Capitulo 3 ~•~ Capa negra

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—Esta bien, traeré el informe con el proyecto la próxima semana. Solo no dejes que esto se vaya abajo.

Colgué el teléfono y me estire como es debido. Tomo el maletín y salgo de ahí. Según yo, está era la última empresa del día ya que ayer entregué los registros que me faltaban, hoy estoy al día.

El celular en mi bolsillo empieza a sonar.

—¿Cari?

Chris ¿Tardas mucho? Lynn ya tiene la comida lista y debo mencionar que esta deliciosa. —Hablo con la boca llena.

—¿No se supone que deberías esperar a que yo llegue para probar la comida?

Se supone. Solo date prisa y comamos, este bebé está hambriento —Cuelga la llamada sin decirme nada más.

Dejo el celular y empiezo a bajar las escaleras del edificio. Si me pongo a pensar en cuántas escaleras estoy bajando seguro me caigo entonces supongo que mejor no lo hago. En la bajada me quito mis gafas de descanso y empiezo la búsqueda de las llaves de mi auto, se pierden más fácil que las llaves de casa.

—Joven Christopher, gracias por venir hoy, que tenga una linda noche. —La recepcionista se despide cordialmente, igual que siempre. Ella es muy linda y formal pero supongo que hasta allí.

—Igualmente Leah, descansa.

Cierto la puerta detrás de mí y voy directo al estacionamiento, saco un cigarrillo de mi bolsillo y lo enciendo rápido.

¿Donde demonios deje el auto?

Me quedo quieto mientras espero a que la imagen de mi auto aparezca en mi mente recordándome donde lo deje y mientras tanto inhaló el cigarrillo. Cuando la imagen de mi auto llega a mi mente voy por el sin mucha prisa.

—Joven.

Brinco del susto y me giro de inmediato.

—Que susto el que me has metido. —Sonrió nervioso. A este señor no lo conozco. —¿Pasa algo... Señor?

—Es usted ¿Christopher Whelan?.

El señor de por lo menos unos cuarenta años no me quita los ojos de encima y eso enserio me parece sospechoso.

—Soy yo. ¿Quien es usted? —Cuestiono. Tiene un traje blanco y muy formal, supera a todos los estúpidos directores que ví hoy.

—Lo tenemos jefe, ya voy con el paquete. —El señor saca un radio de su pantalón y cuando termina de hablar dos chicos más salen de entre los autos.

—Espere espere, ¿Esto es una broma o algo?, porque es de muy mal gusto. Explíqueme que está sucediendo.

Intento alejarme cuando veo que los tres vienen por mi.

—Usted vendrá con nosotros.

—Esta equivocado, créame no soy la persona que... —Los chicos me toman de los brazos y me jalan hasta un auto gris.

Y una mierda, maldita sea.

Con el cigarrillo quemó a uno de los hombres y logro liberar mi brazo, intento salir y golpeó al otro chico con mis pies, me muevo en todas las direcciones intentando soltar el agarre que tiene en mi. Y de alguna forma, lo logro.

Corro de allí directo a la salida del estacionamiento y luego en la calle.

Ningún puto taxi me va a parar siendo las diez de la noche así que corro lo más rápido que puedo hasta la estación de bus que está a unas cuantas calles.

—¡Ahí está! —Escucho el grito del señor viejo.

Joder. Saco el móvil y rápidamente marco a Carina.

Protegerte (PTG)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora