Capitulo 9

307 19 0
                                    

SIMPLEMENTE AMENAZANTE

Me despierto con los músculos contraídos. Me incorporo y rompo las correas que me han vuelto a colocar para que no me mueva.

Bajo de la camilla en la que me han puesto y me dirijo a la puerta. En el camino, me miro una fracción de segundo en el cristal que hay, y no puedo evitar pararme en seco y ponerme de cara.

Me acerco mientras dirijo una de mis manos a mi ojo izquierdo... a pesar de que tengo una marca de color azul, no me duele en absoluto.

Me tenso y me giro al escuchar la puerta abrirse. Erwin me sonríe.

- Buenos días, aquí te dejo ropa, cuando te la hayas puesto, sal.

Se va de la habitación dejándome de nuevo sola. Me acerco a la ropa, la miro con asco y me la pongo. Cuando salgo de la habitación, no puedo evitar querer golpear a Erwin, pero me esquiva con cierta dificultad.

- Yo de ti no lo volvería a intentar

Me giro sorprendida al escuchar la voz de Luka. Le fulmino con la mirada y aprieto mis puños hasta dejar los nudillos blancos. Le veo sonreír y mirarme a los ojos... doy un respingo al notar cierto cariño en ellos.

Desvío la mirada y le doy la espalda para irme, pero Erwin me corta el paso.

Alzo la mirada y le miro directamente a los ojos, sin que se lo espere le estampo la cabeza contra la pared y le dejo inconsciente en el suelo.

Empiezo a caminar, pero noto como Luka me sigue desde atrás con su sonrisa tonta en el rostro.

Sigo caminando hasta llegar fuera del pasillo blanco. Me paro en seco al ver todo lo que me rodea.

- Bienvenida a la sede de A&O

Me giro y le miro.

- TU sede, no la mía, aquí solo hay lobos de tu manada... déjame irme

Me sonríe

- Claro, podrás salir, pero antes tendrás que enfrentarte a todos los que intenten pararte

Le doy la espalda y empiezo a caminar en dirección a la puerta. Los Omegas se echan para atrás, el problema son los Alfas, que al ver hacia donde me dirijo, empiezan a congregarse en la entrada.

Escucho la risa de Luka... como me molesta.

Empiezo a correr en dirección a la salida mientras veo como los Alfas vienen hacia mi para impedirme la salida. Sonrío. Luka se piensa que no llegare a la salida, pero se equivoca, lo haré y nadie podrá impedírmelo.

Les esquivo, les golpeo, les rompo algún que otro hueso y por fin consigo llegar a la salida. Paso corriendo por esta y me dirijo hacia el canal de agua que lleva a la ciudad. Salto para zambullirme, pero antes de hacerlo escucho un disparo y un dolor me recorre el muslo derecho.

Lo último que veo es la sonrisa de Luka al haber acertado el disparo.

LÍDERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora