Yusuke me dijo que "me quería" y me dio un abrazo. A pesar de que se sentía algo acogedor estar entre sus brazos, no pude soportarlo y lo alejé de mí:
—Por favor, no vuelvas a hacer eso.
—Lo siento, no quería ofenderte, Yui.
—¿Por qué ahora estás diciéndome esto?
—Porque en mi viaje tuve tiempo de pensar en mis verdaderos sentimientos —en ese momento, él me acaricia la mejilla—. Yui, me gus...
Antes de que terminara de hablar, Toma llegó con un almuerzo, abriendo la puerta fuertemente:
—¡Yui! Al fin conseguí un almuerzo para ti. Mi chef personal lo hizo, espero que te guste—. Entonces se da cuenta de que Yusuke estaba cerca de mí y lanza el almuerzo sobre él—. Oye... ya te dije que no te acercaras a ella —dice fríamente.
—¡Cómo te atreviste a lanzarme tu comida!
—¡Porque... porque... eee... era lo único que tenía a la mano!
—No eres más que un idiota.
—No me digas idiota —Toma agarró a Yusuke de su camisa y cuando estaba a punto de golpearlo, yo tuve que intervenir.
—¡Par de idiotas! —mientras me limpio los ojos porque se me entró algo de arroz—. Ya me cansé de todo esto, y ya no estoy para soportarlos. Si no arreglan las cosas entre ustedes dos, no volveré a hablarles.
—Yui, pero ¿cómo iba a dejar que este idiota te tocara?
—Y yo, ¿cómo dejaría que este estúpido idol se quede contigo?
—¿Qué sería de mí si te pasara algo? —repiten los dos al unísono.
—Si tanto quieren "protegerme", entonces ¡aléjense de mí!, que yo soy la más afectada —en ese momento me fui. Ya estaba cansada y me ardían los ojos por el arroz que me cayó encima. Estaba hecha un desastre. Me encontraba en el patio trasero de la escuela; pasó un momento y las lágrimas salieron. ¿Por qué le dije a Toma que se alejara de mí? Me arrepiento por haberle dicho eso—. Lo siento, Toma —dije entre susurros.
—No te preocupes, Yui —en ese momento, él apareció detrás de mí.
—¡¿Qué... qué haces aquí?!
—No quería dejarte sola —dice con la cabeza abajo—. Ya sé que te lo dije unas mil veces, pero perdóname, Yui.
—To... Toma... —le di un abrazo y lloré en su pecho.
—Por un momento pensé que lo dijiste en serio... y creí que había perdido a la única persona que quería en verdad —Toma apartó su mirada por un segundo—. Yui, eres lo más preciado que tengo en mi vida —estaba algo sonrojado y luego me dio una mirada amable y cálida.
—Te ves gracioso cuando te sonrojas —lo miré a los ojos. Amaba todo de él, porque su presencia siempre me calma.
—¿Q-qué estás diciendo? —me mira de reojo—. Jejeje, eres tan tierna, Yui —mientras acaricia mi cabello.
—Toma, ummm... —Quería preguntarle si en verdad estábamos juntos, pero las palabras se me cortaron.
—¿Sí, Yui?
—N-nada... nada, ya me olvidé de lo que iba a decir.
—Tonta, ¿quién se olvida de lo que tiene que decir? —me revuelve el cabello y me da un beso en la frente.
—Huum... yo —Era un momento muy dulce, sólo los dos juntos. No me importaba nada más.
—Yui, ¿quieres ser...?
Toma fue interrumpido por Hanae, que llegaba corriendo. Me alejé un poco ya que no estaba para soportarla:
—Toma, querido, ¿qué haces con esta chica aquí? Creía que íbamos a irnos juntos como la otra vez.
No puede ser, ¿ellos se fueron juntos? ¿Por qué no me lo dijo? Toma... Me fui corriendo de ese lugar, pero alguien me detuvo...
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Enamorada de un Idol...?!
RomanceYui es una chica normal como cualquier persona, hasta que un Idol ingresa a su escuela y no la deja en paz desde el primer día que la conoce..