Las lágrimas eran saladas, sus ojos se inyectaban de rojo y sus mejillas se coloreaban de rosa.Las gotas de agua se deslizaban con lentitud y caían al llegar a la punta de la barbilla.
Sus ojos brillaban como la miel a la luz del día. Sus labios temblaban en sollozos que se rehusaban a salir de su boca.
Hecho ovillo contra la cama, enredado entre las sabanas, con las luces apagadas y la noche estrellada.
Mark lloraba, con la garganta apretada y el dolor ardiendo en las iris claras.
Mark era un omega que lloraba como cualquier otro, Mark era un omega que sufría como cualquier otro.
Pero era el único que tendría el placer de que dos larga y delgadas manos acariciaran su rostro, que unos suaves y rosados labios limpiaran sus lágrimas, que dos ojos grises le vieran con amor y que un cálido corazón le diera consuelo.
Porque era el único por el que Samira abandonaría su trabajo y correría a su hogar, por el que la alfa se metería debajo de aquellas sabanas en pleno verano y le abrazaría como si hiciera el invierno mas frío de todos.
Porque era el único al que Samira consolaría.
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Siendo Uno
RomanceSamira es la alfa de Mark y Mark es el omega de Samira. Siempre ha sido así. "Porque no me siento completo si no estás tú. Porque somos dos, siendo uno"