Capítulo 21: ¿Sin Amor?

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¡ADVERTENCIA!
Contenido no apto para los puritanos +18.
Ante ustedes la escena más aclamada por sus mentes. Disfrútenlo y ámenlo 😳❤️

•••


Sus labios están igual de suaves que la última vez. En esta ocasión sabe un poco a alcohol, pero es mejor que la vez anterior, cuando me besó con fuerza e ira. En esta ocasión le sigo el roce, pues de alguna manera, me sabe amargamente bien. Se siente bien tenerlo entre mis brazos y temo que en el fondo, esto es un error.

Mis manos se deslizan por su cuerpo, conociendo el camino a su cintura, a su suave nuca y sé que no debo seguir.

Él es un desastre ahora; yo un idiota insensible. Nosotros juntos somos la fórmula para el caos.

Sé que ha dejado su abrigo y la bufanda en la otra habitación, pues logro sentir tu cuerpo delgado a través de la fina tela de su ceñida camisa. Mi mano diestra en su delgada cintura y la otra, enredada en los mechones de su nuca. Doy varios pasos atrás, jalando a JaeJoong junto conmigo. Lo adentro a mi sagrada habitación, jamás pisada por nadie, excepto mis padres, anteriores dueños de esta recámara. Fue antes que compraran otra casa para ellos y dejaran esta para mí. No debería permitir su entrada; pero lo hago igual.

«¿Qué demonios haces YunHo?», me pregunto y sin embargo, no evito mis impulsos.

Estamos a unos pasos de mi cama. La distancia se ha hecho pequeña, demasiado. Reaccionó al dejar sus labios libres. Con todas mis fuerzas me aferro a los vestigios de cordura flotando en el aire, no puedo permitirme perder el control. No con él.

Mi respiración es irregular; la de Kim es jadeante.

Centro mis ojos en los suyos. Los suyos brillan expectantes, ansiosos. ¿Cómo fue que este chico se fijó en mí siendo yo tan aburrido?

Trato de negar sus sentimientos, de fingir no darme cuenta e incluso he llegado a no creer ninguna de sus declaraciones románticas. Ahora ya no es posible. Su mirada no miente y me asusta darme cuenta de ello.

No sé la razón de su insistencia. Me preocupo más por sujetar mi cordura de un hilo resbaladizo; y quiero comprobar si él sabe el significado de lo que me pide con su expresión anhelante.

Mis manos acarician las suaves mejillas de su rostro, sus ojos me observan, de manera profunda. Este rubio tonto me pidió "lo que sea" y yo le advertí. Le daré caricias sin amor, besos indecentes y sexo sin compromiso.

Justo en este instante, con los últimos momentos de sensatez, me pregunto si en realidad a JaeJoong no le importa recibir migajas de mí, porque es todo lo que puedo darle.

—Si continuamos no habrá retorno —me escucho decir con voz ahogada.

—No me importa —Jae susurra mientras me mira con intensidad—. Por favor, no me alejes de tu lado —. Entonces me rindo.

—JaeJoong idiota —digo burlón para enseguida hacernos girar a ambos para que sea el rubio quien esté de espaldas a mi cama y no yo.

Lo empujo; cae en la cama, suspira ansioso y me subo encima de él cual depredador dispuesto a comer a su presa. Ataco sus labios, besándolo con hambre. Él corresponde sin queja.

Mis manos, con vida propia, empiezan a subir su camisa con intensión de tocar la piel expuesta, luego pasan a desabotonar la prenda. Él suspira y posa sus temblorosas manos en mi pecho donde también comienza a desabrochar mi camisa, esa blanca sencilla que HeeChul me hizo usar para hacerme ver elegante.

Ambos nos incorporamos un poco en el proceso. Cuando termino mi trabajo en los botones de su camisa, él no lleva ni la mitad de la mía. Estamos sentados frente al otro, noto su nerviosismo y trato de ayudarlo a quitar mi camisa, sin embargo; obstinado, aparta mis manos y acaba rompiendo los últimos dos botones. Sonrío ante su torpeza y mientras deslizo su ropa por esos suaves hombros, besó su cuello.

¡Ámame!  [YunJae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora