Out Of My Limit. (Luke Hemmings y tu)

Capitulo diesinueve.

Capitulo 19.

-Luke –Estaba avergonzada. No le había respondido los mensajes, las llamadas, nada. Me había alejado completamente de él después de todo lo que él había hecho por mí y, definitivamente, eso no tenia perdón.

-Travis me conto lo que sucedió –Luke no dejaba de mirarme, incluso cuando yo bajaba la vista. Sus ojos podían ser bastante intimidantes, aunque hermosos, cuando se esta en mi posición. Lo primero que pensé fue ‘Maldito Travis’. Pero, rápidamente, mi mente comenzo a buscar una excusa para explicarle a Luke todo lo ocurrido.

-Yo… -No sabía que decir, por eso agradecí al cielo cuando Luke me interrumpió. Al menos eso me daba más tiempo para idear una idea, o al menos, juntar dos palabras que tuvieran sentido.

-Y te entiendo –Los ojos de Luke por primera vez bajaron. Ya no me miraba a mí, miraba al cemento que cubría el piso de la glorieta. –Y sé que es injusto, y sé que nos estamos dañando en cierta forma. ¿Pero que es la vida sin un poco de dolor?

-¿Un poco de dolor? –Dije sonriendo melancólicamente. Aun no sabía a donde quería llegar Luke con todo esto.

-Si, me refiero a que tengo claro que te faltan tres semanas, prácticamente, para volver a Michigan, pero no por eso voy a dejar de quererte y…

Cerré los ojos fuertemente mientras intentaba respirar.

-¿Quererme? –La expresión del rostro de Luke fue obvia –Luke, nos conocemos hace una semana y media –Una sonrisa melancólica se poso en mi rostro, nuevamente. Pensé que Luke reaccionaria enojado, pero solo sonrió torcidamente.

-¿Es que acaso eso no lo hace mucho mejor? –Sus cejas se alzaron y tomo mi barbilla para que no tuviera otra opción que mirarlo a los ojos –Llevo una semana y media de conocerte y ya puedo decir que eres una de las chicas más especiales que he conocido. –Me sonroje en menos de unos segundos.

-Luke, esto no esta bien –Desvié la mirada pues sus ojos puestos sobre mi me ponían increíblemente nerviosa.

-Mírame a los ojos –Lo obedecí de mala gana, pues sabía que sus ojos eran una de mis debilidades –Mírame a los ojos y dime que no me quieres o que no quieres estar conmigo.

Lo mire a los ojos fijamente intentando que mis sentimientos no se vieran involucrados con su mirada. Esto era completamente injusto. ¡Claro que lo quería! ¡Lo quería antes de conocerlo! ¿Cómo no lo voy a querer? Respire calmadamente, o eso intente, para que mi cerebro trabajara correctamente para formar una frase.

-Luke, claro que te quiero –Sonreí con pensar al ver la enorme sonrisa que se ponía en la cara de él –Pero no puedo hacernos esto. ¡Si ambos nos queremos no es justo que nos rompamos el corazón el uno al otro!

-________ -Mi mirada estaba perdida en uno de los arboles de la plaza. Sabía que si lo miraba a el cedería, pero en el momento en el que mi nombre salió de sus labios, de manera tan profunda, no hubo caso. Tuve que mirarle. –Dejaría que me rompieras el corazón una y otra vez, si es que eso significa poder estar contigo.

Claro. Claro que yo también dejaría que Luke me rompiera el corazón en miles de pedazos. Pero no todo es tan fácil ¿No? Llevábamos tan poco de conocernos que, el que me estuviera diciendo esto, me parecía casi inimaginable. Aunque tengo que admitir que, después de escuchar aquello, mis piernas tambalearon por unos segundos.

Iba a responderle algo pero, como si Luke me leyera el pensamiento, me beso. Siempre que leo novelas, las escritoras describen el beso apasionado o lento, y es que yo no tenía idea de que un solo beso pudiera ser una mezcla entre ambos. Luke sonrió en medio del beso y yo, sorprendida, abrí un poco los ojos al notar que me había mordido suavemente parte del labio inferior. No estaba acostumbrada a eso y, el que él fuera mi primera experiencia en ese sentido no me molestaba en lo absoluto.