9- Comienza la guerra

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Después de lo sucedido, bajo las escaleras, mis maletas y las de Analia ya están en el auto.
- A casa de Izak.
- si señora.
El viaje pasa raido, al llegar toco la puerta y sale Izak con Analia en brazos dormida.

- Todo bien.- Todo genial, ya sabes que hacer, es hora de que acabemos con esto de una vez por toda.
- si señora.
Cargo a mi pequeña y vuelvo al auto. En cuanto llegamos a la pista el elicopteró nos espera para salir hacia la isla, alli, todo esta preparado.
Cuando llegamos Analia aun duerme así que la pongo en la cama de su habitación que es el doble de bonita que la que tenia en Roma.
Salgo y me encierró en mi despacho.
No podía soportar la espera. Esta misma noche ya no existiría Danilo Lobateli.
Ya estoy a punto de lograrlo, le quitaré lo poco que le queda, ya no tiene dinero y la ultima mercancía que tenía seria detenida por la policía esta misma noche, mañana en la mañana el estaría hecho una furia, pero no importa es lo único que me falta para acabar con el.
Después de su llamada quede muy feliz y satisfecha, el quería ver a mi hija, pero no se lo permitire.
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Narra Danilo
-No entiendo como paso, ese cargamento valía billones, ahora si estamos jodidos.
- Lo siento Danilo, pero no comprendo, y sabes que era la única que nos quedaba, ahora si la única proveedora es tu querida amiga y ni siquiera tenemos dinero para comprar, que vas a hacer.
- Señor, tiene una llamada.
- Gracias Veatris.- contesto y a través del telefono escucho el sonido del mar.
- como amaneciste.- es ella, ahora si no tengo dudas fue ella.
- para tu mala suerte bien.- No le daré la satisfaccion.
- Que bueno, llamaba para decirte que te propongo un trato.
- Que trato.
- Te regalo un cargamento con el mismo valor que el que perdiste a cambio de tus rutas marítimas y aereas.
- Estas loca.
- no, no estoy loca, quiero la exclusividad, pero si no quieres no importa.
- Que tal si hacemos esto, yo te pago el cargamento y listo.
- Déjame pensar......NO.
- Déjate de rencor, esto no es un juego, estamos hablando de mi vida.
- Ya lo dijiste, tu vida.
- Leila déjate de gilipolleces.
- KEYLE, joder, te deje que mi nombre es Keyle.
Me cuelga y estampó el teléfono contra la pared, esta loca, pero es muy inteligente.
- Que te dijo.- me pregunta mi amigo.
- Fue ella.- Susurro pero Leo me escucha
- Danilo dime de una puñetera vez.
- Que me dará un cargamento igual de valioso que el que perdimos a cambio de mis rutas. Dijo que quiere la esclusividad.
- Dios, esta loca.- el rostro de mi amigo es una poesia. Pareces era que esta viendo al diablo, pero no es para menos.
- no, ella no esta loca. Es muy inteligente
- demasiado, Danilo que vas a hacer.
- No se las dare.
- entonces, piensas venderlas para poder....- No lo deje terminar.
- ni loco, Leo.
- Pues yo solo veo tres obciones, aceptas su trato, vendes las rutas e intentas comprarle otro cargamento o te retiras.
- Ninguna, tiene que haber otra forma.
- Pues lamente decirte que no. Tus cuentas están bacias, no queda una sola caleta con dinero, tus propiedades fueron vendidas, no tienes nada. Lo siento pero debes tomar una decicion.

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Narra Keyle

-Mami, mami, ya viste que bonito esta el mar.- dice mi pequeña corriendo hacia mi, muy animada. Desde que despertó quiso ir al agua y apenas ahora regresa.
- si mi amor, ya la vi.
- Mami, podemos ir en ese barco grande para verlo completo.

Se refería al yate, amo tanto a mi hija, le dije que si y almorzamos en el yate, recorrimos la isla por mar y indudablemente es presiosa. En la tarde regresamos y Analia cayó rota del sueño, yo por mi parte me di un baño y cuando pretendía dormir sonó mi teléfono.
- Señora, soy yo, las cosas salieron mal. El señor vendió su casa y muchas pertenencias y compro otro cargamento pero de metafetaminas y que cre, ya lo vendio.- Mi rostro se de figuró por completo, como diablos, esto seria un poco más complicado.
- Izak, prepara el plan B, quiero que se asuste tanto que no quiera ni volver a hablar. Esta noche, en 15 minutos, de taba la bomba que pusiste el mes pasado.
- señora, esta segura, en la casa hay más personas.
- Izak, tranquilo, en 15 minutos detonala, tardará 15 minutos más en explotar, eso es tiempo suficiente para evacuar a todos.
- si señora.
- Gracias Izak.
Cuelgo y lo llamo, esto no terminará asi.
Un tono
Dos tonos
Tres tonos
Contesta
- Hola, mi querida, como estas, espero que bien, y mi hija, como se encuentra.
Maldito se está burlando de mi lo voy a matar.
- Estoy muy bien Danilo, pero no me llames querida y,. yo no sabia que tenias una hija, dile a la pobre que tiene mi más sentido pesame.
Si piensa que me va a amedrentar esta muy equivocado.
- Estas acabando con mi pasiencia, q-i-e-r-o v-e-r a m-i HIJA.
- pobre tonto, ya dije que no se quien esa pobre niña que tiene la desgracia de tenerte como padre. Pero en fin, llamaba para desearte felicidades, espero que te siga lleno igual de bien en el infierno.
- De que hablas.
Su tono ya no era engreido, ahora era de miedo, lo logre.
- Querido, en serio le doy el pesame a tu hija porque dentro de...- miró mi reloj- diez minutos será huérfana de padre y creo que el funeral será muy grande.- me río ampliamente.- es una pena tu mamsion era muy hermosa.
- DE QUE COLONES HABLAS. KEYLE DÉJATE DE TONTERÍAS Y DIME QUE DICES.
- shshshs, cálmate mi amigo, ya queda menos siete minutos mi vida, nunca me olvides, llévate una manta, en el infierno hace muchísimo frío lo digo porque yo ya estuve ahi, tu me enviaste ahora te devuelvo el pasaje cariño. Ah, casi lo olvido GRACIAS por darte cuenta que yo soy KEYLE.
- No creo que hayas puesto una bomba.
- una muy potente que acabará con tu vida y la todo el que este cerca de tu casa.
- ERES UNA MALDITA LOCA. LEO EVACUA A TODOS AHORA, SACA EL DINETO, LAS ARMAS QUE PUEDAS, APURATE.
- Tranquilo, aun tienes- miró mi reloj,- cuatro minutos para que sea de tonada y quince para que explote. Corre mi vida, corre rápido porque sino tu hija irá pronto a un gran entierro.
Le cuelgo pero no sin antes sentir la frustracion, la ira, el odio en su voz. Al fin lo logre.
Me tomo un delicioso wisqui jb. Pongo música vivo por ella de Andrea Bocelli. Comienzo a cantar y miró mi reloj. Quedan dos minutos para que explote la bomba.
Una lágrima se resbala por mi mejilla, seguida de otra y luego otra. Un minuto, siento como m dejo llevar por la musica, el wisqui hace efecto. La cansion llega a su fin y con ella el tiempo.
Tomo el teléfono marco el numero de Danilo.
Un tono
Dos tonos
Tres tonos
Cuantro tonos
Contesta
- Te odio.- es lo primero que escucho.
- Gracias.- disimulo mi estado de animo.
- Eres la mujer mas loca que yo he conocido.
- Gracias otra vez.
- No sabes acabo de cometer un error
- cuál
- haber pensado que tu eras una mujer.
- Y no lo soy.
- no, eres una maquina. Una maldita maquina.- sus palabras me hieren en lo más profundo.
- si tienes razón soy una maquina, soy un robot, con un objetivo muy claro.
- si, destruir a Danilo Lobateli.
- si, ese mismo, acabar, destruir, matar a Danilo Lobateli.
- sabes, no lo vas a conseguir.
- Que te hace pensar eso.
- Porque yo acabaré antes contigo.- ahí me di cuenta que me estaba localizando, pero que tonto si piensa que me tomará por sorpresa.
- Aqui, te espero.
- Hasta luego.- Ya iba a colgar cuando el me dijo.- Dile a Leila que nos veremos pronto.
- Dice Leila que no desea verte, pero tranquilo. Yo te recibo.
Colgue y todos se prepararon para recibir a Danilo.
- El elicopteró esta listo para llevarse a la señorita Analia.- me dice Luis mi gualdespaldas
- perfecto. Llevensela, Izak la va a recibir.
Se va a mis lagrimas amenazan con salir. Pero no. Me levanto y voy a mi habitacion, me pongo un pantalon negro de cuero muy ajustado pero no demasiado, lo suficiente para dejarme mover. Una top- crop, negro y un chaleco negro de cuero tambien. Mis botas negras por las rodillas y en ellas dos armas de oro en chapada en diamantes. En mi chaleco tengo dos armas mas. Me pongo mis guante llamo y en ella una pequeña navaja. Recojo mi pelo en una coleta alta y me siento a esperar.

La culpa es del deseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora