Mi rayo de luz (FredxGeorge)

17

Draco entro a la sala común de los leones con cuidado, agudizando el oído y dando pasos silenciosos, por alguna razón que no conocía, Harry lo había citado allí y no en la torre de astronomía como solía hacerlo siempre.

"La clave es Quiddich lo sé, es tonta, recuerda usar la corbata que te di y no le des la cara directamente a la señora gorda, finge leer o algo Dragón".

Fácilmente entró al lugar, solo tuvo que meter su cabeza en un libro de transformaciones y decir la contraseña, la señora gorda no lo miró, muy interesada en lo que debía decir una de sus amigas sobre un Huffelpuff y un Ravenclaw escabulléndose de noche por los pasillos.

"Nuestra habitación es la cuarta en la zona de tercer año".

Subió las escaleras y miró las puertas en el pasillo, buscando la zona de tercer año y concentrándose en una palabra de la nota "nuestra" ¿los leones no tenían habitación propia?.

Se sobresaltó levemente al escuchar un golpe secó en una, luego las voces de los inconfundibles gemelos “¿Estas bien Fred?”, “Si. Muy bien, rayos”.

—No entres-susurró para sí—.Luego interrogaras al pelirrojo torpe.

Apuró su paso, y finalmente llegó a las habitaciones de tercer año, fue a la tercera habitación y dio seis golpes a la puerta, el primero pausado, tres seguidos y dos nuevamente pausados, como lo decía en la carta.

—Llegó–escuchó la voz de Ron al otro lado.

—Yo voy–se escuchó a la castaña y luego de escuchar como algo rasgaba el aire se escuchó un "clic" y abrieron la puerta.

Entro sin dudar, observando el lugar con curiosidad, era claramente más pequeña que su habitación en Slytherin, habían literas acomodadas contra las paredes, el color rojo y dorado abundaba en el lugar haciéndolo ver un poco oscuro y había una cantidad de cosas desperdigadas por todo el lugar, clara nuestra de que allí dormían cinco chicos.

—Bien...–el Slytherin paso sobre una pequeña montaña de libro y fue hasta Harry–.Esto es...¿lindo?.

Harry sonrío y lo atrajo hacia él en un abrazo—.Claro dragón, claro.

Draco río bajo y se sentó en la cama de su novio, la castaña volvió a cerrar la puerta con magia y se sentó al lado del pelirrojo en otra cama.

—¿Qué hago aquí?–quiso saber.

—Te habláremos sobre nuestro plan para...

—Para salvar al hipogrifo que el idiota de tu casa condenó muerte–interrumpieron los gemelos entrando al lugar.

—¿Como...?

—Ese hechizo solo detendría a alguien de primer a tercer año Mione–dijo George con tranquilidad–.Por suerte ahora tenemos a un sabelotodo avanzado que tiene un pase a la zona prohibida de la biblioteca.

Fred rodó los ojos y cerró la puerta con un movimiento de varita, se acercó a donde estaban y tomó lugar al lado de Hermione.

—Bien, podemos empezar la reunión.

Los menores los miraron por segundos y luego empezaron a contar el plan detallado que tenía para rescatar al hipogrifo, Fred asentía entendiendo, sin embargo solía ver hacia cualquier lado buscando a Scabbers, preguntándose donde pudo haberse metido.

George tenía una libreta muggle al igual que un bolígrafo, y con letra apresurada escribía en las paginas, fingiendo solo hacer garabatos y prestar atención al plan.