Dessiré

Capítulo 7.-

DESSIRÉ

CAPÍTULO 7.-

Ruedo los ojos.

Me levanto y corro hacia el cuarto de baño, está repleto de olor a su perfume, inhalo con fuerza para llenar mis pulmones de ese olor a él.

- ¡Qué vergüenza!, ¡Me veo fatal! – digo al espejo mientras veo todo el maquillaje corrido de los ojos y el cabello hecho una maraña por dormirme cuando aún está mojado.

Me meto a dar una ducha lo más rápido que puedo y maldigo por lo bajo porque estoy segura de que me quedará el cabello horrible por no usar mis mascarillas para hidratarlo.

Salgo en lo que parecen dos minutos y le robo a Salvador fluoruro dental, lo aplico en mis dientes con mis dedos y doy un trago a su enjuague bucal, hago gárgaras y dejo ir el líquido en el lavabo.

Suena mi teléfono y corro hacia la cama, lo encuentro en la mesita de noche, justo de lado del "gracioso" post que Salvador me había dejado esta mañana, estoy rezando por que sea Valentina.

Leo en mi pantalla

Hoy inicia última materia de postgrado. ¡PROCURA NO LLEGAR TARDE!

- ¡Mierda!

Hoy es el primer día de mi última materia, ¡no lo recordaba! y no puedo llegar tarde, llevo mi mano a la cabeza como si eso pudiera calmar los dolores punzantes de la misma.

Son las 8:00 am y empiezo a hacer un cálculo mental del tiempo que me llevará volver a mi apartamento para vestir decentemente. Tengo 15 minutos para llegar.

Comienzo a buscar desesperadamente las llaves de mi auto y no las encuentro por ningún lado... Espera... ¡¿Dónde está mi coche?!- digo confusa en voz alta.

Me asomo por el gran ventanal en busca del Mercedes blanco y ni rastro de él ¡No puede ser! ¿Ahora cómo le haré?

Regreso corriendo al cuarto de baño. Me doy un vistazo rápido, me pongo mis vaqueros del día anterior y me acomodo la playera gris con la que antes dormí, meto los extremos por debajo de mi pantalón y encima pongo mi cazadora negra, me vuelvo a poner mis botas altas. ¡Maldición! ¡No tengo mi maquillaje!- digo en voz alta mientras desesperadamente mi vista recorre el lugar, encuentro mi top tirado en el cesto de la ropa sucia pero ¡Bagh! El olor a vomito es asqueroso, hago un puchero y lo meto a mi pequeño bolso de mano situado de lado de mi celular. Salgo lo más rápido que puedo y hago la señal de alto a un taxi, se detiene y subo.

- A la Universidad de Estudios Superiores, por favor – ordeno al conductor.

Son las 8:27 am cuando bajo del auto, le tiendo en la mano un billete al señor del taxi y salgo corriendo hacia los pasillos importándome poco el vuelto. Anteriormente escuché un rumor que la materia de "Master Álgebra Integral "iba a correr a cargo del Dr. Ross, un viejo amargado lleno de sabiduría y la persona más exigente que he conocido jamás, así que apresuré el paso lo más que puedo.

8:29 am y entro al salón de clases, ocupo el lugar número 5 de la fila 5.

Mi mirada recorre el aula y encuentro rostros que no conozco, algunos chicos me ven y sonríen para mí. ¡Genial! Ya ni porque uno parece recién salida de una película de zombie dejar de coquetear. Así que sin perder el tiempo, también regalo mi mejor sonrisa acompañada de un movimiento coqueto de cabello.

- Buenos días jóvenes.- dice el profesor al entrar al aula.

- ¡Oh por Dios! – Exclamo al reconocer la voz.