviosismo.

—Sé que Yuta te ha estado hablando de eso. —respondió Renjun con una risita.

Renjun pego sus labios a los del menor nuevamente, como siempre tomando la iniciativa para esos casos. Jaemin recibió su beso, acariciandole la piel bajo la camisa.