Florencia llegaba a la casa emocionada por su hermoso arreglo de flores de jasmin. Lolita acostada en el sillón del living la observaba sin decir palabra; cuando su amiga se percató de su presencia le señalo con su mano el arreglo que estaba encima de la mesa del comedor. En el rostro de Florencia se vieron expuestas todo tipo de emociones en cuestión de segundos, su cabeza giraba hacía Lolita y el hermoso obsequio.
─¡Qué lindo y hermoso detalle! ¿Quién te lo envió?
─Son para vos. Lo entregaron hace media hora. Y por lo que veo también te enviaron otro a tu laburo.
─Los jazmines son una muestra de agradecimiento por la crítica que hice a la colección de la artista Jazmin del Rio, los recibí en la tarde.
─Que manera más especial de agradecer tiene esta chica. ¿Vas o no a leer la tarjeta, Flor?
─¡Qué onda con vos! ¿Estás celosa?
─La verdad un poco no te lo niego.
─A ver de quién es y que dice la nota: La rosa blanca es para que no olvides que estoy pendiente de ti, la rosa rosada para decirte que valoro mucho la noche de ayer y la rosa amarilla por la alegría que me produce recordarla. ¡Ah! Y el globo de color violeta porque refleja la belleza que hay en una mujer como vos. Jazmin. ─ Ahora era ambas las que se miraban con total asombro, Florencia con cierto destellos de picardía en sus ojos y Lolita imaginando sin acertar que había pasado la noche anterior.
─¡Florencia Estrella! Veni boluda y sentate a mi lado. Vos me vas a contar sin omitir detalle que ocurrió anoche entre ustedes dos.
Florencia no hacía más que recordar la calidez en los labios de la mujer de su foto mientras le comentaba a su amiga lo que vivió en el baño de aquel restaurant. Su reacción al verla y correr a abrazarla, lo bien que le hizo estar envuelta en ese abrazo, su voz suave, su mirada esmeralda, su humor y luego su impulso incontrolable que la condujo a darle ese beso. Lo inesperado de su encuentro significo para ambas el punto de inicio de ese camino largo o corto que deberían transitar con un único destino, dejar que el amor habitara en sus corazones.
─¡Amiga! Me dejas impresionada con tu actitud. No tengo dudas de que a vos te pasa algo con ella.
─Tengo la cabeza hecha un quilombo Loly, no sé qué me pasa cuando la veo. Te juro que nunca pensé que una mujer me provocara todas estas sensaciones y emociones. ¡Dios! Jazmin del Rio se me está metiendo hasta en mi piel. Estoy muy temerosa de vivir una experiencia como esta, yo no sé cómo se hace amiga, no sé cómo afrontar esto que me pasa. Mi vida ha dado un giro de 360 grados y me siento en medio de un huracán.
─Sí un huracán de categoría 5 llamado Jazmin. Flor yo sólo puedo aconsejarte que le des tiempo al tiempo para que todo en ti se aclare y puedas continuar hacía el otro paso. Entiendo que te sientas aturdida y hasta asombrada por lo que sientes, pero el amor es así y ante él no hay argumentos.
─¿Vos pensas que es amor lo que siento por ella?
─Si no lo es se le asemeja mucho boluda.
─¡Ah bueno! Por fin das señales de vida Carly. ¿Qué ondas con vos? Te internaste en casa para que el alcohol que chupaste te conserve.
─¡Hola Jaz! No me jodas. Todavía tengo en mi cuerpo alguna reserva de lo que tome. Estoy que no me quiero mover ni para ir al baño. Ayer que estuve con Lucía en la práctica de futbol de los nenes casi me desmayo.
─Espero que hayas aprendido que se puede tomar pero no llegar a esos extremos.
─Lo se amiguis. Pero la verdad es que llegue a ese estado por un remordimiento.
─¡Mamadera! Así será su tamaño. Contame a ver si te puedo ayudar.
─Si no te coges una bronca conmigo, me ayudarías y mucho.
