Ese día Castle se levantó con una hora de antelación, por lo que cuando llegó al Heat Café lo último que esperaba era volver a encontrarse a la misma mujer que el día anterior había ocupado su espacio vital sentada exactamente en el mismo lugar. ¿Cómo era posible? Había llegado media hora antes, la cafetería acababa de abrir y solo estaban Martin, la misteriosa mujer y él. Era desesperante.
- Lo siento amigo, lleva aquí desde primera hora. —Le dijo Martin intentando esconder su diversión ante la situación.
- Tengo que solucionar esto de alguna forma, prepárame lo de siempre. —Sin esperar respuesta se fue directo hacia la mujer.
Conforme se acercaba comprobó que estaba leyendo algo, disimuladamente le echó una ojeada por encima lo suficiente como para ver que se trataban de unos papeles de divorcio.
Interesante.
- ¡Hola otra vez!—La saludó mientras tomaba asiento delante.
Ella casi se atraganta con el café en respuesta, recogió los papeles que tenía repartidos por la mesa y los escondió debajo de una carpeta.
- ¿Qué es lo que quieres?—Le dijo fríamente.
- Solo sentarme un rato aquí y disfrutar de las vistas.
- ¿Te importaría sentarte en otra mesa? Como ves, esta ya está ocupada.
- He ahí el problema, llevas dos días sentándote en mi mesa. A mí no me importa compartirla contigo, pero si tu tienes alguna queja, puedes cambiarte sin ningún problema.
- No veo por ninguna parte que esta mesa lleve tu nombre, yo he llegado antes, así que te vas tú.
Castle vio la determinación de sus ojos y se sintió atrapado en ellos por entero. Ella no se echaría para atrás y el tampoco tenía pensado hacerlo.
- Mira, no sé cómo explicártelo, pero esta es la única mesa que me interesa de toda la cafetería, te prometo que no lo hago por molestarte y que si te cambias de mesa no volverás a tener problemas conmigo.
Tras esto, ella cambió a una posición más relajada. Castle podía decir que la había convencido, aunque no se esperaba para nada lo que iba a venir a continuación.
- ¿Quién es ella?—Le soltó.
Esa pregunta no la habría visto venir ni en un millón de años.
- ¿Perdón?—Se hizo el tonto.
- La mujer a la que espiabas ayer. —Le dijo tan tranquilamente como si hablaran de ello todos los días. Y entonces lo vio, una chispa de diversión en su mirada. Ella estaba disfrutando con su incomodidad. —Porque por eso quieres quedarte en esta mesa ¿no? Para seguir acosándola entre las sombras.
- ¡No la acoso!—Le dijo exaltadamente. —Simplemente la observo, esperando que vuelva a...—y se calló. ¿Por qué tenía que defenderse ante una desconocida?
- Ummm, así que la conoces.
Es buena.
Castle decidió contraatacar, dos podían jugar a este juego.
- ¿Te estás divorciando?
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Heat cafe
FanfictionComo cada mañana, Castle observaba a su musa desde el Heat Café, pero aquella mañana fue distinta y aunque el no lo supiera todavía, ese nuevo cambio era lo que le hacía falta para volver a reconducir su vida. AU (Universo Alternativo).