El Socio

Capítulo 18.- La Firma del Contrato.

Habían pasado dos semanas y hoy era el día en que firmaría el contrato mi primer firma importante, me la había pasado haciendo firmas y firmas hasta que di con la indicada y así mi padre pudo registrarla o darla de alta, era un viernes por la mañana y ese día no asistiría a la escuela, me sentía bastante nervioso, un traje negro sencillo colgaba de la puerta del closet. La firma seria dentro de dos horas, mi padre, mi madre y Madison estarían ahí, era algo que me ponía tan nervioso.

Fuimos bastante temprano a la empresa y ahí estuvimos platicando y repasando el contrato, porque era yo quien hablaría nadie me ayudaría en nada, había estudiado el contrato con Madison de muchas maneras y todo siempre salía bien, pero no era la misma situación al estar con Madison, al estar enfrente de un empresario bastante importante.

Ana Karen le informo a mi padre que ya todos habían llegado, en ese momento salimos de la oficina de mi padre y fuimos a la sala de juntas y justo cuando entro lo primero que miro es a Madison hablando con una mujer. Mi madre la ve y rápido se acerca a saludarla, miro al señor Mario De La Riva que era el empresario con quien firmaría el contrato, mi padre nos presenta, estrechamos la mano y todo parece bastante agradable.

-Tobías. –Me habla mi madre levantando un poco la mano y yo me acerco. –Tobías, te presento a Alison Palomo la prometida de Madison.

Justo en ese momento saludo a aquella mujer y le sonrió luego volteo a ver a Madison. – Felicidades por su compromiso. –Pero también en ese momento sentía que algo en mí se destruía, pero sabía que no todo sería miel sobre hojuelas. Pero aquello era algo que no esperada.

-Podemos empezar con la firma. –hable, porque quería salir lo mas pronto posible de ahí.

-Señor Mario, vamos a empezar con que vamos a querer el 25% no mas no menos y en vez de ser un contrato a 7 años, será un contrato a 4 años porque así nos beneficiaremos nosotros tanto como ustedes, los impuestos a pagar serán mucho menores y se pagaran casi solos. Podremos renovar el contrato siempre y cuando se respeten los términos acordados.

De otra manera no estamos dispuestos a renovarlo, por más sencillos que sean los términos es importante que se respeten. En dado caso de no respetarse tenemos un oferta un poco mejor, pero es obvio Señor Mario que a los dos nos conviene esto, porque no encontrara a ninguna otra empresa que le ofrezca lo mismo y a un corto plazo de recuperación. Está en sus manos aceptar o dejar ir esta gran oportunidad de formar parte de Falahee Enterprises.

-Tobías tienes una voz firme y eso me gusta. Tienes voz para las finanzas y claro que voy a firmar.

Dos minutos después estábamos todos tomando un vino espumoso dulce deliciosos, todos me felicitaron, todos excepto Madison y de verdad me alegraba de que no lo haya hecho, no lo quería ver nunca, no podía creer que me haya mentido de esa manera. Pero la poca serenidad que me quedaba se acabó cuando alguien me toco el hombro.

-¿Podemos hablar Tobías?

-Creo que no es el momento Madison.

-Es importante, tengo que explicarte.

-No hay nada que explicar, es claro que te vas a casar y eso es todo lo que debo saber. No tienes que explicarme nada.

-Acompáñame un momento a la terraza y no acepto un no por respuesta.

Subimos a la terraza y fue algo realmente incomodo hubiera deseado poder salir corriendo de ese lugar.

-Deja que te explique todo por favor.

-Madison, de verdad no hay nada que explicar todo tiene sentido, yo solo era un pasatiempo para ti y yo fui un tonto que se dejó engañar con todo eso del amor, de verdad si quieres explicar algo mejor no digas nada y déjame ir, no quiero pasar por este drama ahora. Mejor ve y se feliz con Alison.

Y en ese momento me di la vuelta y me fui del lugar, entre a la oficina de mi padre y le dije que me iba que me sentía cansado, salí del edificio y tome un taxi rumbo a casa. Cuando llegue a casa lo primero que hice fue llenar la tina cuando esta se llenó me desnude y me sumergí en esa agua, contuve la respiración y abrí los ojos y ahí me quede unos segundo, luego salí de esa agua y me quede sentado, pensando en todos aquellos momentos que habíamos pasado juntos y me arrepentía tanto de haber caído en ese juego tan frívolo.