Protegerte (PTG)

Capitulo 16 ~•~ Para esto estás vivo.

POV Christopher

—¡AMO BRASIL! —Según yo, Lion había olvidado rápidamente el hecho de que Kenan no le dio un sedante para el avión, pues no hacía sino gritar desde que dejamos el aeropuerto. No puedo juzgarlo demasiado tampoco, el clima era tierno conmigo y la ciudad se veía increíble a primera vista.

—¿Dónde vives? —Pregunto Aria directamente a Nice, quien se sentía realmente ansioso.

—En un bosque sin nombre ni dueño, yo puedo irme ya. —Anuncio Nice.

—Nuestra misión es entregarte a tu mate, sano y salvo, si alguien te vuelve a secuestrar yendo a tu hogar ¿Quién crees que pagaría los platos rotos?

—Personalmente creo que sería muy demalas —Opino Kenan en vos baja, pero todos lo oímos. Sheir golpeo su nuca y este se quejó, yo solo sonreí.

—Entiendo, puedo guiarlos, pero ningún taxi nos llevara. —Advirtió Nice.

—No te preocupes, tenemos una casa aquí, nosotros te llevaremos. —Aria hizo una seña a Zander y este se alejó un poco con el celular en manos. Según Tamina, si aquí hay una cabaña de los Black, también debería haber un auto.

Esperamos un momento hasta que dos jeep negros se estacionaron frente a nosotros y salieron increíblemente, dos adolescentes, tal vez de 16 años cada uno. Woooow, ¿Eso es siquiera legal?

—¡Señora! —Gritaron ambos y saltaron directamente a los brazos de Aria quien solo les dio una mirada no tan cruda como lo esperado. —¡Todo está en orden para usted! —Anunciaron y ahora Aria si les dio una sonrisa ladeada.

—Phillips, Howl, gracias. Pueden volver a su hogar. —Dicho eso, les entrego una moneda de oro a cada uno y ellos salieron de nuestro campo de vista luego de entregarle las llaves a Aria y Zander. —Vámonos. —Aria tomo el mando del primer auto y en el mismo estábamos Tamina, Nice, Kenan y yo. Zander estaba con el resto del clan. Aria simplemente seguía las indicaciones de Nice quien parecía estaba muy relacionado con la ciudad, yo pensaba que por ser un lobo solitario el sería un hombre de las cavernas pero al menos él no era así. Conforme el tiempo pasaba la ciudad se alejaba y empezábamos a entrar en territorio montañoso, rodeados de árboles y siguiendo un único camino, la noche aun no caía pero asumí que faltaban al menos dos horas para que el sol se escondiera completamente.

—Es por aquí. —Declaro Nice y Aria detuvo el auto. Todos bajamos y nos dejamos guiar por él, al fin y al cabo solo el sabia donde vivía. Entramos al corazón del bosque y luchamos contra los árboles que a veces jalaba nuestras ropas y nos detenían. Justo cuando pensé que realmente tenía pensado secuestrarnos, frente a nosotros apareció una cabaña muy humilde pero muy hermosa. Y desde aquí se veía el movimiento de la chimenea pues el humo era abundante. Sin nosotros hacer un solo ruido, de la cabaña salió una mujer, de cabellos negros, grandes ojos y cuerpo curvilíneo con un bebe en brazos y sin notar nuestra presencia. Inmediatamente Nice corrió hacia ella y la envolvió en sus brazos, fue lo último que vi antes de que Aria en la copa del árbol diera la señal de escondernos. Mi espalda sentía la dureza del árbol y a causa de estar de espaldas no podía ver la seguramente gran escena familiar. Solo escuchaba.

—¡Nice! ¡Cariño no sabes cómo te extrañe! ¿Estás bien? ¡¿Estas herido?! —La mujer hablaba con gran velocidad y con el llanto que solo una esposa podría tener.

—Arianna —La voz de Nice se oía quebrada, seguramente también estaba llorando. —Los amo demasiado, demasiado.

—Y nosotros a ti cariño, enserio, gracias por volver —El llanto de la mujer pronto fue acompañado por los de su bebe.