Me arrepiento.

Capitulo 5: "la verdad" parte 2

El día llego lento, el gallo no canto, los pájaros seguían dormidos y el sol estaba tímido, detrás de la ventana su velo iba levantándose con el suave viento danzante aclarando la habitación donde los dos estaban durmiendo profundamente hasta que los tímidos y blanquecinos rayos de sol llegaron a traspasar el vidrio para reposar en las mejillas del moreno que por la molestia fue abriendo los ojos hasta dar por entender que estaba despierto ahora, observo desde la ventana el hermoso espectáculo que se daba en el amanecer y suspiro levemente, sin embargo, cuando siente un peso encima de su cuerpo intento ver que era hasta dar con la sorpresa, el albino estaba abrazado a el, un sonrojo se le formo en el rostro y luego de verle tan dormido como un ángel una sonrisa se le formo que relajado se quedo quieto unos minutos mas a contemplarle.

Minutos después el albino se iba despertando al tiempo que se iba levantando un poco con ayuda de sus antebrazos para rascarse los ojos soñoliento estirándose un poco la espalda para tronársela.

-Buenos días.-

*Buenos días Shirou.*

Dijo suave el moreno pues aun era de mañana así que poco a poco los dos se fueron levantando, uno iba a cambiarse y el otro a hacer el desayuno, luego era al revés, hasta que terminaron por comer juntos en la misma mesa y por vestirse con sus uniformes normales y así salir los dos sonrientes hacia el instituto, la diferencia de horarios de los dos era muy grande, d2 horas para llegar desde la casa de Fubuki mientras que el moreno solo tomaba 20 minutos en auto y 1 hora en caminata, sinceramente increíble.

*¿Por que no me dijiste que tenías que madrugar para venir?*

-Pensé que no te interesaría...-

*Tonterías... Claro que si, si hubiera sabido te hubiese ayudado...*

-No hay necesidad... Después de todo ya me acostumbre...-

Entraron a sus respectivas clases para más tarde seguir hablado de lo mismo, pero afuera del instituto estaban unos señores hablando en conjunto frente a un auto entre susurros mirando que nadie mas estuviese cerca.

¿?: Entonces ¿han hecho algo para encontrar la clave?

¿: No, no he logrado nada, además de eso pareciera que la han escondido muy bien.

¿¿: No seas idiota, solo debes esperar al que el señor duerma y ya, se la arrebatas.

¿?: Ese es el problema, su caja fuerte es sumamente difícil...

¿??: ¿Pueden callarse ya?

Esta vez dijo una voz femenina que les callo a todo el grupo de hombres frente al auto.

¿??: Solo debemos seguir esperando para que el viejo siga perdiendo las fuerzas, a parte de eso su hijo tampoco debe enterarse de lo que sucede ¿ok?

¿?: Sigo sin entender como lo involucras en este asunto...

¿??: Ese mocoso es entrometido, si sigue alado de él nos traerá problemas, por eso necesito alejarlo lo más posible de ese niño tan... Tan...

¿?: ¿Gay?

¿??: No era necesario decir esa palabra...

¿?: Vaya que tu homofobia es aterradora...

¿??: Ya cállate, bien, sigamos con el plan, pero no levanten mas sospechas...

Ya cuando el auto arranca los hombres se van en diferentes direcciones, la campana de receso sonó y ahora los chicos tocaban de ir a su siguiente clase la cual era el entrenamiento, era por equipo así que los que estaban en las bancas estaban conversando, el albino estaba solo dibujando y escribiendo en su libreta sonriendo perdidamente sin prestar mucha atención hasta que la voz del capitán fue la que hizo que saliera de sus pensamientos, miro al equipo jugar entre ellos y más cuando el moreno jugaba, en verdad estaba perdido en su mirar, cada vez que le miraba para saludar se sonrojaba y desviaba la mirada después de responder el saludo.

