DESSIRÉ
CAPÍTULO 6.-
La luz del amanecer que entra por los ventanales molesta a mis ojos, trato de abrirlos y veo una habitación totalmente blanca. Volteo lentamente mi mirada hacia mi mano derecha situada debajo de una manta, pues siento que alguien la toma con delicadeza, temerosa veo quien se aferra a mi mano y veo un cabello dorado reposado sobre la cama, igual que cuando alguien se queda dormido en el pupitre del salón, su cabeza estaba oculta en sus brazos mientras que su cuerpo estaba sentado en el sofá a lado de la cama.
Es Salvador. Puedo reconocerlo fácilmente, él lleva solamente los vaqueros puestos. Lo observo detenidamente y compruebo que está dormido. ¡No puede ser!, ¿Qué pasó anoche?
Trato de hacer memoria de lo que ocurrió, cierro de nuevo mis ojos y sólo puedo ver como flashes con algunos momentos. Por mi mente pasa el rostro de Iván, después un apretón en mi trasero y todo se vuelve confuso. Entrecierro mis ojos tratando de buscar más información de que me ocurrió, veo ahora como un hombre de una cazadora negra me lleva cargada hasta su coche, sube unas escaleras y me lleva a una recamara, me mete a un cuarto de baño y empieza a quitarme la ropa y meterme en la ducha, no puedo más y termino vomitando encima de él. Él me sienta en la taza del escusado mientras se quita la playera sucia por mí y enjuaga mi cabello que tiene restos de vómito, logro rescatar unas frases que mi memoria guarda:
- ¡Mira nada más como te pusiste!.. No puedes estar haciendo esto, y ¿dónde está tu noviecito? Claro que sabía que todo esto era una farsa tuya, pero no te preocupes ahora, tienes que descansar Dessiré, yo te voy a cuidar.
Sonrío al recordarlo y el dolor en mi mejilla derecha hizo llevarme la mano izquierda al sitio y notar un raspón.
Luego recuerdo la frase que me dijo justo unas horas antes "Tal parece que ésta noche dormiremos juntos" y siento una punzada en el estómago de rabia de solo imaginarme.
Volteo mi mirada, y veo que tengo puesta una playera gris de hombre y unos calzoncillos color celestes. ¿Es enserio que me puso su ropa?
Traté de hacer el menor movimiento posible pero Salvador levantó de golpe su cara y yo en automático cerré los ojos, me soltó la mano, se paró y se metió a la ducha.
Abrí los ojos pero no supe que hacer, así que me quedé mirando al techo mientras escuchaba que dentro del cuarto de baño, Salvador comenzaba a cantar, y me reí por lo bajo por lo mal que cantaba. Llevé mi mano a mi boca para impedir que saliera alguna carcajada. Mi vista hizo un viaje por toda la habitación, Salvador salió del cuarto de baño y yo cerré los ojos simulando seguir dormida. Sólo tenía una toalla blanca alrededor de su cintura, él se giró al espejo para peinar su cabello y yo abrí un ojo para verlo. Quitó la toalla de sí, dándome una vista a sus preciosas nalgas y su perfecta y trabajada espalda- Si no fueras un completo idiota ya te habría follado ahora mismo.- pensé. Vi que escribía algo sobre un papel y volví a cerrar los ojos.
Pude adivinar por los sonidos cuando se puso la ropa, y los zapatos. Se acercó a mí y depositó un beso en mi frente, luego escuché cerrarse la puerta.
Abrí los ojos y vi la nota que estaba en la mesita a lado de mí, la tomé entre mis manos y leí:
¡Qué vergüenza contigo, borracha!
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Dessiré
Ficção AdolescenteElla es hermosa y lo sabe. Utiliza su perfecto cuerpo y sus encantos para siempre obtener lo que quiere. Es egoísta, malcriada y jodidamente sexy. Su nombre es Dessiré que en traducción al español significa "Deseada" y en definitiva no hay mejor des...