-Buenos días –le susurré arrodillándome en la cama
-Buenos días –dijo abriendo los ojos lentamente
-Voy a ducharme, prepara el desayuno, ¿si? –le di un beso en la mejilla y me levanté de la cama
-Está bien –se levantó de la cama y salió rumbo a la cocina
Fui al baño y me duche. Fui a mi habitación y me vestí.
Bajé a la cocina donde Liam había servido el desayuno. Lo tomamos dándonos de comer el uno al otro. Después fuimos a limpiarnos los dientes, y nos montamos en su auto.
-¿Qué haremos esta tarde? –preguntó mientras conducía
-Lo siento, hoy he quedado con mis amigas para ir al cine
-¿Y no puedes no ir?
-Vamos Liam, son mis amigas, llevo mucho tiempo sin salir con ellas
-Es que quiero pasar todo el tiempo posible contigo –dijo poniendo carita de niño
-No pongas esa cara, que se lo he prometido a mis amigas
-Está bien –dijo y bufó
-¿Te has enfadado? –dijo poniendo mi mano en su hombro
-Claro que no me he enfadado –me sonrió amablemente- no puedo enfadarme contigo
-¿Ahora me copias las frases? Haber si te voy a denunciar por plagio –dije divertida y Liam rio
-Mi niña, no sabes cuanto te amo –me tomó de la mano mientras seguía conduciendo con la otra
-Yo también te amo –entrelacé mis dedos con los suyos
-Oye, ahora que me doy cuenta, ¿desde cuando no te molesta que te llame niña?
-Desde el día en que dijiste que era tu niña –le sonreí y el me devolvió la sonrisa
Me dejó en mi instituto y me bajé del auto. Me despedí de él y entré. Las clases pasaron muy lentas, pero al final sonó el timbre de salida.
Liam fue a recogerme como cada día y fuimos a casa. Subí corriendo a mi habitación y tiré la mochila al suelo. Entré en el baño y me arreglé para salir.
Entonces sonó la bocina de un auto y bajé corriendo. Busqué a Liam por la casa pero no lo encontré. Entonces vi una nota en la mesa de la cocina.
He salido con Louis, te veré más tarde.
Te amo, Liam
<< Que majo, ni siquiera se ha despedido con un beso >>
Cogí la nota y lo metí en un bolsillo de mi bolso. Salí de casa y en frente estaba aparcado una gran furgoneta.
Me subí al auto y me senté al lado de Naty.
-Hola a todos –dije
-Hola –dijo Harry encendiendo el motor
-¿De quien es este coche? –pregunté
-De mi hermana –dijo María
-Creía que tu hermana no le dejaba el auto a nadie
-Digamos que se lo he cogido prestado –dijo poniéndose sus gafas de sol
-Si claro… -dije riendo
-Louis dice que nos están esperando –dijo Monse mirando su móvil
-¿Louis va a venir? Liam me dijo que iba a salir con él –pregunté
-Es que vienen los dos –me respondió Mich
-Ah, está bien. ¿Y Zayn no viene? –pregunté
-No, dijo que tenía algo que hacer –concluyó Harry
Llegamos al cine donde Louis y Liam nos esperaban.
-Hola amor –dijo Mich abrazando a Louis
-Hola cielo –dijo el estrechándola contra su pecho
-Que sorpresa verte aquí –le susurré irónicamente
-No iba a estropear la sorpresa –me dijo también susurrando- además, no te librarás tan fácil de mi
-Nunca he dicho que quiera hacerlo
-Chicos, ¿Qué vamos a ver? –preguntó Naty
-¿Y si vemos The posession? –preguntó Harry emocionado
-¿Y si te pego en la cabeza con un bate? –preguntó María en el mismo tono de voz
-Ok, ya lo pillo –bajó la cabeza
-¿Y si vemos “Lo imposible”? –preguntó Naty
-Si, dale, dicen que es muy buena –dijo Mich
-Y además Ewan Mcgregor esta… -dijo María mordiéndose el labio
-¿Mejor que yo? –preguntó Harry cogiéndola por la cintura
-Vamos Harry, ¿cómo puedes compararte? –pregunté rodando los ojos- Por supuesto que está mejor que tu
-¡No es cierto! ¿Verdad que no amor? –le preguntó María
-Bueno… -dijo mirando a otro lado y todos los demás reímos
Compramos las entradas y entramos a ver la película. Yo me senté al lado de Liam.
A los veinte minutos de empezar la película mis ojos ya eran un mar de lágrimas. Liam me abrazaba para transmitirme apoyo y seguridad, pero sobretodo amor.
Al acabar la película, los chicos insistían en ir a tomar algo, pero las chicas estábamos demasiado traumatizadas, así que decidimos volver cada uno a su casa.
Liam y yo fuimos a nuestra casa. Subimos a nuestra habitación y miré el reloj de la pared 21:14
-¿Quieres cenar? –me preguntó Liam suavemente
-No, no tengo apetito
-Vamos, solo era una película –me agarró de la cintura
-Basado en una historia real –apoyé mi cabeza en su pecho
-Sabes, a mi la película me ha hecho llegar a una conclusión
-¿Cuál?
-Que nunca le dices a alguien las suficientes veces que le quieres, y nunca sabes cuando será la última vez que veas a esa persona
-Es una buena conclusión –dije con una pequeña sonrisa
-Te quiero oli –dijo apartando un mechón de mi cara
-Y yo a ti Liam –lo besé dulcemente- ¿dormirás conmigo?
-Pues claro pequeña
Entré en el baño y me puse el pijama. Cuando salí Liam ya estaba cambiado. Nos metimos en mi cama y me abrazó. Apoyé mi cabeza en su pecho y me quedé dormida.