Así iba por durante los minutos que pasaban, honestamente estaba todo tranquilo que podría dormir unos minutos pero no tenía sueño así que solo disfrutaba del silencio que emanaba del ambiente hasta que el suave ruido de una ardilla le saco de sus pensamientos, sonrio mientras le miraba acercarse para dejarse tocar por el hasta irse con la otra ardilla revoloteando alrededor. Aunque la verdad miraba con nostalgia aquellas escenas, no por el simple hecho de que estaba sencillamente solo sino porque variados recuerdos de su niñez hundieron su mente.

-vaya que días...-

Dijo para sí mismo antes de que el grito del castaño le llamara la atención y justo cuando voltea se lo encuentra corriendo detrás de el con su característica sonrisa de oreja a oreja para intervenir en el momento, bueno era necesario después de todo ya que estaría al punto de ponerse nostálgico por los recuerdos de las viejas memorias de cuando era niño se la pasaba más que todo con su hermano Atsuya y para quitarse la nostalgia o depresión le costaba, aunque lo disimulaba bien para la mayoría de los muchachos, así que cuando iba caminando con el castaño hablando de lo que siempre hablan fueron a la ciudad a comprar unas sodas para la tarde, al parecer harán reunión en la cancha para ver las estrellas, no había nada de malo solo que esperaba que no hicieran esos retos de "verdad o reto" porque sabe que terminaría perdiendo.

Por fin compraron todo, hablando entre los dos pasaron las horas rápido y nuevamente llegaron a donde irían a acampar, suerte siempre guardan sus sacos de dormir dentro del bus para no ir a sus casas y regresar el camino de vuelta. Luego de ello uno tras otro fue preparando la cena y algo de merienda para la noche en caso de que alguien al despertar le de hambre.

Haru: muchas gracias por ayudarme shirou-san

-de nada haru-san ¿no hay nada mas?-

Haru: no, es todo.

Por si preguntan los dos estaban cargando las mantas, almohadas y algunos colchones extras mientras caminaban despacio para que no se vayan a caer mientras que los demás marcaban sus puestos fuera del bus y así no tener inconvenientes, pero como estaba seguro cada pareja estaría junta entre sí, así que intentaba ignorar ese hecho y concentrarse en su deber, de vez en vez miraba a los chicos unos segundos y regresaba a su trabajo lo cual no era mucho pero tampoco quería estar de adorno.

Cuando se termino de acomodar todo tomo su colchón para buscar un lugar ideal para estar lejos de la incomodidad y al mismo tiempo donde pueda ver las estrellas...

*¿A dónde vas?*

Aquella voz además de asustarle le paralizó, busco con la mirada hasta encontrar con su paradero quien estaba saliendo de unos árboles como es de costumbre y con esa mirada típica de el que puede ahuyentar a cualquiera, menos al albino quien después de suspirar le sonríe un poco.

-oh, jeje solo buscaba donde poner el sueño.-

*¿A este lugar? ¿No es algo peligroso?*

-¿peligroso?-

*Si, posiblemente estén merodeando las bandas buscando carne seca...*

-eehhmm... Y-ya veo...-

Bien eso le ha puesto nervioso, nunca le gusto saber sobre esas pandillas que buscaban secuestrar a la gente para sus caprichos y demás cosas, y saber que en donde iba pueden presenciarse mas era mejor cambiar de posición.

-E-en ese caso iré a ver que otro lugar tomar jeje.-

El pelicrema no entendía mucho, suspiro un poco y se quedo a ver como el albino se iba de su lado a otra parte, parece que su plan no resulto como pensaba así que decidió seguirle por detrás.

*Oi ¿puedo ir contigo?*

-Eh? Seguro?-

*Si... aun no encuentro un lugar donde quedarme.*

Bien eso cambió la cosa, su sonrisa y el asentir con la cabeza le hizo continuar con el pelicrema en busca de un lugar ideal para los dos.