-Mamá me dijo que te gustaba Travis –Era la segunda vez que Rachel me decía eso y, como ignorarla no sirvió, tuve que recurrir a otra opción.
-Mamá esta equivocada, Rachel –Intentaba hacer zapping por los canales de televisión pero la voz de mi hermana me desconcentraba. Rodee los ojos, le tire una almohada e intente ver la televisión nuevamente.
-Travis y ________, sentados en un árbol, dándose… -Al parecer a mi hermana se le había quitado todo su dolor de estomago, pues podía cantar perfecta y chillonamente.
-¡Que no Rachel!
No supe en qué momento o como, pero Rachel se había quedado dormida. A estas alturas lo único que se podía escuchar era su respiración y la televisión de fondo. Estaba completamente aburrida, por lo que telefonee a Travis para invitarlo a mi recamara, para mi mala suerte, este había salido con su mamá.
Encendí el computador y, aunque no había nada bueno para ver, deje encendida la televisión pues, si la apagaba, me iba a sentir completamente sola. Lo primero que hice cuando entre en internet fue chequear si es que Shanna estaba conectada. Pero hoy, al parecer, todos mis amigos habían decidido salir.
Como siempre que estoy aburrida y no sé qué hacer entre en Twitter. Lo primero que me llamo la atencion es que tenía una gran cantidad de notificaciones. Luego, al ver la cantidad de seguidores que tenia, mis ojos se abrieron de par en par. ¿Desde cuándo tanta gente me seguía?
Como era de esperarse, los mensajes de odio que hace unas semanas vi, habían incrementado. Ahora eran más hirientes, tengo que admitirlo, pero, de la misma forma, no me afectaban tanto pues, después de lo que había pasado este fin de semana, no había nada que pudiera disminuir mi entusiasmo. O eso creía yo.
Tuve que leer un par de veces aquella frase para comprender que aquella chica estaba en lo correcto.
“No sé porque se preocupan tanto por esa tal _____. Esta solo de vacaciones allí, es como un amor de verano, después de unas semanas Luke ni se acordara de ella”
Un nudo en mi garganta comenzo a crecer. No quería ser tan sensible ante aquello comentarios pero ese, en especifico, me había dolido. ¿Por qué? Porque era absolutamente cierto. Fue como si ese mensaje me hubiese despertado de mi sueño, hubiese reventado mi burbuja. ¿Qué iba a hacer cuando tuviera que volver a Michigan? Los chicos seguirían con su vida, seguirían siendo una banda y yo, probablemente, seguiría siendo la misma chica normal, con su vida común y corriente en el otro extremo del mundo.
-Soy una estúpida –Hable para mis adentros dándome cuenta de lo mucho que me había ilusionado con Luke. Tanto que ni siquiera había medido las consecuencias. Mientras más intentaba calmarme más notaba como mis ojos se iban poniendo llorosos.
¡¿Cómo carajo una chica que ni siquiera conocía me había hecho sentir tan mal?! Probablemente si es que ella, no sé, hubiese insultado mi cabello, mi rostro o mis labios me hubiese sentido mejor. Porque cualquiera puede decirte tus defectos, en cambio, ella dijo la verdad.
-¿Servicio a la habitación? –Mi voz sonaba horrible. Casi como la de un travesti. Y es que era así, cada vez que lloraba mi voz se deformaba casi tanto como mis ojos -¿Podría traer una casata de helado a la habitación 590?
Si algo me había enseñado Shanna era que, si se iba a llorar, se tenía que llorar completamente digna. Es decir, como una estrella de Hollywood. El helado se demoro más de lo que esperaba en llegar y, cuando lo hizo, pude ver como el chico que lo traía me miraba penosamente.
¡Ugh! Me sentía una tonta. ¿Enserio creía que mi vida era un cuento de hadas? ¿Qué mi historia con él iba a ser una historia de amor? ¿Qué nos podríamos enamorar y vivir felices por siempre?

ESTÁS LEYENDO
Out Of My Limit. (Luke Hemmings y tu)
Ngẫu nhiênCabello rubio de ensueño, cabello castaño. Ojos tan azulados como el mismisimo cielo, ojos cafes. La voz más hermosa que se haya escuchado jamás, una voz más entre la multitud. Nadie habia dicho lo obvio, pero el estaba un poco fuera de su alcanze.