─No te estoy entendiendo Carla. Prometo no enojarme con vos si eso te tranquiliza.
Carla tomo una bocanada de aire asumió mejor posición en su cama y sin más lo soltó.
─Fui la culpable de que Florencia estuviese con nosotros en el restaurant.
─¿Qué vos hiciste qué?
─¡Ay Amiguis! Perdóname yo se lo dije a Lu que cuando te lo contara te ibas a enojar. Sory, sory quise ayudar y la cague.
─Carla no tenes porque disculparte, no te niegó que tenerla enfrente me incómodo pero luego todo estuvo bien. Debería felicitarte.
─¿Lo decís en serio o me estas cargando?
─Posta que muy en serio. Antes de ese encuentro en la mesa ya nos habíamos visto nuevamente en el baño.
─¡Lo sabía, lo sabía! El que te perdieras tanto tiempo y después charlar con Lolita me cuadro en ese momento lo que estaba pasando. Fue allí que decidí invitarlos a nuestra mesa y no ir a buscarte.
─¿Viste ahora porque te debo felicitar y dar las gracias? Esta vez Florencia y yo avanzamos un poco.
─Esto hay que celebrarlo Jaz. No sabes cómo me alegra por vos.
─¿En serio queres celebrarlo Carla? ¿No fue suficiente para vos lo de la otra noche? Te lo agradezco pero eso no será posible. Desde ese encuentro estoy contando las horas para poder verla otra vez. Me dijo que había terminado su relación, me pidió un compás de espera para que hablásemos de lo que nos pasaba y lo más inolvidable me dio un beso impulsivo y sorpresivo que me tiene flotando entre nubes.
─Te juro que se me paso todo el malestar que tenía con lo que me contas. Estoy feliz por ti amiguis re feliz. Vos te mereces esa felicidad que sentís ahora.
─Se me hace difícil cumplir lo que acordamos de darnos tiempo o más bien dárselo. Le envié flores a su oficina y a su casa.
─¡Vos sí que vas con todo! ¿Y qué onda te respondió?
─¡No! Lo más seguro es que no lo haga. Entiendo que para ella todo esto no es fácil de asimilar. Por eso estoy dispuesta a subirme por las paredes antes de cometer la locura de insistirle en que nos veamos y todo se termine.
─Conta conmigo. Mientras vos subis las paredes yo observare un helado sin intentar comerlo. ─ambas comenzaron a reír al imaginarse a cada una haciendo semejante sacrificio.
─¿Y contame qué onda con el coleccionista de lienzos?
─Estamos reencontrándonos. Creo que al contrario de tu relación la nuestra va sin freno por la vía rápida y todavía no llega esa parte donde hay que maniobrar cual piloto de fórmula uno.
─¡Ah bueno! Eso te demuestra que el amor nunca cambia su esencia solo la presentación que lo contiene. Ve para adelante amiguis vive el momento pero al menos ponete el cinturón de seguridad.
─No te preocupes que siempre le doy su uso correcto; aunque a veces sea molesto cuando se le da rienda suelta a lo que comienza por un beso y ya sabes a dónde termina.
─Tenes toda la razón. No hay nada mejor que te dejes llevar y que te hagan llegar. ─El silencio entre ellas evidencio a donde sus mentes habían ido.
─¡Ay por Dios! Recobremos la compostura. ¿Qué vas a hacer hoy en la tarde? ¿Queres venir a casa?
─Lo dejamos para otro día. Tengo programado un paseo con Milly y Helena. Ya sabes, tardes de mamas.
¡Sorpresa! Los termine ¿Y entonces porque no publicarlos? Disfrútenlos y Cuídense mucho.
ESTÁS LEYENDO
El destino tiene otros planes (Completa)
FanfictionDespués de sufrir por un amor que sólo alimento su soledad, Jazmin concentrara su vida en sus dos pasiones: su hermosa hija y la pintura. Flor aprenderá que su prioridad en la vida será valorarse y dejar atrás una relación donde la infidelidad era...