Narrador obnipresente:
Aquella noche murió Leila para siempre, junto a su amiga se iban todos sueños, sus ilusiones, se iba su sonrisa, se iba su vida. Nunca más volvería a ser la misma, llamo el abogado que hasta el momento había llevado el negocio de su madre y le explico que desde ese momento ella tomaría posesión de todo.
Semanas después aterrizó en Roma y efectivamente tomo el control, con toda la información que ella tenia no le costaría mucho arrinar a Danilo. El primer paso era transformarse y así lo hizo, contrato a el mejor cirujano de Roma y este borro de su rostro todo recuerdo de aquellos golpes. Le hizo tratamientos a su cabello haciendo que este se volviera más brillos y lleno de vida
Cinco meses después se encontraba en la consulta para saber el sexo de su bebe.
- como esta doctora.- le pregunto con dudas a la doctora, ella amaba a su hija y tenía mucho miedo a perderla
- perfecta, tu pequeña esta en perfectas condiciones. - la respuesta de la doctora vino acompañada de una sonrisa que le alegro el día a nuestra protagonista.
- es hembra.- en sus ojos había mucho amor, pero solo para su hija, era el único amor que ella sentia.
- Felicidades.
Haci, salió de aquella consulta y en su camino de regreso compro todo lo que vio para su hija y entre prenda y alfiles, se le ocurrio.
-Analia, ese será tu nombre pequeña- paso sus manos por su abultado vientre y así fue como decidió el nombre que tendría su hija, en una tienda rodeada de personas que ni la conocían.
Los meses pasaron y Analia nacio, la niña mas bella del mundo pensó su madre al verla era rubia como su padre y sus ojos eran de color azul verdoso, o verde azuloso, como se vieran en el momento. Sus manos atraparon las de su hija y ella las beso y en su frente deposito otro beso, para minutos después desirle.
- tu, eres mi princesa, perdoname por obligarte a vivir en un mundo asi, pero esto es culpa de tu padre.
Los años pasaron y ya era hora de que comenzará el plan de venganza. Después de tener a su hija Leila se sometió a un profundo entrenamiento donde aprendió a utilizar armas de todo tipo, aprendio a activar y desactivar bombas, además con mucha pasiencia tomó numerosas clases de electrónica y programacion. Se volvió una experta en la conducción de todo tipo de veiculos y medios de transportación así como varias formas de lucha. Aprendió el arte de la seducción y se volvió más que una esperta en la cama.
La manipulacion se convirtió en su aliada y cada día ella se volvía más fria, más despota, más hinumana exepto con su hija, que la fue criando con mucho amor y dedicacion, su puntería era muy sertera al punto de disparar desde grandes distancias y dar en el blanco. Con el tiempo se volvio un arma humana, una bomba de tiempo.
Mientras tanto ignorante de la existencia de su hija, así como ignorante a que Leila había sobrevivido Danilo perdía la pasiencia, ya que el segundo paso en el plan de Leila era ir despojandolo de a poco de todas sus pertenencias, por lo que primeramente saqueo algunas sus cuentas bancarias y acto seguido compro varias las propiedades que el tenía de escondite, tanto en Roma como en los países exteriores. Pero eso no es todo, gracias a sus conocimientos en bioquímica desarrollo una droga a la que llamo Fénix y con la ayuda de sus nuevos aliados la expandió por toda Roma, sacando del mercado la metanfetamina, la cocaina y la eroina.
Le estaba quitando a sus socios y se fue aliando a sus enemigos.
Conocida por muchos, temida por todos, nadie sabía quien era, nadie le ha visto el rostro, es una puñetera sombra a la que todos le temen y con la que todos quieren aliarse para así poder toner de su lado a la única proveedora de la mejor droga que se mueve en el mercado.
Danilo moría de la rabia por tener que depender de alguien que ni conoce y peor, una mujer, pero aun así el seguía teniendo el control de Roma, no totalmente pero seguía siendo el jefe. El también era aliado de Leila aunque el no sabia quien era ella, nadie lo sabia en realidad.
Habían pasado 5 años, cinco años en los que todo había cambiado, empezando por su nombre. Para el mundo Leila Garcia estaba muerta. Ella era Keyle Bolnard La Diosa Romana. La Diosa de la Mafia.
La tercera parte de su plan estaba por comenzar, Danilo se arrastraria a sus pies, sería el quien implorar clemencia, de eso ella estaba segura.
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La culpa es del deseo
ActionDanilo Lobateli es un hombre dominante, frio, engreído y calculador, es el jefe de la mafia en Roma y a pesar de que cree que nadie, absolutamente nadie, puede desafiarlo, se equivoca, existe alguien no solo lo va a desafiar, sino que le va arebata...